La búsqueda de la libertad personal y sexual de Anaïs Nin
- Tras triunfar en Francia, llega a España el premiado cómic Anaïs Nin. En un mar de mentiras, de Léonie Bischoff
- Es el primer título que publica la nueva editorial Garbuix Books
La escritora Anaïs Nin (1903-1977) es una de las personalidades más fascinantes del siglo XX, que hizo de su vida una búsqueda de la libertad personal y sexual que quedó reflejada en sus famosos diarios, en los que relató sus infidelidades con el escritor Henry Miller y su esposa June e incluso una relación incestuosa con su padre. Ahora un cómic recrea esa época en la que la vida de Anaïs Nin cambió para siempre: Anaïs Nin. En un mar de mentiras, que viene precedida por su éxito en Francia (ha vendido más de 30.000 ejemplares y ha recibido varios premios entre los que destaca el del Público en el Festival de Angulema).
Es el primer título de una nueva editorial Garbuix Books, que está dirigida por Montserrat Terrones (quien fuera editora de La Cúpula durante varios años). Montserrat nos comenta por qué ha decidido comenzar la andadura de la editorial con este cómic: "Bueno, creo que la decisión fue más del libro que no mía. Cuando lo leí, quedé tan enamorada tanto del dibujo como de la historia, que no me quedó otro remedio que publicarlo, lo tuve clarísimo, y también que iba a ser el primero en salir, porque me pareció un título muy potente y una buenísima carta de presentación".
Montserrat (Granollers, 1979), nos cuenta lo que nos vamos a encontrar en este libro: "El cómic está basado en dos libros suyos, Incest y Henry and June (añade Montserrat) en los que habla tanto de la relación con su padre como del triángulo con Henry Miller y su mujer June. Sin pretender ser un libro de historia, los hechos narrados se corresponden con lo que Anaïs Nin ha explicado en sus escritos".
"Una mujer que se atrevió a ser ella misma"
Montserrat destaca el valor que tuvo su protagonista, en una época en la que la mayoría de las mujeres estaban relegadas a las tareas del hogar: "Destacaría que fue una mujer que se atrevió a ser ella misma, cosa que no es fácil y ya se ve en la obra que tuvo muchas luchas internas al respecto. Tendemos a creer que somos libres, pero en realidad no es así. La libertad tiene un precio y muy pocos están dispuestos a pagarlo. Anaïs Nin exploró tanto su personalidad como su sexualidad, en un momento en que esto no estaba bien visto, y además se atrevió a escribir sobre ello y encima a publicarlo".
"La obra de Anaïs Nin, al menos por la que es conocida, esto es, sus diarios, tiene un carácter confesional que es mucho más honesto que muchas de las autobiografías que se están publicando en la actualidad -añade la editora-.
Pero... ¿Cómo es la Anaïs que nos encontramos al principio del cómic:"Es una mujer que está en un momento de su vida en que se encuentra en un cruce de caminos -afirma Montserrat-. Tiene mucha energía retenida, tanto de tipo creativo como de tipo sexual, que tiene que encarrilar. La energía no canalizada conduce a la frustración".
"A lo largo de la obra, recorre el camino que le permite descubrir una sensualidad que intuye en sí misma, pero que hasta el momento no ha logrado explorar, a la vez que también entiende cuál es el camino artístico que debe recorrer y ser al fin la persona que quiere y siente que debe ser. Y se irá encontrando con diferentes personas que de una forma u otra jugarán un papel en ese camino".
Henry y June
El cómic comienza a principios de la década de 1930, Anaïs Nin vive en las afueras de París con su hermano, madre y esposo Hugo, quien, gracias a su profesión de banquero, cubre sus necesidades materiales. Anaïs escribe en su diario de forma regular (es su compañero inseparable y donde analiza sus sentimientos y su sensualidad), pero su sueño es publicar una novela. Una noche conocerá a Henry Miller, con el que iniciará una relación extramatrimonial a la que pronto se unirá June, la esposa del escritor. Ese trío le abrirá un nuevo mundo de experiencias sensoriales, sentimentales y sexuales.
"Henry Miller juega un papel determinante en el cambio de su relación con el sexo y parece ser que también, al menos en el inicio, en su desarrollo como autora -asegura Montserrat-. También es cierto que la relación fue recíproca y, como se observa en el cómic, Anaïs Nin también ayudó mucho a Henry Miller con sus obras. June le descubre a Anaïs Nin otra forma de estar en el mundo, le despierta también otro tipo de deseo y le da materia prima para la creación de su obra, ya que la transforma en personaje".
Anaïs también se relacionó con el mundo de la cultura parisina y con grandes artistas e intelectuales de la época como Antonin Artaud, Otto Rank, Salvador Dalí, Edmund Wilson, Gore Vidal, James Agee, Lawrence Durrell... "Europa aún es la capital cultural del mundo occidental y París sigue teniendo un gran peso en ese aspecto -nos cuenta Montserrat-. Aún existe una cierta bohemia y es el momento de la eclosión de las vanguardias y del psicoanálisis. Muchos artistas e intelectuales están viviendo en ese momento en París y toda una comunidad de escritores norteamericanos".
"Léonie lo centraliza en la figura de Henry Miller y June, aunque más tarde incluye a Lawrence Durrell, y el caso del psicoanálisis es muy evidente, con profesionales que trabajan en París, pero que es más que probable que se hubiesen formado en Alemania o Austria" -añade la editora".
La sexualidad y el incesto
En una época en la que se celebraba la exaltación de la sexualidad por parte de Henry Miller, sin embargo seguía escandalizando la sinceridad de Anaïs sobre ese mismo aspecto. "Supongo que la vivió entre el anhelo y una cierta conflictividad -nos comenta Montserrat-. No me parece que Anaïs Nin fuese una persona que sintiese culpa, o al menos no lo parece a través de su obra, pero evidentemente debió de generar conflictos internos porque el entorno no acompañaba. Creo que intentó vivir la sexualidad al máximo, y con eso no me refiero a la cantidad, sino a la calidad, es decir, que esperaba del sexo algo más que un acto mecánico, es decir, lo entendía como un mecanismo de placer y no se resignó a que no fuese así".
"Me parece muy valiente, porque no era normal, de hecho hoy sigue siendo difícil todavía, que se acepte que las mujeres reclamen abiertamente su derecho al placer -añade la editora-. Sobre el erotismo literario, creo que sí, que fue una de las pocas mujeres que en ese momento hablaba abiertamente sobre sexualidad y desde el punto de vista de la mujer".
Lo más escandaloso de sus diarios fue la supuesta relación incestuosa de Anaïs con su padre, Joaquín Nin, un compositor y pianista cubano, de ascendencia española, que abandonó a la familia cuando Anaïs solo tenía once años. La escritora confesaba en sus escritos que, cuando volvió a reunirse con él, ya de adulta, vivieron una relación incestuosa.
"El incesto es un tabú, por lo cual genera incomodidad -asegura Montserrat-. En su caso parece ser una relación consentida, aunque narra un episodio bastante oscuro ocurrido durante la infancia y el retrato que hace del padre no es bastante ambivalente. Está claro que la figura del padre tuvo mucha influencia y no toda positiva en su vida y que la marcó para siempre. Lo que me parece muy relevante es cómo lo refleja Léonie Bischoff, sin emitir ningún tipo de juicio o valoración".
Un dibujo bello y delicado
Destacar los bellísimos dibujos de Léonie Bischoff, que nos trasladan inmediatamente al París de los años 30. "Creo que el dibujo de Léonie Bischoff es maravilloso, fino y delicado, con unos colores hermosos, que encaja a la perfección con el tipo de trato que ha querido dar a la obra y vida de Anaïs Nin. Esta historia se podía haber dibujado de muchos formas y el tipo de dibujo podría haber hecho hincapié en unos aspectos u otros. La opción gráfica ha sido la belleza y la delicadeza, y me parece que ha sido un gran acierto y una de las razones del éxito del libro".
Montserrat Terrones también ha sido la encargada de la estupenda traducción del cómic y ya trabaja en nuevos títulos de la editorial Garbuix: "Garbuix Books publicará no ficción, tanto en cómic como en ensayo. Nos interesan temas como la biografía, la historia, el feminismo, la política… siempre entendidos en sentido amplio, no como categorías estancas. En lo que respecta al cómic, queremos que tengan un vínculo con la realidad, que expliquen cosas e incluyan una visión del mundo y nos ayuden a comprenderlo".
"No pretendemos que esta sea una editorial feminista, aunque la editora soy yo, y está claro que mis intereses y filias de una forma u otra se van a ver reflejadas en el catálogo, pero no, la idea es tener un catálogo más amplio. El próximo cómic que publicaremos será en mayo y se trata de Solas en Berlín, de Nicolas Juncker, una historia muy dura sobre la amistad entre una civil alemana y una soldado rusa justo en el momento en que Berlín cae en manos del Ejército Rojo. La obra nos habla de cómo las mujeres son víctimas de las guerras, estén en el bando que estén".
Además Montserrat sigue con su imprescindible proyecto Mujeres entre viñetas, donde cada semana nos descubre la biografía y la obra de una gran artista de las viñetas. "Sí, sigo con el proyecto junto con la dibujante Panchulei y en junio hará un año que empezamos. Publicarlo recopilado en Garbuix Books podría ser una opción aunque tampoco me lo he planteado, queda mucho camino y muchas biografías de autoras aún por publicar antes de empezar a pensar en darle forma de libro".