Sanidad defiende el cierre en Semana Santa porque en caso de rebrote las UCI no tendrían "capacidad de reacción"
El Ministerio de Sanidad ha defendido este jueves la necesidad de un "endurecimiento" de las medidas ante el coronavirus para evitar un rebrote de la pandemia tras los festivos, al aumentar la movilidad. Aunque la tendencia de contagios es descendente, la ocupación en las Unidades de Cuidados Intensivos continúa siendo alta y, por ello, advierten: "Si ahora mismo volvemos tener un incremento mínimamente rápido de la transmisión probablemente no tendríamos la capacidad de reacción que hemos tenido en la segunda y tercera ola".
Así, lo han trasladado la secretaria de Estado de Sanidad, Silvia Calzón, y el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón durante la rueda de prensa para informar sobre la situación epidemiológica este jueves, cuando la Comisión de Salud Pública ha acordado una serie restricciones para el periodo de vacaciones. No obstante, estas deben ser ratificadas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud la próxima semana.
Entre los acuerdos alcanzados por los técnicos del Ministerio y las Comunidades Autónomas, se ha abogado por restringir la movilidad entre comunidades autónomas, aplicar el toque de queda desde las 22:00 hasta las 6:00 y reducir las reuniones a cuatro personas, tanto en espacios públicos como privados. También se recomienda que "se eviten todos los viajes que no sean necesarios". Madrid ha sido la única comunidad autónoma que ha mostrado su desacuerdo con la propuesta pactada.
Pide a la población que reduzca al máximo sus contactos
La secretaria de Estado, Silvia Calzón, ha pedido a la población que reduzca al máximo sus contactos y ha hecho hincapié en que "no todas las semanas son iguales", puesto que en esas fechas festivas es cuando suele aumentar la movilidad. Por todo ello, ha justificado "hacer un endurecimiento de las medidas que nos permita superar esta última etapa de sacrificio".
"A veces se discute si lo correcto es limitar el número de personas en reuniones a cuatro o seis. Lo que tenemos que hacer es reducir nuestros contactos sociales. Lo importante es que intentemos relacionarnos siempre con las mismas personas, ya sean tres o cinco. Y que estos días no se conviertan en una ruptura de lo que tiene que ser nuestra burbuja", ha explicado.
UCI en tensión
Ha sido Fernando Simón, en cambio, quien ha alertado sobre la situación de las UCI en nuestro país, cuyo descenso está siendo más lento que en las hospitalizaciones y los contagios. "Si ahora mismo volvemos tener un incremento, mínimamente rápido de la transmisión, probablemente no tendríamos la capacidad de reacción que hemos tenido en la segunda y tercera ola", ha advertido, y ha subrayado que una de cada cuatro unidades de críticos está ocupada por pacientes con COVID-19.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias ha informado también de que el Ministerio de Sanidad está estudiando con las comunidades autónomas por qué la estancia en las UCI de pacientes con COVID-19 está siendo más larga que en otras olas. "No tiene por qué ser mal dato, pero dificulta la reducción de ocupación y ese es obviamente uno de los objetivos que nos interesan", ha apuntado el epidemiólogo del Ministerio de Sanidad.
El descenso de los contagios comienza a estancarse
En cualquier caso, la tendencia de las cifras se mantiene en descenso, aunque Simón ha advertido que puede avecinarse una fase de meseta de los contagios, que se mantienen en cifras de mediados de agosto. El epidemiólogo no ha descartado que se deba, entre otras razones, a que algunas comunidades autónomas han podido levantar las medidas más severas, gracias a que las cifras de la pandemia han mejorado.
El director del CCAES ha indicado también que se está observando un descenso muy importante en el número de brotes en los centros sociosanitarios "hasta el punto de que se notificaron solamente ocho brotes" en centros de ese tipo en la última semana. Igualmente, ha destacado la reducción de brote en el ámbito educativo, donde si bien no es un descenso tan marcado como en residencias debido a la vacunación, sí que cuentan con más de un 94% de aulas en funcionamiento.
Sanidad ha notificado este jueves 254 fallecidos en 24 horas y 6.037 positivos nuevos. Así, España se queda a las puertas de entrar en el nivel de riesgo medio, con una incidencia de 153 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días. Entre las comunidades autónomas, destaca el dato de Extremadura que se sitúa ya por debajo de los 50 casos por cada 100.000 habitantes, es decir, está en nivel de riesgo bajo.
En cuanto a la vacunación, se han inoculado el 75% de las dosis recibidas. El Ministerio ha subrayado el ritmo de vacunación de este miércoles, con 170.000 pinchazos en un sólo día.