Biden se compromete a reducir las emisiones de EE.UU. "a la mitad" para 2030
- El presidente estadounidense ha hecho el anuncio al inicio de la "Cumbre de Líderes sobre el Clima"
- Rusia ha asegurado que será "climáticamente neutra en 2050" y China pide tener en cuenta a los países en desarrollo
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se ha comprometido este jueves a reducir las emisiones de efecto invernadero de su país "a la mitad" para 2030, con el objetivo de alcanzar la neutralidad en las emisiones de carbono para 2050.
El mandatario estadounidense ha hecho el anuncio al inicio de la "Cumbre de Líderes sobre el Clima", que fue convocada por el propio Biden y que busca unir fuerzas para luchar contra el cambio climático. La conferencia virtual en la que participan 40 líderes internacionales ha comenzado este jueves coincidiendo con la celebración del Día Internacional de la Tierra.
Biden también ha advertido de que el mundo "no tiene otra opción" que actuar para contener la crisis climática, porque "los costes de la inacción no paran de crecer", en un "momento de peligro".
Una economía "con cero emisiones netas
Al comenzar la cumbre, Biden ha confirmado el plan de Estados Unidos de reducir sus emisiones entre un 50 y un 52% para 2030 con respecto a los niveles de 2005, un nuevo objetivo con el que espera animar a otras naciones a aumentar su ambición para luchar contra el cambio climático.
"Estos pasos colocarán a Estados Unidos a convertirse en una economía con cero emisiones netas para no más tarde de 2050", ha afirmado el mandatario, quien ha descrito la lucha por el clima como un "imperativo moral y económico" y ha subrayado que "realmente no hay otra opción" que sumarse a ella.
"La ciencia sobre la crisis climática es innegable y los costes de inacción no paran de crecer", ha subrayado Biden, quien ha destacado las "oportunidades" que ha destapado ese problema para "crear empleos" en la economía verde.
"Ningún país puede resolver esta crisis solo"
El nuevo objetivo de Estados Unidos casi duplica el compromiso del expresidente demócrata Barack Obama de reducir las emisiones entre un 26 y un 28% para 2025 con respecto a los niveles de 2005. El compromiso de Biden es el mismo que ha asumido la Unión Europea, que ha alcanzado un acuerdo que fija el objetivo de lograr la neutralidad climática a mitad de siglo, aunque más ambicioso que el de China, durante la cumbre ha reiterado su intención de lograr esa meta para 2060.
"Ninguna nación puede resolver esta crisis por sí sola (...) Todos nosotros, todos nosotros y particularmente aquellos que representamos las economías más grandes del mundo, debemos dar un paso al frente", ha aseverado.
Durante el inicio de la cumbre, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, ha señalado que "ninguna región" del mundo es "inmune" a los efectos del cambio climático, mientras que el secretario de Estado, Antony Blinken, ha destacado el consenso mundial para actuar contra la crisis climática en un mundo en el que hay "tantos temas" en los que las grandes potencias no están de acuerdo".
Rusia apuesta por mejorar el cálculo de emisiones nocivas
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha propuesto establecer una cooperación internacional amplia y eficaz para calcular y monitorear todas las emisiones nocivas para la atmósfera. Una forma de cuantificar mejor cómo está afectando el cambio climático al planeta.
"Se deben tener en cuenta todos los factores que causan el calentamiento global. Por ejemplo, el metano representa el 20 % de las emisiones antropogénicas", según Putin. El presidente ruso sostuvo además que ya no es suficiente hablar solo de los volúmenes de nuevas emisiones de dióxido de carbono, sino también de la absorción del CO2 acumulado en la atmósfera.
Putin ha asegurado que Rusia contribuye "de manera colosal" a la absorción de emisiones globales, tanto las propias como las de otros. Además, ha puntualizado que el desarrollo global no debe ser únicamente "verde", sino también sostenible en todos los países sin excepción, por lo que el mismo "debe ir de la mano con el progreso en áreas tan importantes como la lucha contra la pobreza y reducir las brechas entre países".
Dijo que Rusia está dispuesta a considerar posibles "beneficios incluso para empresas extranjeras que quisieran invertir en tecnologías limpias, también en Rusia". El presidente ruso recordó que quiere que las emisiones de gases de efecto invernadero se reduzcan en Rusia en los próximos treinta años hasta niveles por debajo de los de la Unión Europea (UE), la cual se ha fijado como meta convertirse en climáticamente neutra en 2050 y lograr una reducción neta de emisiones de "al menos el 55 %" para 2030.
"A pesar del tamaño de Rusia, las peculiaridades de su geografía, el clima y la estructura económica, esta tarea, estoy seguro, es alcanzable", sostuvo Putin. Recalcó que, en comparación con los niveles de 1990, Rusia ha reducido las emisiones de gases de efecto invernadero "en mayor medida que muchos otros países", al rebajarlas de 3.100 millones de toneladas de CO2 equivalente a 1.600 millones de toneladas.
China reivindica el papel de las economías emergentes
El presidente de China, Xi Jinping, ha llamado a la unidad para dejar "un futuro más limpio a los jóvenes". En su discurso, ha destacado los ambiciosos objetivos medioambientales de China y subrayó el reto mayúsculo que supondrán a su país. "Nos hemos comprometido a pasar del pico de emisiones a la neutralidad de carbono en un plazo mucho más corto del que necesitarían muchos países desarrollados", ha aventurado Jinping.
En este caso, China se ha comprometido a ser climáticamente neutro en 2050 a pesar de sus altos niveles de emisiones actuales. "Eso nos exigirá esfuerzos extraordinariamente duros". Según el líder chino. Asimismo, Xi Jinping ha recordado que "no todos los países deben asumir la misma factura contra el cambio climático", un argumento habitual de Pekín.
China estima que, en principio, las responsabilidades del cambio climático afecta a todos los países aunque con diferencias. "Debemos de reconocer plenamente las contribuciones de los países en desarrollo y acomodar sus particulares dificultades y preocupaciones", ha señalado Jinping que estima que los países en desarrollo deberían tener más manga ancha que un país ya desarrollado.