Enlaces accesibilidad

Estados Unidos acusa a Rusia e Irán de injerencia en las elecciones de noviembre

  • Un informe de la inteligencia estadounidense también revela que Cuba, Venezuela y Hezbolá trataron de influir en el proceso

Por
Joe Biden durante un discurso en la Casa Blanca el sábado 6 de marzo de 2021.
Joe Biden durante un discurso en la Casa Blanca el sábado 6 de marzo de 2021.

Las agencias de inteligencia de Estados Unidos han acusado este martes a Rusia e Irán y han revelado que Cuba, Venezuela y la milicia chií libanesa Hezbolá también trataron de influir en el proceso, aunque su efecto fue más limitado.

En un informe de 15 páginas, todas las agencias de inteligencia de EE.UU., incluida la CIA y la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), también concluyen que el gobierno chino "no desplegó esfuerzos de interferencia" porque creía que el riesgo de interferir y ser descubierto era mayor que cualquier beneficio.

El reporte señala directamente al presidente ruso. Vladimir Putin probablemente dirigió una campaña para beneficiar a Donald Trump con "acusaciones engañosas o sin fundamento", en perjuicio del candidato demócrata y vencedor de las elecciones, Joe Biden, según el informe.

Las agencias de inteligencia estadounidenses señalan también otros intentos de influir en los votantes, incluida una "campaña de influencia encubierta" con la que Irán pretendía socavar el apoyo de Trump, después de que el expresidente retirara a EE.UU. del acuerdo nuclear y le impusiera nuevas sanciones.

Según el informe, China no influyó en las elecciones para apoyar a Biden, algo que habían insinuado los partidarios de Trump. Pekín "buscó la estabilidad en su relación con Estados Unidos", se lee.

Según ha informado la cadena CNN, Washington podría interponer sanciones a Rusia por esta supuesta injerencia a partir de la próxima semana.

Intentos de influir por parte de Cuba y Venezuela

La inteligencia estadounidense señala también a Cuba, Venezuela, y el grupo militante libanés Hezbolá. Todos ellos intentaron intervenir en los comicios presidenciales, aunque fue una acción "a menor en escala que los realizados por Rusia e Irán".

Este informe llega después del polémico reporte del exdirector del FBI, Robert

Mueller, que concluyó que Rusia también interfirió en las elecciones estadounidenses de 2016 para impulsar la candidatura de Trump con una campaña de propaganda destinada a perjudicar a su oponente demócrata Hillary Clinton.

"Evaluamos que los líderes rusos prefirieron que el expresidente Trump ganara la reelección a pesar de percibir algunas de sus políticas de la administración como anti-Rusia. Tenemos una alta confianza en esta evaluación", señala el informe.

Al igual que en las elecciones de 2016, la llamada "fábrica de trolls" rusa, anteriormente conocida como la Agencia de Investigación de Internet, impulsó historias despectivas en las redes sociales sobre Biden y los demócratas y se quejó de la censura de las empresas tecnológicas, según el informe. Además, trató de exacerbar las divisiones de Estados Unidos sobre cuestiones de justicia racial.