Las claves de la semana electoral en Cataluña: ojo a las encuestas, que se mueven
- Las últimas encuestas mantienen al PSC como favorito, pero las transferencias de voto no cesan
- La incertidumbre por la participación, que no afecta a todos los partidos por igual, puede alterar las proyecciones
Este sábado se llega al ecuador de la campaña de las elecciones al Parlament catalán del próximo 14 de febrero. La actualidad política ha estado protagonizada por la polémica porque se permite que vayan a votar los contagiados de COVID-19 y sus contactos y por las más de 20.000 alegaciones presentadas para evitar estar en una mesa electoral. Y cómo no, por la llegada de una nueva encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
Esta semana, por primera vez en 15 años, el CIS ha publicado una encuesta con la caravana electoral en marcha, con el fin de ver las tendencias de voto en una campaña a la que se llegó con una proporción de indecisos del 39 %. Por eso, la institución que preside José Félix Tezanos se ha apresurado a complementar su encuesta preelectoral realizada del 2 al 15 de enero con una encuesta 'flash' hecha entre el 1 y el 3 de febrero.
Desde luego, en la nueva foto hay mucho movimiento. En el promedio de las últimas encuestas, no cambia que el PSC del exministro de Sanidad Salvador Illa sería el más votado -aunque el 'efecto Illa' parece estancarse-, y que ERC sería el segundo, pero se refleja la remontada de Junts. Y la caída sin freno de Ciudadanos, el ganador de las anteriores elecciones, que podría perder dos de cada tres votos de 2017 (del 25,37 % a un 7,9 %, según el CIS).
1. Antes que nada, ¿qué pasará con la participación?
Todavía el 26,3 % de los catalanes reconoce que no sabe a quién votar -aunque ya es un porcentaje casi 13 puntos menor que en la encuesta de enero-, pero si se suman los que no saben y los que no contestan el porcentaje sería del 37,7 %.
Respecto a la encuesta del propio CIS de enero, hay una caída de 14 puntos de los catalanes que dicen seguro que van a ir a votar (del 67 % al 53,6 %). Aunque las peticiones de voto por correo, 270.000, se han triplicado respecto a 2017, la estimación de participación cae y eso puede alterar los resultados previstos.
Expertos consultados por RTVE.es vaticinan que la participación el 14F quedará lejos de la de 2017, con una cota histórica del 79%. En un escenario de competencia electoral entre partidos del mismo bloque, con más indecisos que nunca y cuando el miedo al contagio de COVID-19 está afectando al mismo despliegue de los colegios electorales, los efectos de la participación y los resultados pueden traer sorpresas.
A falta de datos de los posibles votantes de Vox, que se estrena en unas autonómicas catalanas, los electores independentistas son los más motivados para responder a la llamada de las urnas, como se ve en la siguiente tabla.
Hay partido, y se juega en varios campos. Algunos de los más interesantes ahora mismo son los siguientes:
2. El duelo entre ERC y Junts
Está en juego el liderazgo del independentismo entre ERC y Junts, allí donde ambos son más fuertes, en las poblaciones de menor tamaño y en el interior de Cataluña, en especial en Lleida y Girona.
Al margen de los duelos directos, el independentismo en conjunto está remontando. ERC, Junts, la CUP y el PDeCAT sumarían ahora el 42,8 % de los votos, cuando la anterior encuesta preelectoral del CIS les daba un 39,8 %. Aún parece lejos del promedio histórico del nacionalismo en Cataluña, que se ha movido entre el 46 % y el 50 % en los últimos años, pero están demostrando margen de movilización suficiente para alcanzarlo.
3. El duelo en la izquierda
En la imagen que arroja la encuesta ‘flash’ del CIS, el PSC tiene ventaja en las posiciones del centro-izquierda mientras que ERC lidera entre quienes se consideran más izquierdistas. En todo caso, entre ambos y con En Comú Podem y la CUP, compiten por los electorales más de izquierda, que son los mayoritarios en Cataluña.
En el otro lado del espectro ideológico, Vox es hegemónico en las posiciones más a la derecha, si bien es verdad que es el espacio ‘menos poblado’ por los votantes, como se ve en la segunda imagen del gráfico.
4. Ciudadanos se desangra y otros le 'vampirizan'
Ciudadanos arrastra un problema desde las elecciones generales de abril de 2019, cuando alcanzó 50 diputados en el Congreso. Desde entonces, ni moviliza ni fideliza a sus votantes, y se le van a izquierda y derecha. Es con diferencia el partido con menos capacidad de mantener a sus propios electores (28,4 %, considerando la suma de voto+simpatía hacia el partido). El 21,3 % de los votantes que confió en Inés Arrimadas en 2017 votaría ahora a Salvador Illa, y el 12,6 % a Vox. Y la fuga de votos ha crecido respecto a la anterior encuesta. Además, el 10,4 % votaría ahora al PP y el 14,2 % se quedaría en la abstención.
En comparación, la fidelidad de los votantes del PSC es a prueba de giros de guion, y parecen haber asumido con naturalidad el cambio de Miquel Iceta por Salvador Illa, que está "seduciendo" tanto a los votantes 'naranjas' como a los de los 'comunes', aunque estos están logrando aminorar la transferencia de voto a los socialistas (del 19,9% en la encuesta del CIS en enero, al 17,5 %).
5. Atentos al mapa: ganar en votos no es ganar las elecciones
¿Se juega el resultado de las elecciones en función del lugar donde se vote? En parte, sí, por los efectos de la ley electoral, que, en Cataluña como en el conjunto de España, sobrerrepresenta a las provincias menos pobladas, donde se encuentran también los municipios más pequeños.
Estas y otras claves las ha explicado el politólogo Pablo Simón en La Hora de la 1, en TVE, donde ha descrito cómo funciona el sistema electoral catalán, en el que, por favorecer el equilibrio de poder entre territorios para no perjudicar a los menos poblados, un escaño cuesta más votos en la provincia de Barcelona (unos 48.000) que, por ejemplo, en la provincia de Lleida (unos 21.000).
De este modo, podría ocurrir que el partido más votado no sea el que al mismo tiempo logre más escaños. Ya ha pasado en Cataluña, dos veces y en ambas ocasiones precisamente al que ahora es favorito, el PSC, que en 1999 y 2003 tuvo más votos que CiU pero menos diputados, porque los convergentes rentabilizaron más sus votos fuera de la provincia de Barcelona.
Aunque el independentismo es dominante en las poblaciones más pequeñas, según la encuesta 'flash' del CIS, el PSC está creciendo respecto al anterior sondeo preelectoral en los pueblos de menos de 2.000 habitantes, cobrándose apoyos que antes eran de En Comú Podem. Además, lidera en los municipios de más de 10.000 habitantes, que son el 13 % del total de la comunidad, pero es donde vive el 81,5 % de los catalanes.
Posdata. Y los votantes, ¿qué esperan de los partidos?
Es una queja frecuente que la mayoría de las veces los políticos no sintonizan con los problemas de los ciudadanos. Sin embargo, no será por falta de información. Antes de que empezara la campaña, una encuesta del Centro de Estudios de Opinión (CEO), dependiente de la Generalitat, ordenó las propuestas de los candidatos que más interesan a los votantes.
Y, ¡sorpresa!, estos dan más prioridad a las soluciones propuestas sobre la crisis económica y la corrupción política, incluso al cambio climático, por delante del 'procés' independentista y de la rendición de cuentas políticas por la gestión durante la pandemia. Eso sí, con distintas matizaciones según a qué partido se piensa votar.
Otra cuestión es de qué hablan los partidos políticos a los votantes. En los mítines, debates y otras escenografías, se cubren unos cuantos temas, muy limitados, casi siempre los mismos y en el mismo orden. En los programas electorales, se habla de todo lo demás, pero casi nadie llega a leerlo. Por eso, en RTVE.es ofrecemos el contenido de esos programas y una selección de las medidas más destacadas de los temas principales y transversales a casi todos los partidos. Por sus promesas -y su comparación- los conoceréis.
[Ver el comparador de programas electorales de las elecciones catalanas]