Monasterio no descarta gobernar con Ayuso en Madrid pero advierte de que no dará un "cheque en blanco" al PP

• Critica las reticencias de Casado a gobernar con Vox: "Si se equivocan de enemigo, allá ellos"
• Apuesta por reducir las consejerías a la mitad, por reforzar la seguridad ciudadana y combatir la inmigración ilegal

Monasterio no descarta gobernar con Ayuso en Madrid pero advierte de que no dará un "cheque en blanco" al PP

La candidata de Vox a las elecciones madrileñas del 4M, Rocío Monasterio, no descarta gobernar con el PP de Isabel Díaz Ayusoen la Comunidad de Madrid si con ello pueden ejecutar sus ideas y medidas de su programa. Su prioridad, ha dicho, es impedir que gobierne la izquierda en la región, ya que "lo único que sabe es traer miseria y desempleo", pero ha advertido de que ello no significa dar un "cheque en blanco" a los 'populares'.

La líder regional de Vox se ve en condiciones de ganar los comicios, pese a las encuestas que pronostican una victoria de Ayuso. "Yo vengo a las elecciones a ganar, con lo cual, a gobernar y luego veré a quién invito a mi gobierno", ha asegurado.

"Si conseguimos un buen resultado y necesitamos al PP, veremos qué equipos tienen para resolver los problemas de la gente, y ellos harán lo mismo (con Vox)", ha expuesto. Según su criterio, "se trata de crear equipos excelentes". A su juicio, el PP ha visto en Vox "gente competente que quiere meter en el gobierno" porque, según ha dicho, los 'populares' han perdido capacidad de "gestión".

Pero ha recalcado que su formación no ofrecerá un "cheque en blanco" al PP. "Tenemos unas ideas y unas medidas y si alguien las respeta nos pondremos de acuerdo. Ahora que no somos un matrimonio de tres con el señor Ignacio Aguado -Cs-, seguro que nos entendemos mejor", ha proseguido, en referencia al anterior gobierno regional de PP y Ciudadanos.

Entre esas ideas y propuestas está la de reforzar la seguridad ciudadana, combatir la inmigración ilegal, combatir los centros de menas o reducir a la mitad las consejerías del gobierno regional y los diputados de la Asamblea de Madrid: "No hacen falta tantos"-. Justo en este último punto ha dicho que ella no se vería "cómoda" en un Gobierno del PP con trece consejerías, como las que hay actualmente.

"Los españoles tienen que elegir si quieren ver a políticos colocados con sueldos de 100.000 euros al año o quieren poder tener pensiones o ayudas para quien lo está pasando mal en las colas del hambre o quieren seguridad en los barrios o quieren el control de la inmigración ilegal o quieren recursos para la sanidad pública o para la salud mental", ha señalado.

Sobre las reticencias de Casado: "Si el PP se equivoca de enemigo, allá ellos"

"He escuchado a -el líder del PP, Pablo- Casado decir que no quiere nuestro apoyo en el Gobierno regional", ha criticado Monasterio, quien ha recordado que el Partido Popular gobierna en Andalucía gracias al apoyo externo de Vox y que José Luis Martínez Almeida es alcalde de Madrid "gracias a Vox". "Si el PP y Génova se equivocan de enemigo, allá ellos", ha apostillado.

En este sentido, ha defendido que Vox ha "protegido a Ayuso" frente a "otros del PP" que pretendían, por ejemplo, cerrar Madrid por la pandemia y ha asegurado que, de no ser por el apoyo del partido de Santiago Abascal, Ayuso "estaría haciendo las políticas de -el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto- Núñez Feijóo". "Si hubiera sido por Génova o por el señor Aguado, la hostelería estaría cerrada. Ese es el efecto Vox en los gobiernos y esperamos que en los próximos meses ese efecto se vea", ha proseguido.

Y ha criticado también que el PP, en concreto Díaz Ayuso, "anunció mayoría absoluta" azul el 4M -Ayuso apostó por gobernar en solitario-. "Quizá ahora se han dado cuenta de que nos va a necesitar”, ha asegurado.

Por otra parte, ha descartado que Vox vaya a perder votos, tal y como pronostican las encuestas. En cambio, ha asegurado que su partido está atrayendo el voto de gente de izquierdas que ve que otros les han "traicionado". Ha puesto el ejemplo del candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, que "desde Galapagar ya no habla de temas que le afectan a la gente".