Enlaces accesibilidad
Premios Goya

'Paraíso', el amor de un padre por su hijo enfermo que está nominado a los Goya

  • Mateo Cabeza rueda la historia de un marroquí de 10 años, que necesita un trasplante
  • Un cortometraje documental que ya ha recibido varios premios nacionales e internacionales

Por
Tráiler de 'Paraíso'

Desde los seis años el pequeño Taha tuvo problemas con un riñón y su humilde familia no encontró la ayuda en Marruecos para el trasplante que necesitaba. Así que con 10 años, y acompañado de su padre (Ahmed), cruzó el Estrecho y logró llegar al Hospital Infantil Virgen del Rocío de Sevilla, donde les pusieron en lista de espera. Allí conocieron a un voluntario, el también cineasta Mateo Cabeza (Sevilla, 1986), que decidió rodar su historia en un emocionante cortometraje documental que es finalista a los Goya 2021: Paraíso.

Mateo nos cuenta por qué decidió titularlo Paraíso: “Ahmed y Taha sobreviven a diario en el interior de una pequeña habitación de hospital, por lo que no es raro que un fiel y ejemplar creyente del Islam, como es Ahmed, se aferre a la idea de la existencia de un futuro mejor, un paraíso, un espacio suyo, imaginario e infinito, lleno de sabiduría; en comparación al espacio físico que habitan”.

“Además, creo que le ayuda pensar en ello para dar sentido a su lucha y no desmotivarse frente a las constantes adversidades” -añade el director-.

Una dura historia por la supervivencia de un niño que, sin embargo, no fue lo que motivó a Mateo a contarla, sino la especial relación familiar entre padre e hijo: “En realidad escogí a Ahmed y Taha por su valor humano y la riqueza emocional para su filmación. Por eso me he alejado del estilo documental habitual, para usar un lenguaje más personal, autorreferencial… Pero existe un estigma de primera percepción al categorizarlo de documental, ya que si fuera ficción se obviaría el pensar en la elección por parte de su director de la historia que narra, nos centraríamos más en la forma en como es narrada”.

Fotograma de 'Paraíso'

Rodado en una diminuta habitación de hospital

El cortometraje está rodado íntegramente en una diminuta habitación de hospital, donde padre e hijo pasan las 24 horas mientras aprenden español, recuerdan a la familia, reflexionan sobre su tierra y su religión o sueñan con el futuro. Y les acompañamos en un carrusel de emociones, que van desde la desesperación hasta la esperanza. Pero donde siempre queda patente el profundo amor que se profesan.

Sorprende que se dejasen grabar en un momento tan delicado como este, algo que Mateo consiguió gracias a su trabajo como voluntario en la Unidad de Trasplante Renal Infantil del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. “Ya llevaba un tiempo acompañándoles y creando un vínculo. Ese es un valor añadido de complejidad en mi trabajo. Con el tiempo, de forma natural y con su total confianza, empezamos a rodar justo después de haber conseguido los permisos de filmación del hospital”.

“Tengo que agradecer la total confianza del hospital en el rodaje, ya que, como suele pasar en mis filmaciones, la película se fue construyendo día a día sobre un guion abierto a constantes cambios” –añade Mateo-.

En cuanto a por qué no quiso que la cámara saliese de la habitación, Mateo confiesa que: “Fue una elección casi al final del rodaje cuando sentí, de forma natural, que la historia principal que yo quería construir ya estaba en el material filmado y que no era necesario desviar la atención saliendo a otros espacios”.

“El rodaje en sí no fue tan duro como vivir diariamente en el hospital –añade-, lo que intentaba es que se convirtiera en momentos de una buena compañía: jugábamos, intercambiábamos enseñanzas culturales, etc…”

Fotograma de 'Paraíso'

Un documental recomendado para el fomento de la Igualdad de Género

Una de las cosas más sorprendentes de esta historia es que fuera Ahmed el que viajará con Taha, mientras su mujer se quedaba en Marruecos cuidando de sus otros tres hijos. Esa es una de las cosas que ha motivado que el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) haya concedido a Paraíso la distinción de “película especialmente recomendada para el fomento de la igualdad de género".

“Eran los únicos padre e hijo de la planta -asegura Mateo- porque lo normal es que estén las madres. Me atraía mucho la madurez, complicidad y sintonía de los dos. Era una relación admirable. Aunque también era evidente el vacío que les dejaba la ausencia de la madre”.

Preguntamos a Mateo qué ha aprendido de este padre y este hijo tan especiales: “Me han ayudado a empatizar y a sintonizar con una realidad más justa y a enriquecer mi sentido del juicio crítico. Ahora valoro mucho más lo que tenemos”.

“Normalizamos las muertes al permitir que se repitan”

El documental también nos ofrece un nuevo e interesante punto de vista sobre la inmigración. Preguntamos a Mateo si cree necesario poner cara a los inmigrantes que se juegan la vida viniendo a España para que dejen de ser números: “Para cambiar nuestra visión en su globalidad, hay que empezar desde lo personal -asegura-. Hay muchas campañas de sensibilización, publicidad, documentales, reportajes… y todas las redes para estar al tanto más que nunca de la verdad de lo que está sucediendo, cerca o lejos. Pero la cuestión es… ¿nos han enseñado el valor de conocer la verdad?”

“Y es que estamos ante una psicosis colectiva desintonizada emocionalmente –añade el director-. El problema es la normalización generada al permitir la repetición de lo que ocurre. Normalizamos que existan pateras e inmigrantes, y que mueran sin parar en el océano; normalizamos que la gente sea corrupta por que “cualquiera haría lo mismo en su lugar”; normalizamos el mentir… Hasta hemos normalizado las 500 muertes diarias de esta pandemia y que la gente siga juntándose sin ninguna precaución con sus amigotes a emborracharse y a vivir la falsa felicidad porque “es que de algo habrá que disfrutar…”. La estupidez humana, la poca conexión con los que les rodean, la nula empatía con ellos mismos. Queda mucho trabajo por hacer”.

El director Mateo Cabeza

Un año y medio trabajando como voluntario en el hospital

Para rodar el documental, Mateo pasó año y medio trabajando de voluntario en el hospital. “Ser voluntario –nos cuenta- era la forma de pasar tiempo y conocer el hospital por dentro. Pacientes, familiares, personal sanitario, voluntariado… estuve realizando las tareas de acompañamiento infantil y familiar, casi a diario, durante un año y medio”.

Un tiempo en el que conoció otras muchas historias como las de Ahmed y Taha: “Obviamente me encontré y viví momentos muy duros, no deja de ser un hospital infantil. Y también pasaba horas en los cuartos de las enfermeras y ellas me contaban sucesos estremecedores, pero no me parece idóneo compartirlos por aquí”.

En cuanto al destino del pequeño Taha y su padre, Mateo Cabeza nos comenta que: “Hace unos meses por fin le trasplantaron el riñón a Taha y ahora se encuentra en observación. Pero todavía no sabemos cuándo podrá volver a juntarse la familia al completo”.

‘Paraíso’ ya ha recibido varios premios

Aunque esta sea su primera nominación a los Goya, Mateo ya ha rodado varios cortometrajes y películas como Sevilla Santa (2015), La vida sigue igual (2016), Que nadie duerma (2017) o Puesto 93 (2018), que se han paseado por festivales de todo el mundo, consiguiendo varios premios.

Y durante su recorrido por festivales internacionales Paraíso ha cosechado numerosas distinciones, como el Premio Julio Diamante al Mejor Corto Documental en Alcances (Cádiz); Mención Especial en el Mediteran Film Festival (Bosnia y Herzegovina), Mención Especial en el Select Respect Film Festival (Grecia), Premio Mejor Cortometraje SHORT-IN-DOC del Festival Internacional de Cine Inclusivo de Vigo; Venus de Badalona a la Mejor Producción de España en Filmets (Badalona Film Festival) y Premio Mejor Documental en Festival Enkarzine (País Vasco).

Paraíso compite por el Goya con otros tres estupendos cortometrajes documentales: Biografía del cadáver de una mujer, de Mabel Lozano; Solo son peces, de Ana Serna y Paula Iglesias y Paraíso en llamas, de José Antonio Hergueta. Los Goya se entregarán el próximo 6 de marzo en Málaga.

Cartel de 'Paraíso'