Segunda noche de disturbios en Minesota tras la muerte de un joven negro a manos de la policía

• La agente que le disparó asegura que se confundió de arma al usar el taser
• Los hechos ocurren en el mismo estado en el que se produjo el asesinato de George Floyd hace un año

Segunda noche de disturbios en Mineápolis tras la muerte de Daunte Wright en una detención policial

Centenares de manifestantes han desafiado este lunes por la noche el toque de queda impuesto por el gobernador de Minesota en protesta por la muerte del joven afroamericano Duante Wright durante un control policial el pasado fin de semana.

Daunte Wright falleció el domingo al recibir un disparo por parte de la policía durante un control de tráfico cerca de Mineápolis, Estados Unidos, de manera "accidental", según ha declarado este lunes el jefe de policía local de la zona, Tim Ganno. Los hechos ocurrieron a 15 kilómetros de donde se celebra el juicio contra el policía acusado de matar por asfixia a George Floyd y que esta semana en cara la recta final de su celebración lo que ha provocado que la tensión aumente aún más en la zona.

Según Ganno, la agente que disparó contra Wright quería emplear su pistola eléctrica conocida como "taser" para inmovilizarlo, pero se confundió y disparó con su arma de fuego".

"Le he disparado"

En la rueda de prensa ofrecida por la policía, se ha mostrado un vídeo de lo ocurrido. En él se puede observar cómo tres agentes se acercan al vehículo de Wright, uno de ellos intenta esposarle, pero Wright se resiste, empieza un forcejeo y, entonces, la policía saca su pistola y grita a modo de aviso: "¡Taser! ¡Taser! ¡Taser!". Se oye un disparo y entonces la agente exclama con sorpresa y dice: "Le he disparado".

Los policías habían parado el vehículo porque no tenía algunos papeles en regla, pidieron la identificación a Wright y se dieron cuenta de que tenía una orden de arresto pendiente, por lo que intentaron detenerlo. Fue entonces cuando el hombre intentó volver a meterse en el vehículo y recibió un impacto de bala.

La muerte de Wright ha provocado este lunes fuertes protestas, que han sido violentas en algunos lugares con el lanzamiento de piedras y otros objetos contra el departamento de policía de Brooklyn Center.

Biden llama a la calma

Por su parte, el presidente de los Estados Unidos ha lamentado este lunes la "trágica" muerte de Wright, pero ha llamado a la calma y a evitar la "violencia" en las protestas que se están produciendo.

Biden ha pedido a los ciudadanos esperar a la investigación completa sobre lo sucedido aunque ha asegurado que había visto el video ofrecido en la rueda de prensa y es "bastante explícito". Biden se ha pronunciado y ha dicho que "está por ver" si lo ocurrido era un accidente o algo intencional a pesar de que, instantes antes, la policía local había descrito los incidentes como una "descarga accidental".

Centenares de manifestantes desafían el toque de queda impuesto

"Las propuestas pacíficas son comprensibles. Y sabemos que la ira, el dolor y el trauma que existen en esos entornos entre la comunidad negra son reales, serios y tienen consecuencias. Pero eso no justifica la violencia", ha insistido el presidente. "Deberíamos escuchar a la madre de Dante, que está pidiendo paz y calma", ha agregado.

Mientras se suceden las protestas y a fin de controlarlas, las autoridades de Minesota (EE.UU) han declarado este lunes el estado de emergencia y toque de queda a partir de las 19:00 hora local y hasta las 6:00 de la mañana aunque eso no ha servido para que cientos de manifestantes salgan a las calles a protestar por segunda noche.

Los manifestantes se reunieron frente a la comisaría de Policía de Brooklyn Center, el suburbio de Mineápolis en el que ocurrió el suceso tras cumplirse el toque de queda de las 19.00 hora local (00.00 del martes GMT), y se han registrado enfrentamientos entre los manifestantes y agentes antidisturbios de la Policía Estatal de Minesota.

Según los reportes de medios locales ha habido detenciones y, en paralelo a los enfrentamientos, también saqueos de comercios aunque algunos de los comercios de la zona, que no fueron saqueados, estaban defendidos por civiles armados.