Las personas con parálisis cerebral se apoyan en la tecnología para comunicarse
- En el centro de día de ASPACE Ávila trabajan su comunicación y su autonomía
- Para muchos es su primer contacto con Internet
Abel sufre un Trastorno del Espectro Autista y Parálisis Cerebral. No puede comunicarse de forma habitual pero en el Centro de Día de ASPACE en Ávila trabaja en su autonomía y su capacidad de tomar decisiones. La herramienta más útil ha resultado ser un gran botón rojo con el que enciende y apaga un secador de pelo. Un dispositivo sencillo con el que su educadora y logopeda, Sara Serrano, ha conseguido llamar su atención. "Ver ese tipo de respuesta que no consigues con otras cosas es genial" afirma. En el sencillo gesto de Abel pulsando el botón ella detecta un intención comunicativa básica para seguir avanzando.
Manejar un ordenador con la mirada
Gerardo, también con parálisis cerebral, es capaz de hablar hasta en tres idiomas, pero tiene que mejorar su postura y su atención. Para lograrlo trabaja con un programa informático capaz de detectar su mirada. Sus ojos actúan como el ratón de un ordenador. El objetivo de estas sesiones a largo plazo es que sea capaz de utilizar un teléfono móvil adaptado a sus necesidades.
Su primer contacto con Internet
Son solo dos ejemplos de cómo la tecnología sirve de apoyo a las personas con parálisis cerebral para comunicarse. Cada avance redunda además en su autonomía y su autoestima. Sara Serrano es testigo de como a través de estos dispositivos "pueden pedir, pueden decir y pueden quejarse si quieren".
“Pueden pedir, pueden decir y pueden quejarse si quieren“
La gerente del Centro de Día de ASPACE en Ávila, Guiomar Martín, recuerda que para mucho es su primer contacto con las nuevas tecnologías. Valora como a través de sesiones como estas "pueden experimentar lo que es internet e interaccionar con las posibilidades que ofrece".