¿Por qué y cómo estamos pagando cada vez más comisiones bancarias?
- Los bancos están elevando las comisiones para compensar las caídas en otros ingresos
- En muchas ocasiones las comisiones están condicionadas por requisitos difíciles de cumplir
Las entidades bancarias están imponiendo cada vez más comisiones a los consumidores, con cuantías más elevadas y condiciones más difíciles de evitar, llegando a alcanzar hasta los 240 euros anuales únicamente por servicios de mantenimiento de cuenta. En Las Cosas Claras hablamos con Enrique García López, del departamento de Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), y el periodista y experto en consumo Jesús Soria, para que nos expliquen las causas.
"El negocio tradicional financiero con margen en intermediación está bajando. Lo que hacen las entidades", explica Enrique García, "es compensar sus ingresos por medio del cobro de servicios que antes eran gratuitos" y que, de hecho, "se van encareciendo bastante en comparación con el IPC".
En la misma línea, Jesús Soria apunta que "gran parte de los gastos de los bancos los pagamos los consumidores a través de las comisiones" ya que estas entidades "ganan cada vez menos con otro tipo de operaciones y necesitan ganar dinero". El periodista añade, además, que estas cantidades van subiendo de manera, en ocasiones, difíciles de percibir para el consumidor, ya que pueden tratarse de pequeños incrementos en cobros mensuales que se van acumulando a lo largo del año.
Vinculación difícil es esquivar
Los expertos explican que estas entidades "no solo no nos dan beneficio por el dinero que tenemos depositado en el banco", sino que "nos cobran por el que tengamos y hay que tener más dinero para pagar menos". Además, el encarecimiento de las comisiones y el endurecimiento de las condiciones siempre se realiza de forma transparente, generando confusión al usuario a través de conceptos como, por ejemplo el de vinculación.
Algunos bancos "nos dicen: si traes nómina y recibos no te cobro comisiones. Pero eso endurece las condiciones de vinculación, porque si no se cumplen esos requisitos te cobran comisiones. Muchas veces los consumidores no se enteran bien del endurecimiento hasta que ven que están pagando por lo que antes no pagaban, por lo que es una subida encubierta", analiza el portavoz de la OCU.
Jesús Soria refuerza esta idea con dos ejemplos concretos. Por un lado, una entidad que cobra a sus clientes hasta 300 euros al año o, en su defecto, les obliga a "dos pagos con tarjeta, un seguro, 30.000 euros en fondos o una nómina". Hay un segundo ejemplo, el de un banco que cobra 240 euros anuales en comisiones, a menos que el usuario asegure "600 de ingreso mínimo, tres recibos, tres compras con tarjeta y 20.000 euros en algún plan de ahorros".
"¿Quién dispone de 20.000 o 30.000 euros para meter en un plan de pensiones?", se pregunta Jesús Soria. Sin embargo, aún hay esperanza. Y es que ambos expertos recuerdan que siguen existiendo "10 o 12 cuentas" en entidades que siguen siendo gratuitas.