La Justicia inhabilita al conseller de Exteriores catalán por facilitar el 1-O
- Le condena a un año de inhabilitación y le impone una multa de 16.800 euros
- Considera que desoyó al Constitucional y participó de forma "activa" en el referéndum ilegal cuando era alcalde de Agramunt
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha condenado a un año de inhabilitación y a una multa de 16.800 euros al conseller de Exteriores, Bernat Solé, de ERC, por un delito de desobediencia grave al facilitar el referéndum del 1-O en Agramunt (Lleida) cuando era alcalde del municipio.
La sentencia, que no es firme, condena a un año de inhabilitación para cargo electivo local, provincial, autonómico, estatal o supranacional a Bernat Solé, que como conseller de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia es el responsable del proceso electoral del 14F sobre cuyo aplazamiento debe decidir también ahora el TSJC.
En su sentencia, la sala civil y penal del TSJC considera que el alcalde desoyó la orden del Tribunal Constitucional (TC) de impedir el 1-O y participó de forma "activa y decidida en el desarrollo y buen fin" del referéndum, asumiendo "responsabilidades logísticas" durante la jornada de votación.
Según la sentencia, “el acusado conoció, mediante la notificación personal de que fue objeto" y mediante la publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), "lo que el TC le ordenaba y le prohibía hacer en relación con la votación del día 1 octubre 2017 en el término municipal de Agramunt".
El tribunal añade que Solé "también conocía el efecto vinculante de dicho requerimiento y las eventuales consecuencias penales derivadas de su incumplimiento”.
Solé fue juzgado por desobediencia a raíz de una querella de la Fiscalía derivada de la instrucción que, en vísperas del 1-O, dictó el entonces fiscal general José Manuel Maza para que se investigara a cerca de 700 alcaldes que estaban apoyando el referéndum en sus municipios.
Participación activa en el referéndum
El fallo recoge que Solé "no solo permitió" a la entidad Esquerres per la Independència utilizar el 25 de septiembre de 2017 un local gestionado por el Ayuntamiento de Agramunt "para la celebración de un acto público o conferencia destinada a promover la participación ciudadana en el referéndum ilegal", sino que el propio conseller "se prestó a participar en él como orador, junto a otros dos, en su calidad de alcalde de dicha localidad, además de en la de Diputado del Parlament de Catalunya, aprovechando la ocasión para alentar públicamente a los oyentes a ir a votar el día 1 octubre".
Añade el auto que “el propio día del referéndum ilegal tuvo una participación activa y decidida en su desarrollo y buen fin, personándose desde el primer momento en el centro de votación y asumiendo de forma intermitente durante toda la jornada responsabilidades logísticas, de apoyo y de asistencia a los organizadores".
Así, el tribunal recuerda que Solé procuró "puntualmente" a dichos organizadores "las noticias autorizadas que le llegaban a él desde otros ayuntamientos vecinos sobre la actuación en la comarca del Urgell de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado" dirigida a impedir el referéndum.
También añade que "colaboró decisivamente en la toma decisiones capitales, tales como la de esconder en lugar seguro las urnas con los votos depositados en su interior y la documentación comprometedora relacionada con la votación ( lasactas) o, finalmente, la de adelantar la hora de cierre de la votación, ante la posibilidad de que se personaran en la localidad las citadas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para cumplir el mandato judicial de impedirla”.
El juicio oral se celebró el 14 diciembre 2020 como consecuencia de un procedimiento por querella interpuesta en 12 febrero 2019 por el Fiscal Superior de Cataluña contra el entonces alcalde de Agramunt por la comisión de un presunto delito de desobediencia por autoridad a resoluciones judiciales, querella que fue admitida a trámite por auto de 21 marzo 2019.
El conseller sigue en el cargo y anuncia que se "defenderá"
Tras conocerse el fallo, Solé ha comparecido arropado por el resto de miembros del Govern desde el Palau de la Generalitat: "No renunciaremos a ninguna de las vías para defendernos ante una sentencia injusta y seguiremos al frente de nuestras responsabilidades, porque el país tiene necesidades urgentes", ha asegurado en una declaración institucional desde el Palau de la Generalitat, acompañado del resto de miembros del Govern.
Según Solé, esta sentencia también va dirigida a "centenares de alcaldes y alcaldesas que estuvieron al lado de la ciudadanía durante el 1-O y a los más de dos millones de personas que votaron".
La consellera de Presidencia, Meritxell Budó, ha hecho por su parte un llamamiento a "no desfallecer" ante esta nueva inhabilitación, a "no normalizar" esta situación, a "no aceptar estas sentencias injustas" y a seguir "por todos los caminos políticos y jurídicos para combatirlas". Y el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, ha denunciado que la condena a Solé "no obedece a ninguna lógica de justicia" sino que "sólo se entiende desde el prisma de quienes buscan venganza" por el referéndum unilateral del 1-O.