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Filomena no deja huella en Las Tablas de Daimiel

  • Las precipitaciones acumuladas en el parque han sido de 50 litros
  • Si no entran nuevas borrascas, se prevé otro año de sequía

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Las Tablas de Daimiel con poca agua a pesar de las borrascas
Las Tablas de Daimiel con poca agua a pesar de las borrascas

Las Tablas de Daimiel se han librado de los efectos de Filomena. Para lo malo, pero también para lo bueno. Las precipitaciones caídas en la zona no son suficientes para revertir la situación de sequía que atraviesa el parque, y si no llegan nuevas borrascas con abundante lluvia, se descarta un aumento significativo de los humedales antes de verano.

Siete años de sequía

Hay que remontarse al año 2013 para ver los humedales encharcados al cien por cien. Desde que comenzó el último año hidrológico el 1 de Octubre, las precipitaciones acumuladas en las Tablas de Daimiel son de unos 150 litros. Cifras bajas, propias de un año de sequía. Actualmente el parque cuenta con una superficie encharcada de 336 hectáreas, lejos de las 1750 inundables. Y ese volumen de agua es el resultado de la activación de los pozos de emergencia. Explica Carlos Ruiz de la Hermosa, director del parque, que “se llevó a cabo entre el 10 de octubre y el 18 de diciembre del año pasado, y permitió pasar de 35 hectáreas hasta esta superficie”.

Los efectos de la borrasca Filomena

El paso de Filomena ha dejado precipitaciones de unos 50 litros en el parque, que poco se han dejado notar. La nieve acumulada en el alto Gigüela está moviendo el río en el entorno de Cuenca-Toledo, pero a mucha distancia de que el agua llegue a las Tablas. La esperanza está en que lleguen nuevas borrascas que traigan abundantes precipitaciones y muevan las aguas de los ríos:

Venimos de un periodo seco de seis años, con lo cual, si no entran nuevos frentes de borrasca, todo parece indicar que este año va a ser una continuidad de ese periodo seco

“Venimos de un periodo seco de seis años, con lo cual, si no entran nuevos frentes de borrasca, todo parece indicar que este año va a ser una continuidad de ese periodo seco”, explica Ruiz de la Hermosa.

Un humedal único en Europa

Las Tablas de Daimiel son uno de los ecosistemas más valiosos de La Mancha y un humedal único en Europa. Se alimentan de la inundación de los desbordamientos de los ríos Guadiana y Gigüela en su confluencia, y la descarga de aguas subterráneas del acuífero 23. Diferentes colectivos con representación en el patronato del parque, así como vecinos de Daimiel, llevan años pidiendo al Gobierno central medidas para paliar los efectos de la sequía en el Parque Nacional, tales como un trasvase de agua del acueducto Tajo-Segura.

El expolio que ha producido el regadío en los últimos meses ha sido brutal

Desde Ecologistas en Acción, además, reclaman un control del regadío en la zona. Rafael Gosálvez, representante del colectivo, asegura que “el expolio que ha producido el regadío en los últimos meses ha sido brutal”, y que “el problema de la cuenca alta del Guadiana, y de Las Tablas, es la sobreexplotación del Acuífero 23 por la agricultura intensiva”. Agricultores y ganaderos no consideran que esa sea la causa de la crítica situación del parque.