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Coronavirus

La crisis provocada por la pandemia llega a los universitarios: largas colas en París por un plato de comida

  • Una asociación reparte cerca de 20.000 comidas semanales a estudiantes universitarios
  • Cerca del 30% de los estudiantes tiene depresión derivada de la pandemia del coronavirus

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Colas de cientos de estudiantes en Francia a la espera de un plato de comida

La crisis del coronavirus ha golpeado muy duramente a los estudiantes. En París, muchos jóvenes hacen colas interminables en busca de un plato de comida. Muchos universitarios se han quedado sin los empleos que les ayudaban a llegar a final de mes en una de las ciudades más caras de Europa. "No hay trabajo para nosotros", ha contado a RTVE un joven francés mientras espera la cola.

"Yo necesito ayuda para comer, por la crisis se me han acabado los recursos", ha dicho Lin, estudiante chino. Para los extranjeros es aún más complicado acceder a ayudas. Una asociación parisina se encarga de repartir unas 20.000 comidas a la semana a los estudiantes. "Básicamente lo que nos dan son productos que están a punto de caducar y ya no se pueden vender en los supermercados o que no tienen buen aspecto para venderlos", ha relatado una estudiante española a RTVE mientras hace cola para poder acceder a las ayudas.

Durante la espera, voluntarios ofrecen café caliente y explican que también hay especialistas por si necesitan apoyo psicológico. "A veces cuando vienen aquí, es la primera vez que hablan con alguien en toda la semana", ha declarado Alexis, miembro de la organización. Y es que las cifras del gobierno referente a la salud mental hablan de tasas de depresión cercanas a un 30% en los jóvenes.

En Francia, la salud mental de los estudiantes está al límite

La decisión del Gobierno francés de suspender, en noviembre, la enseñanza presencial, no ha impedido que muchos jóvenes viajaran al país, como Beatriz Guillén, estudiante de Economía y Finanzas en la Universidad Autónoma de Madrid que cursa su Erasmus en París-Dauphine. "Es triste ver París cerrado, sobre todo cuando has experimentado los bares y los museos durante los primeros meses. No es un Erasmus como me esperaba al no haber discotecas, pero la experiencia creo que sigue siendo muy enriquecedora", ha dicho.

El caso de Enrique, que estudia ADE en la Carlos III (Madrid), es más complicado porque tiene un trastorno del déficit de atención: "A nosotros nos impacta mucho el coronavirus porque no hemos podido pisar las aulas, desde el punto de vista psicológico es duro, y a la vez es un reto de aprendizaje a distancia".

El alemán Jean-Philipp Kretschmann, de 21 años y estudiante de Económicas en la Universidad de Fráncfort, se siente impactado por no haber tenido ni una clase presencial desde que llegó a la Universidad y coincide con el resto en que la residencia ha jugado un rol central para conocer gente. "En la calle o en las fiestas es imposible y con el toque de queda a las 18.00 no podemos invitar a nadie a casa", lamenta.

Francia intenta poner solución a la elevada tasa de depresión de sus estudiantes, que comenzaron a reivindicar la vuelta a la presencialidad después de que un alumno se lanzara por la ventana de su residencia en Lyon. Según un estudio de la Salud Pública francesa, el 29 % de los jóvenes de entre 18 y 25 años está deprimido, el 50 % se preocupa por su salud mental y el 31 % mostró signos de angustia psicológica.

Francia: trastornos depresivos entre los universitarios