Del teléfono y la cortina a la realidad virtual: así ha cambiado el plató del Telediario en seis décadas
- Decorados, cabeceras, sintonías… Repasamos cómo la tecnología y las modas han trazado la senda de los Informativos
- TVE ha presentado este lunes la nueva imagen de sus Telediarios, que apuestan por la realidad virtual y las nuevas narrativas
Durante años, hubo dos elementos imprescindibles sobre la mesa del Telediario: un micrófono de pie y un teléfono. Mucho ha llovido y muchas veces ha sonado la sintonía de los Informativos desde entonces, pero entender cómo han evolucionado los platós y su estética en estos 63 años de historia sería imposible sin echar la vista atrás para observar qué elementos quedan de aquellos inicios y en qué se han transformado los que no persisten.
Decorados, escenografía, cabeceras, recursos gráficos, equipamiento técnico… Repasamos cómo las tecnologías y las modas han trazado la senda de los Telediarios, justo cuando estrenan su nueva e innovadora imagen.
El primer plató, un chalet
Cuesta creer que hubiera un tiempo en el que TVE no tuvo Telediario, pero justo cuando la empresa acababa de nacer apenas había 600 televisores en todo Madrid. Fue en 1957 cuando, en un chalet situado en el Paseo de La Habana de la capital, un grupo de entusiastas decidió poner en marcha un proyecto de noticiario con escasos recursos, dos máquinas de escribir, un teletipo que no siempre funcionaba y dos teléfonos.
Aquello era todo lo que conformaba una redacción situada en un pequeñísimo despacho que parecía más bien el salón de una casa y que contaba con un plató de unos 10 metros cuadrados en el que solo cabían una mesa y unas cortinas como elemento decorativo.
Tampoco la técnica era avanzada; se leían recortes del periódico del día o el parte de RNE bajo el rótulo ‘últimas noticias’, y los técnicos tenían que acoplar ventiladores a las cámaras para evitar que se recalentaran.
Cuando no había grabaciones: solo fotografías y filmaciones de cine
Muy limitados eran también los recursos gráficos. En aquella primera década de existencia del Telediario ni si siquiera se emitían imágenes relacionadas con las noticias, y las fotografías o las filmaciones de cine eran lo único que se utilizaba para ilustrar las informaciones.
Los presentadores tenían que hacer grandes esfuerzos para describir el hecho noticioso y hasta tenían que poner voz a los anuncios de productos en directo, se tratara de un automóvil o una lavadora.
Pasaron años hasta que el trabajo de la redacción de informativos se profesionalizó y los operadores de cámara empezaran a salir a la calle para filmar las noticias.
Los primeros efectos: cortinillas, encadenados o fundidos
Un gran salto se dio con la construcción en 1964 de los estudios de Prado del Rey, que albergaban el plató más grande de Europa. Tiempo después, a finales de los 70, no solo mejoró la técnica sino que se unieron al Telediario algunos de los mejores periodistas de la época, quienes revolucionaron los informativos.
En 1979 los Telediarios ya incorporaban unidades móviles para agilizar la transmisión de los contenidos desde el lugar de la noticia. Poco después, en los años 80 y el tiempo de la Movida, los Informativos empezaron a reflejar un interés por desarrollar narrativas visuales que impactaran al espectador y fueron apostando por el uso de aparatos que lograban cambiar la manera de componer la imagen.
Fue entonces cuando irrumpieron los efectos en la pequeña pantalla: cortinillas, encadenados o fundidos que ahora parecen muy anticuados y que entonces eran pura innovación. También en estos años se empezó a incrustar en una misma pantalla la imagen de varios presentadores desde distintos puntos informativos, y se empezaron a incluir transiciones para dar paso a las distintas secciones.
También aparecieron las ‘moscas’, los logos que identifican a los canales de televisión y que se instauraron de forma más o menos estable en 1982.
El interés por la escenografía y la llegada del teleprompter
Cuando el icónico pirulí alza sus 220 metros de altura en Madrid y los informativos se trasladan a Torrespaña (1983), Televisión Española comienza a dar gran importancia a los decorados. En poco tiempo ya no se verán teléfonos sobre la mesa y los micrófonos de corbata y los pinganillos estarán completamente integrados.
Además, llegó otra nueva gran revolución: el teleprompter, ese sistema que permitió a los presentadores dejar de leer desde el papel, bajando y subiendo la cabeza, para empezar a comunicar de un modo mucho más natural. Su funcionamiento, cierto es, era mucho más rudimentario que el actual.
Cabeceras y sintonías adaptadas a los tiempos
También las cabeceras han cambiado mucho en el transcurso de estas seis décadas en las que han pasado de ser una ‘intro’ completamente artesanal a estar elaboradas mediante sistemas digitales y diseños 3D. Los cambios han seguido la moda gráfica del momento y han incluido elementos como el mapamundi, el televisor, la cámara o la imagen del Pirulí.
Algo parecido ha ocurrido con las sintonías, que han funcionado siempre como un elemento acústico que avisa del inicio del Telediario, aunque el espectador no esté delante de la pantalla. En sus inicios, las sintonías tenían un carácter orquestal y con el paso del tiempo han ido evolucionando hacia sonidos más electrónicos.
Cambios en los colores, los materiales y los elementos del plató
El color no se puede desvincular de las continuas transformaciones. En los inicios del Telediario, los tonos oscuros eran protagonistas de unos platós muy pequeños y con un fondo muy próximo al presentador, pero poco a poco se fueron suavizando a través de tonos más claros que seguían la estética del color corporativo, que siempre ha sido el azul.
En alguna ocasión se experimentó con otros colores para el plató, como el naranja, pero es el azul el color que siempre ha tenido mayor relevancia en la combinación de unos tonos que, en 2021, vuelven a ser oscuros.
Más cambiantes han sido los materiales del mobiliario desde aquellos años en los que solo había una mesa y unas cortinas en plató. A finales de los 90, por ejemplo, TVE siguió la tendencia del uso de maderas que marcaban los espacios informativos estadounidenses. El Telediario apostó por un decorado con una mesa de madera con muchos volúmenes y un fondo repleto de monitores que emitían distintas señales.
Ya en 2010 las maderas se empezaron a mezclar con los metales, en unas formas muchos más depuradas.
Primeras pantallas, 4K y… ‘virtual window’
En paralelo, las pantallas, que habían ido poco a poco ganando en tamaño desde el año 2004, han seguido adquiriendo cada vez más presencia dentro del decorado del Telediario hasta que en 2014 TVE se convierte en la primera televisión de Europa en usar un sistema de pantalla 4K.
Por primera vez, integraba efectos tridimensionales en directo y ganaba dinamismo para ofrecer una experiencia inmersiva al espectador. Muy innovador, sí, pero lejos todavía de la apuesta que este mismo lunes ha mostrado el Telediario: un plató que integra el recurso ‘virtual window’ y un sistema de realidad virtual con el que ofrece una narrativa más completa y de mayor impacto visual.
El nuevo plató del Telediario vuelve al minimalismo de sus inicios en cuanto a mobiliario, pero amplía el espacio para que el presentador gane en movilidad y le brinda numerosas posibilidades gráficas para complementar la información que aporta.
De algún modo, las pantallas no son más que una colosal evolución de aquellos papeles que llenaban las mesas del Telediario y que tenían que ser leídos por los presentadores, quienes tenían que hacer hincapié en las descripciones para que el espectador pudiera reconstruir en su cabeza una realidad que ahora se plasma de manera virtual.