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Elecciones catalanas

Duelos, 'sorpassos', la participación: en qué hay que fijarse este 14F

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Los candidatos de los principales partidos en las elecciones catalanas del 14 de febrero.
Los candidatos de los principales partidos en las elecciones catalanas del 14 de febrero.

Cataluña celebra este 14 de febrero sus decimoterceras elecciones autonómicas, en un ciclo político protagonizado por el desafío independentista, todavía no resuelto y que abre en 2021 un nuevo episodio. En juego está la configuración de un Parlament del que saldrá un Govern que tendrá que contar con la suma de varias fuerzas políticas.

Es precisamente la fórmula del pacto ganador lo que más costará dirimir una vez que termine el escrutinio de las urnas y hay quien apunta ya a una repetición de las elecciones si ninguno de los partidos de los bloques es capaz de romper los vetos que se han cruzado en los últimos días.

Hasta entonces, serán los datos los que hablen. Los de participación y los de escrutinio. Y en esta jornada electoral habrá que fijarse en lo siguiente:

Quién llega mejor para ganar

La carrera electoral que termina hoy llega con una terna de candidatos en posiciones avanzadas, que se disputan la victoria final: el PSC, ERC y JxCat. El PSC, que se puso en cabeza tras la designación de Salvador Illa como candidato, es el que más se ha movido en las encuestas de los últimos meses.

Como se puede ver en el gráfico, el partido rondaba en noviembre el 17 % de los votos, pero llega a la cita electoral con una perspectiva de en torno al 22 %, según el promedio electoral realizado por RTVE.es.

Casi cinco puntos de diferencia que tendrían como contraparte el descenso de ERC, el segundo con más movilidad en las encuestas. El partido que lidera Pere Aragonès también ha variado significativamente en este tiempo: entre noviembre y febrero ha pasado de rozar el 24 % a rondar el 20 %, por detrás del PSC.

Más allá de estos dos casos, el promedio no se ha movido demasiado en estos meses. Una ligera tendencia al alza de Junts apunta a que su resultado mejorará la previsión actual. El descenso de Ciudadanos sugiere que el mal resultado nacional podría repetirse en Cataluña. Y el cruce de las líneas de PP y Vox indica 'sorpasso', aunque las diferencias son demasiado pequeñas como para sacar conclusiones.

Donde sí ha habido grandes variaciones ha sido entre las distintas casas encuestadoras, que han arrojado resultados variopintos. El resultado del PSC ha bailado entre el 19,6 % que le asignaba el CEO y el 23,9 del CIS (rebajado al 23,7 en un CIS ‘flash’ posterior). La previsión de ERC ha bailado entre el 19,4 % de ElectoPanel y el 21,1% de GAD3. Aunque el rango más amplio entre encuestadoras ha sido para Junts: del 12,5% en el CIS (corregido al 14,6 % en el CIS ‘flash’) al 21,4 % de SigmaDos.

Las últimas cifras conocidas -los datos prohibidos del tracking andorrano realizado por GESOP- no mueven demasiado las tendencias, pero sí parecen afianzar algunas cuestiones. Por un lado, la victoria en votos del PSC sobre ERC. Por otro, una ligera subida del voto independentista, en la CUP y el PDeCAT. Y unas mejores perspectivas para el PP, que pese a todo quedaría por detrás de Vox.

La participación bajará, pero ¿cuánto?

La participación en 2017 alcanzó un récord del 79 % en 2017 -casi un 82 % en el voto de los residentes en España-. La primera impresión es que la situación epidemiológica, con 70.000-80.000 personas contagiadas o contactos estrechos de infectados de COVID-19 -según cálculos del secretario de Salut Pública, Josep Maria Argimon- y el miedo al contagio harán caer la participación en picado, como ocurrió en las elecciones vascas del 12 de julio de 2020.

Sin embargo, ese desplome podría verse amortiguado por la movilización de los votantes convencidos de que en estas elecciones hay mucho en juego, una percepción que parece más sólida en los electores independentistas, y que podría repetir el precedente de las elecciones en Galicia del 12J, en las que la participación subió cinco puntos.

¿Compensará la competencia electoral entre partidos la reticencia a votar por miedo a contagiarse? ¿Lo habrá compensado en parte el histórico aumento de peticiones de voto por correo (un 350 % respecto a 2017, un total de 284.706 solicitudes)? ¿Inspirarán confianza y seguridad a los ciudadanos catalanes los colegios electorales desplegados en espacios amplios, como pabellones de deporte o mercados de abastos, incluso con mesas al aire libre? Los avances de participación y las cifras definitivas darán la respuesta.

Los duelos de los que se hablará

ERC y JxCat. Ambos llegan a estos comicios como rivales y aliados. Rivales inevitables porque está en juego el liderazgo político del independentismo. Tras un año de ERC liderando las encuestas, trata de que las urnas no le devuelvan a la realidad de hoy: que la opción primera de los votantes es JxCat, con el liderazgo de Laura Borràs y el auspicio de lo que representan el huido expresidente Carles Puigdemont y otros líderes condenados por el 'procés'.

El duelo JxCAT-ERC en las elecciones catalanas de 2017: en qué municipio fue más votado cada partido

El duelo JxCAT-ERC en las elecciones catalanas de 2017: en qué municipio fue más votado cada partido. RTVE.es

Y a la vez son aliados para lograr esa suma simbólica del 50 % de los votos y de los escaños -con la aportación de la CUP y el PDeCAT- con la que legitimar una nueva hoja de ruta independentista.

El objetivo común es no alejarse del promedio histórico del nacionalismo en Cataluña, entre el 46 y el 50 % en los últimos años. Las encuestas iniciales les alejaban de esta meta, pero los últimos sondeos apuntaban a la movilización de sus simpatizantes. El balance del independentismo marcará la crónica política inmediatamente después de la electoral.

El 'efecto Illa'. Si algo medirán las urnas el 14F es el poder del 'efecto Illa', con la designación como candidato del que fue ministro de Sanidad desde el inicio de la pandemia. El PSC llega con ventaja y podría crecer a costa de Ciudadanos y En Comú Podem, que se baten para conservar a su electorado.

Sin embargo, es probable que ni la gestión de la crisis sanitaria ni el dilema izquierda-derecha determinen el resultado electoral, sino que todo gire en torno a la confrontación independentismo vs constitucionalismo, un bloque que el PSC aspira a encabezar en detrimento de Ciudadanos.

La magnitud de la caída de Ciudadanos. Todas las encuestas señalan un batacazo de Ciudadanos, el partido con más fuga de votos y más votantes desmovilizados. La cuestión será dónde consigue detener su caída desde sus actuales 36 escaños; si perderá dos de cada tres votos, como señalan los sondeos, y a qué posición terminaría relegado el proyecto de Carlos Carrizosa. Además de quién será el mayor beneficiado de esa transferencia de votos: el PSC o Vox.

¿Se consumará el 'sorpasso' de Vox al PP? La candidatura de Ignacio Garriga se presenta por primera vez al Parlament, pero podría hacerlo con fuerza suficiente para convertirse en cuarta o quinta fuerza política -en una Cámara en la que podría haber nueve partidos-, según sondeos de última hora, con hasta 9-10 escaños. Todo dependerá del trasvase de votos en el bloque de la derecha, entre Ciudadanos, PP y Vox. Los líderes de ambos partidos, Pablo Casado y Santiago Abascal, han arropado a sus candidatos en la campaña, y ponen su propio liderazgo a examen. Podría salir de ahí uno de los grandes titulares de la noche electoral.

En Comú Podem y la CUP, árbitros de mayorías. Aunque los números no les sitúan en el papel de actores protagonistas, los escaños que obtengan las candidaturas de Jéssica Albiach (En Comú Podem) y Dolors Sabater (CUP) pueden valer su peso en oro. Darán la medida de su capacidad para decantar el próximo Govern, hacia la izquierda o hacia el independentismo, respectivamente, y de imponer sus propias condiciones.

También el PDeCAT, con la exconsellera Àngels Chacón al frente, desea tener algo que decir. Las últimas encuestas le colocan al borde del escaño, y si obtienen representación, los herederos políticos de los 'convergentes' intentarán tener voz para moderar la hoja de ruta independentista.

No todos los votos valen lo mismo: el papel de las provincias

El Parlament lo componen 135 diputados, distribuidos en cuatro circunscripciones electorales para las cuatro provincias catalanas. Barcelona elige 85 escaños, Tarragona 18, Girona 17 y de Lleida salen 15 diputados. Pero este reparto no es proporcional a la población de estas provincias, de modo que Barcelona queda infrarrepresentada respecto a las demás.

La provincia más poblada, que congrega al 74 % del censo electoral en Cataluña, elige al 63 % de los diputados; por su parte, Lleida, con el 5 % del total de la población, vota al 11 % de los representantes parlamentarios. Dicho de otra manera, y atendiendo al tamaño del censo electoral en 2017, un escaño en Barcelona "cuesta" casi 49.000 votos, mientras que en Lleida se necesitan menos de la mitad de papeletas, unas 21.000.

También están sobrerrepresentadas, aunque en menor medida, Girona (el 10 % de la población, el 13 % de los escaños) y Tarragona (con el 11 % de la población, elige al 13 % de los diputados).

Partido más votado en cada municipio en las elecciones catalanas de 2017

Partido más votado en cada municipio en las elecciones catalanas de 2017 RTVE.es

La carrera electoral, por provincias

Al no disputarse las elecciones con un distrito único, hay cuatro escenarios electorales interesantes, uno por provincia, a los que merece la pena atender:

Lleida y Girona. El bastión tradicional del nacionalismo y el soberanismo; son un escenario en el que se dirimirá quién lidera el bloque independentista, si Junts o ERC.

Barcelona. ¿Recuperará el PSC el predominio electoral en los municipios del conocido como ‘cinturón rojo’ de Barcelona? Se trata del espacio que se corresponde con el área metropolitana de Barcelona. Es la región más poblada de Cataluña y tiene como factor, sociológico y económico común a la clase trabajadora. Incluye, además de la propia capital de Barcelona, municipios tan poblados como L´Hospitalet de Llobregat (de hecho, la segunda ciudad más poblada de Cataluña), Badalona (la tercera) y otras ciudades como Terrassa, Sabadell, Santa Coloma de Gramenet, Cornellà y El Prat de Llobregat.

Tarragona. En esta provincia Ciudadanos descolló en 2017 y se convirtió en la fuerza más votada en 2017, con un 27,5 % de los votos, representando el voto alternativo al soberanismo. ¿De qué manera evolucionará el voto en esta circunscripción? ¿Quién recogerá los apoyos que podría perder el partido naranja?

¿Y si el más votado no es el que gana? La aritmética la dan los pactos

Suena a paradoja, pero ya ha ocurrido antes en Cataluña que el partido más votado no fue el que logró más escaños. Ha ocurrido dos veces, y el afectado fue el PSC, el mismo partido que llega como favorito a este 14F.

Los socialistas catalanes tuvieron en dos elecciones consecutivas, en 1999 y 2003, más votos que CiU pero menos diputados, por el efecto antes explicado: los convergentes rentabilizaron más sus votos fuera de la provincia de Barcelona. Habrá que ver si el crecimiento del PSC en todas las circunscripciones le alcanza para ganar una cantidad proporcional de escaños.

De todos modos, las elecciones catalanas han enseñado que el Govern que no sale aritméticamente de las urnas sale políticamente de los pactos. Ser el primero en escaños no le sirvió a Artur Mas para presidir la Generalitat ni en 2003 ni en 2006, porque se impuso el tripartito de izquierdas entre el PSC, ERC e ICV. Tampoco le sirvió su histórica victoria al Ciudadanos de Inés Arrimadas en 2017, porque el presidente investido fue Quim Torra con los votos de JxCat y ERC y la abstención de la CUP.

En definitiva, todo vuelve al principio, a unos pactos entre partidos que, si no reescriben su guion, llevarán el resultado de estas elecciones a un nudo difícil de resolver.

[Ver el comparador de programas electorales de las elecciones catalanas]