Valencia, año dos sin Fallas: "La próxima 'cremà' va a ser una catarsis colectiva"
- Los artistas falleros aseguran que no podrán sobrevivir a un tercer año sin Fiestas
- El impacto de la pandemia en la hostelería y el turismo ha elevado los niveles de pobreza en la Comunidad Valenciana
- Íñigo Alfonso ha realizado un programa especial de 'Las mañanas de RNE' desde el Ateneo de Valencia
Es 19 de marzo, pero en las calles de Valencia no huele a pólvora, ni a churros ni a buñuelos de chocolate. No se escuchan petardos ni hay rastro de los 900.000 turistas diarios que la ciudad recibió de media durante las Fallas de 2019. La pandemia ha dejado a los valencianos sin sus fiestas por segundo año consecutivo.
“Cuando piensas que es 19 de marzo se te cae el alma a los pies. La plaza tendría que estar llena de energía, pero está vacía”, lamenta Amparo Doñate, fallera mayor de la Falla Just Vilar de El Cabanyal, que echa de menos la gente, la carpa y hasta los ratos muertos esperando los actos con sus compañeros falleros. “La próxima ‘cremà’ va a ser una catarsis colectiva increíble”, ha asegurado Amparo en el programa especial que ‘Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso’ ha emitido desde el Ateneo de Valencia.
"Si este año no se plantan fallas, será la ruina"
Pero, más allá del componente emocional, la suspensión de las Fallas ha dejado en una situación crítica a todos los trabajadores relacionados con las Fiestas, especialmente a la pirotecnia, los indumentarios y los artistas falleros. La facturación del sector artesano fallero ha caído un 95%.
“Hemos resistido como hemos podido, como gato panza arriba. Si este año no se plantan fallas, puede ser la ruina total para todos los talleres porque a ver qué empresa resiste tres años sin ingresos”, nos cuenta Miguel Banaclocha, creador del pebetero instalado en la Plaza del Ayuntamiento de Valencia con el lema ‘Tornarem’, que sirve para recordar a las víctimas de la COVID y para homenajear a los artistas falleros. “Anímicamente estamos muy mal y más esta semana y la anterior, que es la nuestra. Estamos nerviosos porque no sabemos lo que va a suceder”, afirma.
El turismo y la hostelería, los sectores más afectados
Una incertidumbre que comparten dos de los sectores más golpeados en la Comunidad Valenciana: la hostelería y el turismo. “Vuelves a abrir y no sabes si vas a tener que cerrar otra vez. En un año llevamos cinco meses para el demonio y siete de facturación”, asegura Alfonso García, propietario y cocinero de la Bodega Aldeana 1927 en el barrio valenciano de El Cabanyal, que lamenta la ausencia de ayudas directas.
“Las administraciones sólo nos han echado muchas manos al cuello. El Estado ha dicho ‘los trabajadores para mí y el empresario que se las apañe’. Hace dos meses que nos obligaron a cerrar y sólo he recibido 657 euros de la mutua. Ya me dirás cómo se puede sobrevivir dos meses con esa cantidad", denuncia Alfonso que, al menos, conserva el calor de su clientela. “Abrimos hace dos días y la respuesta del público fue enorme y conciliadora”.
El chef valenciano Ricard Camarena, con dos estrellas Michelín, también acaba de reabrir sus restaurantes por segunda vez en menos de un año. “Éramos reacios a una apertura tan temprana, hemos abierto por aclamación popular. Los clientes, el equipo, el entorno… todo el mundo animaba a que abriésemos. Es emocionante ver cómo la gente te devuelve el esfuerzo que estamos haciendo yendo a los restaurantes y siendo muy responsables”, dice Camarena.
El mejor ejemplo de cómo el coronavirus está haciendo crujir los pilares de la economía de la Comunidad Valenciana es que Benidorm solo tiene 13 hoteles abiertos en este Puente de San José. “Cada vez tenemos más incertidumbre sobre cuándo llegará la normalidad”, reconoce Toni Mayor, presidente de la patronal hotelera Hosbec, que confía en que el dinero de las ayudas al sector “no se quede por el camino”.
Esa dependencia del binomio turismo-hostelería en la región se ha traducido en desempleo y pobreza. Hay 90.000 parados más que hace un año y el 27% de la población de Comunidad Valenciana está en riesgo de pobreza, según el INE. “Hemos triplicado el número de personas a las que damos de comer. Antes venían 300 y ahora estamos atendiendo a 900, y la cifra sigue subiendo todas las semanas”, explica Luis Miralles, presidente de la Casa Caridad, una institución solidaria que acaba de cumplir 115 años.
“Nuestro perfil son las personas sin hogar, pero cada vez vienes más personas que tienen un techo, pero no tienen trabajo y no llegan a fin de mes”, relata Miralles, que calcula que han repartido más de 175.000 euros en ayudas directas y vales comida desde que empezó la pandemia.
Ximo Puig augura una "desescalada prudente"
Los empresarios esperan que las restricciones acaben cuanto antes. El presidente valenciano, Ximo Puig, no descarta empezar a levantarlas a partir del 12 de abril, pero asegura que lo harán lentamente. “Vamos a hacer una desescalada prudente porque estamos mejor, pero aún no estamos bien y lo que queremos es que el verano sea lo más normal posible", subraya Puig que promete que ayudas a los sectores más afectados.
“Soy consciente del daño que se ha hecho a cientos de miles de familias que han visto mermada su capacidad económica, pero era necesario”, dice el presidente valenciano que calcula su Comunidad dispondrá de 650 millones en ayudas directas más 400 millones en ayudas financieras. “No hay suficientes recursos públicos para suturar la herida que ha producido esta crisis. son tiritas para un destrozo enorme”, admite Puig.
Actuación de 'Novembre Electric'
El programa especial ha contado con las actuaciones musicales de Yeray Calvo, integrante de ‘Novembre Electric’, un grupo valenciano formado por “intensitos”, como reconoce el propio Calvo, que “entiende la música desde el sentimiento y la emoción”. El grupo prepara un disco participativo con sus seguidores con un proyecto en el que invitan a la gente a colaborar en el proceso creativo.
“Desde las primeras notas de voz que uno graba en el móvil, pasando por el proceso de la letra hasta la grabación. Va a ser bonito compartir algo que normalmente queda recluido en el espacio de intimidad de la banda", asegura Calvo que ha interpretado dos temas: ‘Memento’ y ‘La sed’.