Cantabria aumenta el número de trasplantes y vuelve a liderar el ranking nacional de donación

• La seguridad en el Hospital Valdecilla desde el inicio de la pandemia permite, incluso, asumir la actividad de otras CC.AA.
• El Hospital realizó su primer trasplante cardiaco de donante en asistolia

Varios trasplantados nos trasladan sus testimonios

El Hospital Universitario Marqués de Valdecilla superó el pasado año la actividad trasplantadora de 2019, con 143 órganos, frente a un considerable descenso tanto a nivel nacional como internacional. Y es que el Hospital mantuvo una “situación óptima” durante la pandemia en materia de seguridad sanitaria, según el Coordinador de Trasplantes de Valdecilla y Cantabria, Eduardo Miñambres, con “separación real” entre áreas Covid y no Covid tanto en planta como en la Unidad de Cuidados Intensivos. Fue precisamente esta garantía la que permitió llevar a cabo trasplantes que otras comunidades no pudieron llevar a cabo. De hecho, más del 57 por ciento de los trasplantes se hicieron a pacientes jóvenes de otras comunidades autónomas, y se eleva al 70 por ciento si hablamos de pulmón, hígado o páncreas.

Además, en 2020, Valdecilla estrenó su primer trasplante cardiaco de donante en asistolia. Y llevó a cabo trasplantes renales de elevada complejidad, como injertos combinados, retrasplantes o a pacientes Testigo de Jehová.  Para estas técnicas son muchos los pacientes de comunidades vecinas los que “eligen Valdecilla, aun disponiendo en sus hospitales de trasplante renal”, explica Miñambres.

Solo un receptor renal fue infectado por el coronavirus durante su estancia hospitalaria en Valdecilla, una mujer joven, que precisó dos reintervenciones y que, en todo momento, estuvo asintomática, recuerda el Coordinador de Trasplantes.

Donación

También la donación descendió en el año Covid, pero Cantabria volvió a liderar el ranking nacional de donación. Se suspendieron los programas de asistolia no controlados, solo se realizó uno en toda España y fue en Valdecilla. Descartar la positividad por Covid en el donante se convirtió en un escollo más durante la pandemia. Miñambres destaca el ejemplo absoluto de solidaridad de las familias de los donantes en este fatídico año, porque ha sido “muy difícil para todos esperar más tiempo, aumentar los estudios, demorar todo para estar seguros de que no transmitimos nada al receptor, que es lo importante”.

Otro logro del H.U.M.V. es mantener una reducida lista de espera, “hasta el punto de que en algún momento no ha habido pacientes esperando de según qué grupos sanguíneos, explica el Coordinador. La espera es de tres meses en riñón y de hasta cinco en corazón, hígado y pulmón.