Cuatro municipios de Cantabria viven su primer día de confinamiento
- Laredo, Colindres, Polanco y Santa María de Cayón estarán aislados durante los próximos 14 días
- Sólo están abiertos los comercios de primera necesidad
Los municipios de Laredo, Colindres, Polanco y Santa María de Cayón afrontan desde este jueves su primer día de cierre perimetral decretado por el Gobierno de Cantabria para las próximas dos semanas debido a la alta incidencia de coronavirus, una medida que afecta a casi 35.000 cántabros.
Durante estos 14 días, también se ha ordenado el cierre total de la hostelería y reducido la actividad comercial a los bienes de primera necesidad, entre otras restricciones. Además, se restringe a cuatro del número máximo de personas en espacios públicos y se limitan reuniones exclusivamente entre convivientes en espacios privados o domicilios.
Con motivo del inicio del cierre, la delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, se ha trasladado a un control de la Guardia Civil entre Laredo y Colindres, junto con los alcaldes de ambos municipios, Charo Losa y Javier Incera, respectivamente. Todos ellos han pedido a los vecinos el máximo cumplimiento de unas medidas que son "duras", pero pretenden preservar la salud de la población, con el fin de que se puedan levantar lo antes posible.
450 agentes para 35.000 ciudadanos
Un total de 450 agentes de la Guardia Civil que vigilarán el cierre perimetral en estos municipios, con la colaboración de las policías locales, para garantizar la reducción de la movilidad con controles en las salidas y entradas de los mismos.
Para todos los desplazamientos fuera o dentro de estos municipios será necesario el documento que justifique motivos laborales, médicos, escolares o cualquiera de las excepciones establecidas por el Gobierno regional.
“Necesitamos reducir la movilidad y los contactos sociales“
"Tanto la Guardia Civil como las policías locales podrán requerir en cualquier momento la documentación que justifique adecuadamente el desplazamiento, por lo que pido a la ciudadanía que sea consciente y que colabore con los agentes que están velando por nuestra seguridad y salud", señaló la delegada del gobierno en Cantabria. Añadió que "necesitamos reducir la movilidad y los contactos sociales para evitar que continúen aumentando los contagios de esta tercera ola.
Por su parte, los alcaldes de Colindres y Laredo han destacado que para los cuatro municipios afectados el cierre es una de las situaciones "más duras" de las que se pueden vivir en esta pandemia, si bien responden a la necesidad de preservar la salud de los vecinos ante el alto número de casos de Covid.
Han confiado también en que las medidas no se prolonguen más allá de los 14 días marcados, dado el "cansancio social" que existe y la afectación económica que suponen las mismas para sectores como el comercio, pymes o autónomos. En este sentido, han expresado la necesidad de que estas medidas lleven aparejadas de ayudas por parte del Estado y del Gobierno regional.
Por último, ambos alcaldes han pedido a los ciudadanos que se conciencien de la situación y actúen de forma responsable para salir adelante entre todos.