El almirante López Calderón, nuevo JEMAD tras la dimisión de Villarroya por vacunarse contra la COVID-19
- López Calderón, de 66 años, es desde 2017 almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA)
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El almirante Teodoro López Calderón, actual jefe de la Armada, es el nuevo jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD) que sucederá en el cargo al general Miguel Ángel Villaroya después de que este dimitiera como JEMAD el pasado sábado, 23 de enero, tras la polémica por su vacunación contra la COVID-19.
El Consejo de Ministros ha dado cuenta este martes del cese de Villarroya y ha aprobado el nombramiento como nuevo JEMAD de López Calderón, de 66 años, que es desde 2017 almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA).
La ministra portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha señalado en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros la "larga y extensa trayectoria profesional" de López Calderón, con 47 años de servicio en el cuerpo naval, donde ha pasado por "prácticamente todos los destinos que en el Ejército son posibles, tanto en mar como en tierra" y las 23 condecoraciones militares y civiles con las que cuenta, que "le confieren toda la capacidad y toda la confianza del Ejecutivo".
Casi 50 años de servicio en la Armada
López Calderón, de 66 años, ingresó en la Armada en 1973 y ascendió a almirante general en 2017. Entre sus destinos embarcado destaca su mando de la Agrupación Permanente número 2 de la OTAN y de la Operación Active Endeavour de apoyo a la lucha contra el terrorismo internacional en el Mediterráneo. Asimismo, ha mandado la fragata Cataluña y el patrullero Villaamil.
Casado y con cinco hijos, entre sus destinos en tierra se cuentan el de jefe de Operaciones del Estado Mayor del Mando Operativo Naval y de consejero en el Gabinete Técnico del ministro de Defensa.
Especialista en electrónica y oficial de acción táctica, entre las 23 condecoraciones militares y civiles nacionales, extranjeras y de organizaciones internacionales, con las que cuenta está la Gran Cruz del Mérito Naval, la Gran Cruz de la Orden de San Hermenegildo, la condecoración de Oficial de la Legión de Honor de la República de Francia, la Medalla al Mérito en el Servicio de los EE. UU., así como otras de Portugal, Perú y de la OTAN.
Según la regla no escrita que se aplica desde hace décadas, ahora tocaba que el nuevo JEMAD fuera de la Armada, ya que los cabezas de los ejércitos van rotando por turno, de manera que si el anterior a Villarroya fue del Ejército de Tierra, el siguiente sería de la Armada, aunque esta es una tradición que no obliga a la ministra de Defensa, Margarita Robles.
Primera dimisión de un JEMAD
El general Villaroya, perteneciente al Ejército del Aire, al que López Calderón sustituye como JEMAD, se ha caracterizado por dirigir a las Fuerzas Armadas en la lucha contra el virus en la operación Balmis, en lo que ha sido la primera vez en democracia que los militares han salido a las calles para cumplir una misión en territorio nacional. Villarroya pasará a la reserva después de más de 40 años en el Ejército del Aire.
Villarroya, de 63 años, ha sido el primer JEMAD (cargo que se creó en 1984) en dimitir de su cargo, tras conocerse que él, junto con otros generales del Estado Mayor de la Defensa (EMAD), se habían vacunado contra la COVID-19, aunque dijo marcharse "con la conciencia tranquila" porque nunca pretendió "aprovecharse de privilegios".
Antes de ascender a cabeza de los ejércitos, Villarroya fue jefe del Gabinete Técnico de la ministra María Dolores de Cospedal de 2017 a 2019 y siguió en ese cargo de confianza con Robles, quien le aupó como JEMAD el 15 de enero de 2020, poco antes de que estallara en España la pandemia de coronavirus.
En la información que ofreció el Estado Mayor de la Defensa (EMAD) sobre su dimisión, se aseguraba que Villarroya había actuado "de acuerdo a los protocolos establecidos" al vacunarse. Según el EMAD, estos protocolos establecían que estaba, por edad, en el tercer grupo de vacunados una vez se le había administrado la dosis a los sanitarios y a los militares que se iban a una misión.
Interior también cesó al oficial de la Guardia Civil que hacía de enlace en el Estado Mayor de la Defensa (EMAD) por vacunarse contra el COVID-19 junto al JEMAD y otros militares.
La polémica por la vacunación de los militares se sumó la semana pasada a la generada tras conocerse que, saltándose los protocolos, habían recibido dosis de la vacuna alcaldes, concejales y consejeros, tanto del PSOE como del PP, en municipios de Alicante, Huelva y Murcia, así como en el Gobierno de esta última comunidad y de Ceuta. A la lista se sumaron los alcaldes de Luesia y Asín (Zaragoza), Jaime Lacosta (PP) y Rogelio Garcés (PSOE), así como el alcalde socialista del municipio vallisoletano de Villavicencio de los Caballeros, Alberto de Paz.