Solo el 22 % de las universidades españolas cumplen con los requisitos para serlo
- El Observatorio del Sistema Universitario alerta de que 63 de 81 universidades no supera la criba de calidad exigida actualmente
- La cifra es aún más preocupante si se aplican los requisitos del Real Decreto que prepara el Ministerio de Universidades
La universidad española no pasa el examen para ser considerada como tal. Esta es una de las conclusiones del informe, ¿A qué puede llamarse universidad?, del Observatorio del Sistema Universitario (OSU) que indica que el 77 % de los centros incumple alguno de los requisitos del actual Real Decreto(RD). Un porcentaje que crecería al 85 % si hoy se aplicaran las disposiciones previstas en la próxima norma que prepara el ministerio dirigido por Manuel Castells.
Mucho trabajo pendiente antes de la nueva norma
En la rueda de prensa de presentación de este jueves, la autora del estudio, Vera Sacristán, ha afirmado que "hay un incumplimiento generalizado de los requisitos vigentes que además lo están desde hace mucho, se limitan a cinco y a pesar de ello solo 18 universidades de 81 analizadas cumplen". Una fotografía en la que se han tenido en cuenta 48 públicas y 33 privadas, y que no mejora si tenemos en cuenta la realidad de los centros adscritos donde el cumplimiento se desploma aún más, pasando de 18 a 10 el número de universidades. "Todo ello plantea la necesidad de articular un sistema de seguimiento efectivo del cumplimiento de los requisitos legalmente establecidos", reza el informe.
“Solo 18 universidades de 81 analizadas cumplen“
Entre esas disposiciones y obviando las referentes a infraestructuras, el texto actual destaca cinco puntos: una oferta docente mínima (que todas las universidades cumplen) y cuatro referidas a plantilla con la exigencia de una ratio mínima entre profesorado y estudiantado, así como unos porcentajes mínimos de Personal Docente e Investigador (PDI) a tiempo completo y permanente (este último criterio no se aplica a las universidades privadas).
Así, el nuevo texto que plantea Universidades, refuerza en su borrador los mínimos a cumplir y fija su objetivo en cuatro grandes aspectos de la enseñanza universitaria: ampliación de la oferta docente, incremento de la actividad investigadora y plantilla del PDI, además de una serie de requisitos relativos a centros adscritos a las universidades sobre la que existe en estos momentos cierta opacidad.
Diferencias entre pública y privada
Para Sacristán, el plazo de 5 años que el ministerio otorgará para que las universidades se pongan al día de sus nuevas obligaciones pillará a contrapié, a numerosos centros universitarios, sobre todo a los privados, puesto que las 12 universidades que actualmente pasarían el corte son públicas. Eso sí, los principales problemas a resolver varían según la titularidad: mientras que en los centros públicos la alta temporalidad del profesorado se convierte en una suerte de espada de Damocles (47 % de media actual frente al 40 % fijado y con un porcentaje que se dispara en las catalanas superando mayoritariamente el 60 %), las privadas adolecen de serias dificultades en lo relativo a la investigación siendo solo una, la de Navarra, la que cumple todas las disposiciones. "Fallan 32 de 33", incide Sacristán.
Si miramos el mapa, el dosier observa un fuerte contraste entre comunidades autónomas siendo Cataluña (con la totalidad de sus universidades públicas) y la Comunidad de Madrid (donde solo una pasa el filtro) las que lideran los incumplimientos. Estas notas, tal y como refleja el estudio, se recrudecen si hablamos de privadas.
La importancia de conocer qué se entiende por Universidad
Desde la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE), organización que aglutina a un grueso de 76 universidades en nuestro país, aseguran que "comparten la filosofía del proyecto del futuro Real Decreto", pero inciden en la necesidad de definir con mayor claridad y principios mínimos de calidad qué es la Universidad y "qué requisitos deben cumplirse para denominarse universidades".
En una nota publicada como respuesta a los datos de OSU, el organismo presidido por José Carlos Gómez Villamandos recuerda que aún queda un lustro para ajustar las nuevas condiciones, al tiempo que pone el foco en asuntos destacados del informe como el de las plantillas de las universidades públicas: "Se aprecian ahora y en toda su crudeza, las graves consecuencias que supusieron las políticas de recortes impuestas en la pasada crisis económica y que aún no se han revertido en su totalidad", explican.
También y en términos de actividad investigadora, echan en falta una mayor precisión tanto en el futuro RD como en el estudio lanzado este jueves. "En el Real Decreto, el sistema de medición de la actividad investigadora ni está suficientemente detallado ni responde a un criterio homogéneo y aplicable a todas las disciplinas; tampoco lo están los indicadores exactos que deben usarse para medir el porcentaje de PDI, al no aclararse si se habla de profesores equivalentes a tiempo completo o profesores sin más", determinan.
En esa línea, aseguran que "las simulaciones que CRUE hizo en su día dan como resultado un grado de cumplimiento mucho mayor por una gran mayoría de universidades españolas".