Casado justifica el veto a dos jueces en la negociación sobre el CGPJ porque no acepta "puertas giratorias"
- La negociación con el Ejecutivo ha encallado tras el veto del PP al juez del tribunal de la Gürtel Ricardo de Prada
- Los 'populares' aseguran que sería "ilegal" nombrarlo vocal y vetan también a Victoria Rosell, delegada del Gobierno
Pocas horas después de que el Gobierno y el PP hayan dado por rotas las negociaciones para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el líder de los 'populares', Pablo Casado, ha explicado al comité de dirección de su partido que el veto a dos jueces propuestos por el Ejecutivo se debe a que el Partido Popular "no acepta la propuesta del PSOE de permitir puertas giratorias entre política y justicia", según fuentes de la formación. El PP considera, además, que permitir que el magistrado Ricardo de Prada sea nombrado vocal del Consejo sería "una ilegalidad".
La intensa semana de negociaciones que vino tras la llamada del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a Casado, pasadas las elecciones catalanas, cayó en saco roto este jueves por la noche. El principal escollo en la negociación ha sido el veto de los 'populares' al nombramiento como vocal del juez Ricardo de Prada, uno de los miembros del tribunal del caso Gürtel que firmó la sentencia que condenó al PP y que votó a favor de la recusación de los magistrados Concepción Espejel y Enrique López como miembros del tribunal del caso Gürtel por su cercanía al PP. Los 'populares' también han vetado el nombramiento de la delegada del Gobierno contra la violencia de género y exdiputada de Unidas Podemos, Victoria Rosell.
Según las mismas fuentes, Casado ha insistido ante el comité de dirección que la renovación debe ser para "fortalecer las instituciones y no para debilitarlas" con dichas "puertas giratorias".
Desde el PP insisten en que "siempre han dicho lo mismo" respecto a la renovación del CGPJ y recalcan que "en política, la coherencia es importante": "Desde el primer momento dijimos que De Prada y Rosell, no". "Nuestras condiciones eran muy claras y nuestra hemeroteca es meridiana", prosiguen las mismas fuentes.
En la batalla por ganar el relato sobre quién tiene la culpa del fracaso de las negociaciones, los 'populares' han respondido a la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, quien ha reprochado al PP que siempre haga "batalla" de esta cuestión: "Con estos ataques ellos se ven retratados. Nosotros no hemos atacado al Gobierno".
Culpan al "lío interno" del PSOE con UP y dicen que Sánchez tiene "la pelota"
También insisten en que no negocian con Unidas Podemos -el PSOE siempre ha dicho que la negociación se hacía representando a los dos partidos de la coalición- e instan al Ejecutivo a "solucionar sus cosas" y su "lío interno" con la formación de Pablo Iglesias: "La pelota está en el tejado del PSOE".
Según el partido de Pablo Casado, el juez Ricardo de Prada "no ha sido elegido por sus compañeros dentro del turno judicial ni ha recogido avales para ello", lo que supone "un fraude de ley" por parte de "un juez que pretende entrar al consejo por la puerta de atrás".
De hecho, a última hora de este viernes, el propio Casado insistía en sus redes sociales en que continúan "comprometidos con el reforzamiento de la independencia judicial y la despolitización de los órganos constitucionales", sobre todo, dice, "frente a los ataques de los radicales y populistas a las instituciones del Estado".
Por su parte, Enrique López, el negociador de los 'populares' sobre la renovación, ha asegurado que "las peleas de la coalición Sánchez-Iglesias son las que han determinado esta situacion y han creado obstaculos dificiles que dificultan los acuerdos".
"No podemos permitir ilegalidades. El juez de Prada es un juez de servicio activo propuesto por el turno de jurístas reservado a catedráticos abogados, es una ilegalidad y contrario a lo que determina la Constitución", ha justificado, y ha añadido que Victoria Rosell "es una política en activo y no queremos que haya políticos en el CGPJ. Es como si yo fuera propuesto".