Sanidad y las comunidades no endurecerán las medidas restrictivas previstas para Semana Santa
- El acuerdo "de mínimos" entra en vigor este viernes, pero las autonomías pueden endurecer las restricciones
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El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas no endurecerán las medidas ya acordadas para Semana Santa, pese al repunte de los contagios de coronavirus. El Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud Pública (CISNSP) ha decidido mantener el "acuerdo de mínimos", alcanzado el pasado 10 de marzo, aunque los Gobiernos autonómicos podrán endurecer las restricciones contempladas.
En la rueda de prensa al término de la reunión con las Consejerías, la ministra Darias ha reiterado que en algunos territorios, de hecho, ya han determinado un cierre perimetral inferior al de la comunidad autónoma o han restringido el horario de la hostelería, medidas que no se contemplan en el "marco común de mínimos" orientado a evitar la temida cuarta ola de la pandemia.
Así, el plan consensuado entre las comunidades - y vigente a partir de este viernes- contempla el cierre perimetral, un toque de queda a partir de las 23 horas, limitaciones a las reuniones sociales de entre 4 y 6 personas, y la prohibición de encuentros entre no convivientes en domicilios.
Más de 64.000 agentes para asegurar el cumplimiento
En la sesión, en cambio, sí ha participado el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, que ha asegurado que Tráfico va a intensificar la vigilancia y control de los trayectos de corto recorrido en Semana Santa, y ha anunciado que más 64.000 agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil velarán por el cumplimiento de las restricciones por la pandemia.
"Seguimos en una situación excepcional y debemos permanecer en casa y reducir la movilidad al máximo. No cabe todavía planificar desplazamientos de largo recorrido", ha remarcado Marlaska en su comparecencia tras el Consejo Interterritorial.
Madrid, Baleares y Cataluña piden más control de las fronteras
Durante la reunión del Consejo, Madrid, Baleares y Cataluña han demandado un control exhaustivo de las fronteras exteriores, tras la polémica suscitada porque los ciudadanos nacionales no puedan viajar por el país, de acuerdo con las medidas, mientras sí pueden llegar turistas desde Europa. "Cualquier extranjero que venga a España debe cumplir la normativa de cada territorio", ha justificado el ministro del Interior sobre esta cuestión, y ha recordado que ya existen controles como la exigencia de PCR en origen.
Consejeros y ministra han constatado el "repunte claro" de casos de COVID-19 y hospitalizaciones en 10 comunidades autónomas, la preeminencia de la variante británica en todo el país -con regiones en las que asciende hasta el 80 % de los positivos-, y el aumento de la circulación de la sudafricana.
Preguntada por el retraso en el objetivo de alcanzar el 80% de los mayores de 80 años ya vacunados para finales de marzo, Darias ha asegurado que a partir de abril llegarán un millón doscientas dosis de Pfizer a la semana, por lo que a principios del mismo mes podría lograrse la meta. "Esta ministra ha pedido que se vacune todos los días de Semana Santa, que no paremos la vacunación. He encontrado una gran receptividad en todas las comunidades autónomas en esta cuestión", ha expresado.
Descartado el adelanto del toque de queda
Según había podido saber TVE, antes este miércoles, el Ministerio de Sanidad había estado sondeando a las comunidades para adelantar el cierre de la actividad comercial a las 20:00 horas durante los festivos próximos, pero finalmente no se ha abordado la cuestión. Tampoco se ha ahondado en el debate planteado por una comunidad autónoma sobre adelantar el cierre de la hostelería, porque no figuraba en el orden del día.
La ministra Darias ha explicado que será la Comisión de Salud Pública la que este jueves revise el documento de "Actuaciones de respuesta coordinada para el control de la transmisión de COVID-19", que se redactó en octubre, y que establece el conocido semáforo de riesgo y las restricciones pautadas: desde el nivel de riesgo "extremo" hasta la "nueva normalidad".
Para imponer un toque de queda a partir de las 20:00 horas, como se había planteado a lo largo del día, hubiera sido necesario modificar el decreto de Estado de Alarma en vigor, que en su artículo 5 determina que las limitaciones a la movilidad nocturna deben ceñirse al horario comprendido entre las 23:00 y las 6:00 horas, posibilitando a las autoridades comunitarias adelantar o retrasar una hora el inicio o el fin. De hecho, a principios de año, Castilla y León ya sufrió problemas legales por intentar fijarlo a las 20 horas.
La Comunidad de Madrid y Andalucía no apoyaban la propuesta del adelanto del toque de queda, aunque esta última ya cuenta con otro tipo de medidas más restrictivas, como el cierre perimetral por provincias. Del mismo modo, en Galicia, Andalucía Aragón, Murcia y Castilla-la Mancha, más que por endurecer las restricciones, apostaban por garantizar que se cumplan las que ya estaban acordadas. Finalmente, los Gobiernos de Cantabria y Castilla y León sí mostraron su apoyo públicamente a la alternativa de unas medidas más duras, siempre que así se acordara en el Consejo Interterritorial por consenso.