España también exigirá PCR negativa a viajeros de zonas de riesgo de Francia que entren por vía terrestre

• Hasta ahora la prueba era obligatoria solo para aquellos que entraran por vía aérea o marítima
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Un viajero a la espera de transporte

España también exigirá una prueba negativa de coronavirus a los viajeros procedentes de zonas de riesgo de Francia que entren por vía terrestre, lo que se suma a la obligación de presentar una PCR a aquellos que lleguen por vía aérea o marítima, como ya estaba en vigor. Así lo recoge el Boletín Oficial del Estado (BOE) este sábado en una orden que especifica que el test deberá realizarse en las 72 horas previas a la llegada a España y que la orden entrará en vigor en tres días, es decir, el martes 30 de marzo.

La medida aterriza en medio de la polémica por las fiestas ilegales y el denominado "turismo de borrachera", con el foco puesto en los franceses y en ciudades como Madrid, y las comunidades autónomas cerradas en Semana Santa por el aumento de la incidencia de casos.

Esta norma se suma a la que establecía que los ciudadanos procedentes de Francia que viajaran por vía aérea o marítima tenían que presentar una prueba negativa, por lo que a partir de ahora todos los viajeros de Francia, entren por donde entren, tendrán que presentar esta PCR negativa para acceder a España.

Todas las personas, mayores de seis años, procedentes de zonas de riesgo de Francia que lleguen a España por vía terrestre deberán disponer de una prueba PCR (RT-PCR), una prueba TMA u otro tipo de prueba diagnóstica para SARS-CoV2 basada en técnicas moleculares equivalentes, con resultado negativo, realizada en las 72 horas previas a la llegada, según el BOE

En Francia, las PCR son gratis, lo que anima a muchos turistas a viajar a España. En los últimos días la llegada de franceses ha centrado la batalla política, especialmente con las elecciones autonómicas del 4 de mayo en Madrid en el horizonte. La candidata de Más Madrid, Mónica García, criticó que vinieran "hordas de franceses" y acusó a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, de "hacer un efecto llamada al turismo de borrachera" convirtiendo la ciudad en el "after de Europa".

Zonas de riesgo en Francia

Se consideran zonas de riesgo todas aquellas de Francia calificadas por el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades con nivel de riesgo de color rojo oscuro, rojo, naranja o gris. En este mapa, que se actualiza semanalmente, todo el país vecino aparece en alguno de estos colores.

Especialmente afectadas están la región de Île-de-France, donde se encuentra París, y la de Provenza-Costa Azul, donde está situada Marsella, la segunda ciudad más poblada del país. En estas dos zonas la incidencia acumulada es de más de 500 casos por 100.000 habitantes, mientras que en el resto del país ninguna región baja de una incidencia acumulada de 150 casos por cada 100.000 habitantes.

Mapa del ECDC sobre las zonas de riesgo en Europa, actualizado el 25 de marzo ECDC

Eso sí, tal y como se recoge en el BOE, quedan exceptuados de esto los profesionales del transporte por carretera en el ejercicio de su actividad profesional, los trabajadores transfronterizos y los residentes en zonas fronterizas, en un radio de 30 km alrededor de su lugar de residencia.

El régimen de sanciones en caso del incumplimiento de lo previsto es el contemplado en el título VI de la Ley 33/2011 General de Salud Pública, referido a infracciones y sanciones. Esta orden entrará en vigor dentro de tres días y durará hasta que el Gobierno declare la finalización de la situación de crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19.

El Gobierno ha estado en los últimos días contra las cuerdas por permitir la llegada de turistas extranjeros, muchos de ellos franceses, mientras que la movilidad interna no está prohibida por el confinamiento perimetral. Partidos de todo el arco parlamentario han criticado una situación que tachan de "incoherente".

Todo ello se da, además, en el contexto de una tendencia al alza de los contagios. Ahora mismo la incidencia está situada en 138 contagios por cada 100.000 habitantes, tras crecer en los últimos días, datos que la ministra de Sanidad, Carolina Darias, calificó de "preocupantes". El Ejecutivo ha pedido endurecer las medidas a las comunidades y ha recomendado el cierre del interior de bares y restaurantes cuando la incidencia supere los 150 casos.