Enlaces accesibilidad

Envejecer en el pueblo

  • Millón y medio de personas mayores de 65 años viven en pueblos pequeños en España
  • Los varones que viven solos son mayoría en los pueblos y tienen más problemas para llevar su vida cotidiana

Por
Aumentan las iniciativas sociales que permiten a los mayores envejecer en pueblos pequeños

Millón y medio de personas mayores de 65 años viven en pueblos pequeños en España. Atenderles, darles opción a envejecer en su casa, con dignidad, es todo un reto. Una de las iniciativas que se han puesto en marcha para conseguirlo está localizada en Campo de San Pedro (Segovia), donde se ha llegado a la conclusión de que envejecer en casa no tiene por qué salir más caro que en una residencia.

Cuando hablamos con los habitantes de Campo de San Pedro, la mayoría opina que “yo quiero envejecer aquí. Y en mi casa, no en una residencia. Vamos, es que no me gustaría tener que irme a ningún lado” ha asegurado Justi. Además de apuntarse a la iniciativa para un futuro, Justi trabaja como cocinera para CODINSE, la promotora del proyecto que atiende a una veintena de mayores, vecinos de diferentes pueblos de la comarca Nordeste de Segovia. “Son gente mayor, que están solas... les preguntan ¿cómo te apañas? Y contestan encantados que les hacemos la comida en el Centro de Día de Campo y están estupendos!”, agrega.

La pandemia, con sus restricciones para evitar contagios, ha obligado a cerrar el comedor en Campo de San Pedro (200 habitantes), donde los mayores acudían a comer a diario. Ahora los menús se reparten personalmente en bolsas personalizadas. Se trata de una experiencia piloto sobre atención a los mayores en el medio rural. César Alonso, asistente personal del Centro de Día comenta que “a veces vivir bien significa algo más que tener la casa un poco limpia, ordenada, o hacerles la compra. A veces significa echarles una mano con las gestiones, ir al médico, porque aquí si no tienes coche estás perdido y hay que echarles una mano. Los varones que viven solos son mayoría en los pueblos y son los que tienen más problemas para llevar adelante su vida cotidiana”.

"Llevo una vida bastante triste"

A ocho kilómetros de Campo de San Pedro está Moral de Hornuez, pueblo con diez habitantes en invierno. Uno de ellos es Aderito de la Cruz, 72 años. Vive solo en compañía de sus gatos. “Llevo una vida bastante triste y aburrida” nos comenta entre sonrisas. Le recoge una furgoneta del Centro de Día de Campo para acercarle a hacer compras: “Yo medio de transporte no tengo. Soy dependiente de todo, de comida, de bebida, de transporte, de todo”.

La experiencia de cuidar a personas mayores en sus pueblos funciona desde hace siete años en Campo de San Pedro. Ahora que la pandemia está cuestionando otro tipo de servicios, como las residencias de ancianos, el proyecto cobra un interés especial. María del Mar Martín, gerente de CODINSE, ha explicado que “es verdad que son servicios caros. Pero se pueden hacer y no son especialmente gravosos. Tienen un copago y la propia administración en este momento está experimentando con este tipo de iniciativas. Este proyecto está financiado con fondos de la administración pública. Y hasta ahora está demostrando que no es más caro que cuidar a las personas en residencias. Porque hasta ahora se ha priorizado la inversión en ese tipo de instituciones, pero la pandemia ha puesto el modelo en solfa. Lo que estamos demostrando es que existen otras posibilidades de atender a los mayores, que se puede hacer de manera profesional y que se puede vivir en el pueblo con todos los servicios y comodidades”.

En concreto, desde el Centro de Día de Campo de San Pedro cuatro profesionales atienden a abuelos de diez pueblecitos de la comarca. Además de ofrecerles transporte y comida “damos talleres de memoria y de psicomotricidad. Y vamos por varios pueblos, tenemos en estos momentos siete talleres”, nos dice Almudena Montes, responsable de uno de esos talleres. Los vecinos que participan no lo dudan: “Sí, está bien, está bien”, “tienes más relación, más conversación”, “es divertido, a mí me gusta todo”.