Un juez bloquea la orden de Biden de suspender las deportaciones durante 100 días

• Un fiscal general de Texas presentó una demanda al considerar que la nueva Administración actuó de forma arbitraria

Joe Biden firma órdenes ejecutivas en la Casa Blanca

Un juez federal en Texas ha bloqueado este martes temporalmente la medida del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, por la que se suspendía la deportación de inmigrantes indocumentados por un periodo de cien días.

El fiscal general de Texas, el republicano Ken Paxton, presentó una demanda contra la decisión de Biden la semana pasada al considerar que la nueva Administración actuó de forma arbitraria al no consultar la orden ejecutiva previamente con los estados.

"La acción del Gobierno viola la Constitución, las leyes migratorias federales y el convenio contractual entre Texas y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés)", por el cual el Gobierno debía exponer sus planes al estado, señala la demanda.

En su primer día en la Casa Blanca, el presidente firmó una serie de medidas ejecutivas, varias de ellas en materia migratoria y una de las cuales era esta moratoria en las deportaciones "de ciertos no ciudadanos cuya deportación haya sido ordenada".

Así, el DHS anunció que se suspenderían durante los primeros 100 días de mandato algunas de las deportaciones de indocumentados, tal y como había prometido Biden durante la campaña electoral. El objetivo era asegurar "el cumplimiento justo y efectivo de las leyes migratorias" en la frontera con México.

Paxton celebra la victoria

Sin embargo, el juez Drew Tipton, designado por el expresidente Donald Trump en el Distrito Sur de Texas, ha emitido una orden de restricción temporal que bloquea la política en todo el país durante 14 días tras la impugnación legal. "Prohíbo la implementación y cumplimiento de las pólizas descritas en el memorando del 20 de enero titulado Pausa Inmediata de Cien Días de Expulsiones", dice la orden.

El juez ya había pedido este lunes al Gobierno información sobre cuántos inmigrantes habían sido puestos en libertad como consecuencia de esta suspensión de las deportaciones.

En un mensaje en su cuenta de Twitter, Paxton ha celebrado la victoria, resaltando que "Texas es el PRIMER estado de la nación en presentar una demanda contra la Administración de Biden. Y GANAMOS".

Paxton, conocido por retar varias veces los programas de inmigración de los demócratas e impulsar una petición para que el Tribunal Supremo impidiera la certificación de la victoria electoral de Biden, se ha congratulado del fallo judicial: "Dentro de los seis días posteriores a la toma de posesión de Biden, Texas DETUVO su congelación de deportación".

"Esto fue una insurrección sediciosa de izquierda. Y mi equipo y yo lo detuvimos", ha concluido.

Texas debe probar un daño irreparable

La orden del juez Tipton, que ha programado una audiencia para el 28 de enero para que ambas partes expliquen sus argumentos, puede permanecer en vigor hasta 14 días y puede extenderse otros 14 días.

La ONG Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) ha presentado un escrito a favor de la medida tomada por el Gobierno Biden, pidiendo al tribunal que rechazara la solicitud. "No se debe permitir que continúe esta demanda", ha dicho Kate Huddleston, abogada de la ACLU de Texas.

Según Paxton, el estado se enfrentaría a un daño irreparable si se permitiese paralizar las deportaciones, ya que aumentarían los costos de la educación y la atención médica a medida que más inmigrantes permanecieran en Texas de manera ilegal.

No obstante, la ACLU ha argumentado que el estado de Texas no había probado un daño irreparable, un requisito para su solicitud de una orden de restricción temporal para bloquear la orden ejecutiva del presidente, y que la demanda no tiene fundamento.

"La pausa de la Administración sobre las deportaciones no solo es legal, sino necesaria para garantizar que las familias no sean separadas y que las personas no vuelvan al peligro innecesariamente mientras la nueva Administración revisa las acciones pasadas", ha insistido Huddleston.

Durante la presidencia de Trump, los estados liderados por los demócratas y otros opositores a sus políticas de inmigración lograron frustrar o retrasar muchas iniciativas a través de recursos legales, y ahora se espera que Texas actúe de manera similar contra la agenda de Biden.