Los trabajadores esenciales en Asturias "cumplen un año"

• Además del personal sanitario, otras profesiones se declararon esenciales debido a la pandemia
• A día de hoy, el sentimiento de la mayoría es el cansancio y un deseo común: la vacuna

Los trabajadores esenciales en Asturias "cumplen un año"

Aunque la palabra "esencial" nos suene ajena y se la atribuyan al personal sanitario, ellos también sostuvieron la maquinaria de un país entero mientras éste paraba y se enfrentaron a un virus desconocido en plena calle.

Durante los primeros días de marzo hubo miles de personas que continuaron saliendo a cultivar, a pescar, a vender, a conducir, a limpiar y a velar por nuestra seguridad. Actividades básicas que ni siquiera el coronavirus logró detener.

Hoy, un año después del cierre, una frutera, una quiosquera, una empleada de limpieza, una charcutera y una conductora de autobús echan la vista atrás y lanzan la misma súplica apelando a la responsabilidad individual: "Por favor, que no volvamos a lo de marzo".

Aunque la posibilidad de una cuarta ola está sobre la mesa, la difícil situación epidemiológica y los confinamientos perimetrales se reflejan también en sus puestos de trabajo. Pase lo que pase, ellos siempre estarán en primera línea frente a la COVID-19.

Comercio de alimentación con atención a los más vulnerables

“Nuestra principal obsesión esos primeros días era dar servicio a domicilio a las personas mayores“

El puesto de frutas de Flor y otros comercios de alimentación se declararon esenciales. Recuerda el miedo de los primeros días, la falta de protocolos claros y un virus desconocido….y cómo no podían dejar sin dar servicio a los más vulnerables.

Comercio de prensa y material escolar

Durante esos días de marzo, Covadonga con un negocio de prensa también se convirtió en esencial. Fue asumiendo todas las medidas que recomendaba sanidad… Ahora con la misma precaución pero con menos miedo, va notando la tristeza de sus clientes… esa otra pandemia que nos invade

Servicios de limpieza municipal con las calles vacías

“La impresión de ver las calles vacías es lo que más me marcó en esos primeros días“

Laura, empleada de la empresa municipal de Limpieza de Gijón, trabajó desde el primer día del estado de alarma. Con la plantilla mermada a la mitad tuvo que afrontar tareas distintas con medidas preventivas que cambiaban de un día para otro.

El servicio público de transporte, también esencial

Eva María, conductora de autobús, define este año con la palabra incertidumbre. La de esos primeros días sin mamparas, casi sin clientes pero con mucha responsabilidad.

No caben todos en esta información… porque también fueron esenciales taxistas, transportistas, periodistas… El sentimiento común de la mayoría es el cansancio y un deseo común: la vacuna