El juicio por la 'caja B' contra Bárcenas se suspende hasta el martes por el positivo en COVID de uno de los acusados
- La Fiscalía ve prematuro decidir sobre un posible careo entre Bárcenas y Mariano Rajoy
- Respecto a la posible prescripción de algunos delitos, la Fiscalía asegura que debe ser el tribunal quien lo decida
El tribunal responsable del juicio por la 'caja B' del PP, que tiene al extesorero del partido Luis Bárcenas como principal imputado, ha decidido aplazar las vistas al próximo martes dada la condición médica de uno de los imputados, Cristóbal Páez, que se encuentra en cuarentena por haber dado positivo en COVID-19 el pasado jueves.
Así lo ha anunciado el presidente del tribunal José Antonio Mora, que ha precisado que el juicio se reanudará dentro de una semana, siempre y cuando haya mejorado el estado de salud de Páez, exgerente del PP que se enfrenta a una petición del fiscal de 18 meses de cárcel. La Sala, con el visto bueno de todas las partes personadas, ha tomado esta decisión para respetar el derecho a la defensa de Páez y el de comparecer en el juicio en su condición de acusado.
Durante la segunda sesión del juicio de la 'caja B' del PP en la Audiencia Nacional, relativa a las cuestiones previas, el fiscal Antonio Romeral ha considerado prematuro tener que pronunciarse sobre la propuesta del abogado de Bárcenas sobre la celebración de un careo entre éste y el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, que está citado como testigo, de apreciarse contradicciones entre las declaraciones de ambos.
En su intervención en respuesta a las cuestiones previas que al inicio del juicio expusieron las defensas, el fiscal ha argumentado que debe ser el tribunal el que "ponga de manifiesto" y "decida" si existen contradicciones entre las declaraciones del acusado y del testigo, y ha puntualizado que, en caso de haberlas, éstas deben afectar al objeto de enjuiciamiento y "no a otros hechos distintos".
El fiscal también ha apoyado que se aplacen al próximo lunes las sesiones del juicio sobre la 'caja B' del PP en las que comenzarían a declarar los acusados, para dar tiempo a Páez a recuperarse y cumplir la preceptiva cuarentena tras haber dado la semana pasada positivo en COVID.
La defensa de Bárcenas admite que no puede aportar pruebas nuevas
La defensa de Bárcenas, por su parte, ha admitido abiertamente que no puede aportar nuevas pruebas en el juicio y ha asegurado que con su propuesta de someter a su cliente a un careo con el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy pretende que se aprecien contradicciones entre ambos, "no se trata de hacer un castigo al PP".
En cuanto a su petición de que se llame a declarar a un periodista que presuntamente grabó al predecesor de Bárcenas en la tesorería del PP, el fallecido Álvaro Lapuerta, supuestamente reconociendo que existían ciertos pagos a exdirigentes populares, ha explicado que lo ha hecho precisamente porque su cliente no tiene esa grabación en su poder como, según él, ya daba a entender en su carta a la Fiscalía Anticorrupción, en la que hacía alusión a la misma.
Por eso ha pedido que se cite como testigo a este periodista, Francisco Mercado, para que se le pueda preguntar si conserva la grabación y si considera que puede aportarla o cree que está amparada por el secreto profesional; y ha reiterado que también solicita la testifical de Eduardo Inda porque sabe que él escuchó esa grabación de 8 minutos. De esta manera, el abogado ya ha admitido que Bárcenas no va a aportar nuevas pruebas porque las que tenía ya las aportó cuando declaró en instrucción en 2013 en relación a los papeles que guardaba con la contabilidad B del PP.
Los nuevos testigos deben tener "conocimiento directo de los hechos"
Respecto a los nuevos testigos que propuso el abogado de Bárcenas el lunes -los periodistas Francisco Mercado, Eduardo Inda, Ernesto Ekaizer y Marisa Gallero-, el fiscal ha recordado precisamente que un testigo es el que tiene "un conocimiento directo de los hechos" y es así como entiende que hay que valorar esta propuesta.
A su juicio, la investigación periodística no determina ser testigo directo de los hechos, y ha señalado que no se han aportado los elementos empleados por esos testigos para poder probar los hechos enjuiciados.
A lo que se ha opuesto de forma clara el fiscal es a que se decrete la nulidad del auto de apertura de juicio oral que el magistrado José de la Mata dictó en 2018 y en el que amplió los hechos y el número de delitos, por los que se dictó en 2015 el auto de procedimiento abreviado (PA) -equivalente al procesamiento-, a los que las acusaciones habían planteado en sus escritos.
"La crítica venía por admitir las calificaciones de las acusaciones, que se dice que no se corresponden con los hechos investigados" y "puede ser así", ha reconocido el fiscal, que, sin embargo, opina que no hay que fijarse tanto en la calificación jurídica, pues la relevancia penal la determinará la Sala.
Habrá que ver en el juicio si los hechos han prescrito o no
Ha admitido que muchas de las valoraciones jurídicas de las acusaciones pueden ser incluso "disparatadas" ya que algunos de los hechos que incluyen están prescritos, pero ha insistido en que será el tribunal "el que module esos hechos y determine la prueba que debe hacerse".
En cuanto a las prescripciones alegadas, como la del delito fiscal de 2007, ha señalado que habrá que celebrar el juicio para determinarlo. En cuanto a la petición de dispensa de los acusados para dejar de asistir a las sesiones del juicio una vez hayan prestado declaración, el fiscal anticorrupción se ha mostrado conforme teniendo en cuenta que han sido citados un centenar de testigos y el juicio está previsto que se prolongue varios meses, en concreto hasta el 20 de mayo.
La abogada del Estado Roda María Seoane, conocida por haber participado en el juicio del "procés", se ha adherido prácticamente en su totalidad a las alegaciones de la Fiscalía en respuesta a las cuestiones previas. Y las seis acusaciones populares han arremetido contra el PP por decir en el día anterior que tenían fines "políticos".