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Biden anula el veto de Trump a las personas transgénero en las Fuerzas Armadas

  • Da carpetazo así a unas medidas que Trump anunció por primera vez en 2017 y que limitaron los derechos del colectivo
  • Desde 2019, las personas trans se ven obligadas a prestar servicio en función de su género asignado al nacer

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Joe Biden tras firmar las órdenes ejecutivas en el Despacho Oval de la Casa Blanca
Joe Biden tras firmar las órdenes ejecutivas en el Despacho Oval de la Casa Blanca

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha revocado este lunes las medidas adoptadas por su predecesor, Donald Trump, para limitar el acceso de las personas transgénero a las Fuerzas Armadas, por entender que "la identidad de género no debería ser una traba al servicio militar".

"El presidente cree que la identidad de género no debe ser un obstáculo para el servicio militar", ha dicho la Casa Blanca a través de un comunicado, donde se ha destacado que el presidente entiende que "todos los estadounidenses que estén cualificados para servir en las Fuerzas Armadas deberían poder servir".

"Estados Unidos es más fuerte, tanto en casa como en todo el mundo, cuando es inclusivo. El Ejército no es ninguna excepción", ha zanjado Biden, que ha encargado a los secretarios de Defensa y Seguridad Nacional que apliquen la nueva orden y vigilen que no se produce discriminación alguna. Ambos departamentos deben remitir un informe a la Casa Blanca sobre estos progresos en un plazo de dos meses.

Biden da carpetazo así a unas medidas que Trump anunció por primera vez en julio de 2017 y que se tradujeron en dos memorandos presidenciales. Según datos oficiales de 2016, casi 9.000 militares se identifican como transgénero en Estados Unidos y el Departamento de Defensa concluyó ese mismo año que su integración apenas afectaba en términos de organización o coste.

Un caso que llegó al Tribunal Supremo

Al final de su mandato, el expresidente demócrata Barack Obama había previsto que el Ejército comenzara a aceptar reclutas transgénero a partir del 1 de julio de 2017. Pero su sucesor republicano primero prorrogó el plazo hasta el 1 de enero de 2018 y luego decidió dar marcha atrás por completo a esta política.

Tras varias impugnaciones, el caso llegó al Tribunal Supremo, que en enero de 2019 autorizó a la Administración de Trump a limitar los derechos de las personas transgénero a la espera del resultado de las batallas legales en curso.

Desde abril de 2019, las personas transgénero se ven obligadas a prestar servicio en función de su género asignado al nacer. Y las personas que necesitan tratamiento hormonal o cirugía de reasignación de sexo ya no pueden alistarse, ni tampoco las personas que ya se han sometido a una cirugía de reasignación de sexo.

El Pentágono calcula que de las 9.000 personas que se identifican como trans en las fuerzas armadas, unas 1.000 afirman haber cambiado de sexo o querer hacerlo. El ejército estadounidense tiene 1,3 millones de personas en servicio activo.

Una medida discriminatoria

La medida había sido criticada por los defensores de los derechos humanos por considerarla discriminatoria y por creer que llevaría a los soldados trans a ocultar su identidad de género.

Biden ha incluido el respeto de los derechos LGTBI+ entre los cometidos de su mandato y, en el proceso de formación del Gobierno, ha marcado ya un hito al proponer por primera vez a una persona transgénero para ocupar un puesto de primer nivel federal. Se trata de la doctora Rachel Levine, que aspira a ser la 'número dos' del Departamento de Sanidad.