Cuatro obras conocidas basadas en hechos reales para celebrar el Día Internacional del Libro

• La realidad en muchas ocasiones es la mejor inspiración para la literatura
• Aunque una obra se base en hechos reales no tiene por qué ajustarse en su totalidad a la veracidad

Celebramos el Día Internacional del Libro hablando de novelas basadas en hechos reales

Muchos escritores buscan inspiración en experiencias personales o reales para sus libros. Aunque “basado en hechos reales” no es lo mismo que real, ya que las licencias literarias para hacer más entretenidas las historias son frecuentes y legítimas.

Lo prioritario es disfrutar de la lectura, pero conocer los hechos que inspiraron una obra siempre consigue cierto impacto en el lector. Por eso, en ‘Cuando No Era Viral’ hemos querido hablar de cuatro títulos conocidos que están basados en hechos reales para celebrar el Día Internacional del Libro.

1. Orange is the new black

Seguramente conozcas la serie ‘Orange is the new black’, pero toda la trama se basa en el libro homónimo de Piper Kerman. En esta obra, Kerman explica cómo fue su experiencia en una prisión federal para mujeres después de que la condenasen por contrabando de drogas y blanqueo de dinero. Y esta saga inspiró a Clealry Wolter (Alex en la serie), expareja de Piper, a contar su propia experiencia en el narcotráfico y en la cárcel un su libro Out of Orange.

Para los que no conozcáis la historia, Piper Kerman era una chica de clase alta que se enamoró de una mujer que dirigía un negocio de narcotráfico. Viajó con ella por el mundo y colaboró en el contrabando de droga hasta que la detuvieron. Tuvo que cumplir 15 meses de cárcel hasta que en 2005 fue puesta en libertad. Cinco años después, su crónica vio la luz y en 2013 se emitió el primer episodio de la serie, que cuenta con siete temporadas.

2. El exorcista

Muchas historias de terror se basan en sucesos reales y la más famosa de todas ellas es El exorcista. William Peter Blatty publicó la novela hace cincuenta años y se inspiró en el caso de exorcismo a Roland (seudónimo), de 14 años, en 1949. De hecho, esta historia fue tan conocida que el Washington Post también informó sobre el exorcismo en su periódico.

Recorte de la noticia de 'Washington Post' sobre el exorcismo de Roland INFOBAE

En este medio daban detalles de lo ocurrido con Roland: escuchaba ruidos extraños, se movían objetos y tenía crisis en las que gritaba o lloraba. Lo llevaron a dos hospitales jesuitas y en ambos reconocieron “que no eran capaces de curarlo por medios naturales”. Esto fue lo que llevó a un sacerdote a acompañarlo durante dos meses a diario para observarlo y terminar exorcizándolo. Aseguran que el niño hablaba en latín, aparecían en su piel palabras malditas e incluso llegó a pegar a un cura.

Portada de 'El Exorcista' de William Blatty

Finalmente, consiguieron curar a Roland y el Washington Post recoge que: "Sólo después de entre 20 y 30 intervenciones del antiguo rito del exorcismo, aquí en St. Louis, el demonio fue finalmente expulsado del joven". Blatty leyó este artículo, investigó el caso durante décadas y, cambiando al protagonista por una niña y tomándose algunas licencias literarias, escribió El Exorcista. Más tarde también se encargaría de la adaptación cinematográfica, considerada la mejor película de terror de todos los tiempos.

3. Las aventuras de Robinson Crusoe

‘Las aventuras de Robinson Crusoe’ de Daniel Defoe es ya un clásico de la literatura en la que se cuenta cómo el protagonista sobrevivió en una isla desierta durante 28 años después de que su barco naufragase. La historia nos muestra la capacidad del ser humano para enfrentarse a las adversidades, la soledad y nuestra necesidad de socializar.

Portada de 'Robinson Crusoe', de Daniel Dafoe. PLANETA DE LIBROS

La novela de aventuras, publicada en 1719, fue todo un éxito y es una de las más traducidas. Y sí, este relato extraordinario también está basado en hechos reales. El verdadero Crusoe se llamaba Alexander Selkirk y no naufragó, su barco lo abandonó en la isla de Más a Tierra (hoy en día isla de Robinson Crusoe) por amotinarse. Tampoco estuvo 28 años y con la compañía de Viernes, estuvo casi 5 y completamente solo hasta que lo rescató el navío de Woodes Rogers.

El Banco Serrana recibe su nombre por el capitán Pedro Serrano, que permaneció allí náufrago durante 8 años.

Defoe también se inspiró en la historia del capitán español Pedro Serrano, que naufragó en un banco de arena del Mar de Caribe. Estuvo allí ocho años y tuvo la compañía de otro náufrago que falleció al poco tiempo de que los rescatasen. Usando estas dos historias y un poco de imaginación, Daniel Defoe creó a Robinson Crusoe, todo un referente de la literatura.

4. El Código Da Vinci

Si te gusta el misterio y el conspiracionismo, El código Da Vinci de Dan Brown es tu libro. Se publicó en 2003 y se convirtió en un best-seller. Su protagonista, Robert Langdon, descubre un mensaje oculto en las obras de Da Vinci y mezcla enigmas que implican a la Iglesia católica.

Portada de 'El Código Da Vinci' de Dan Brown

La obra tuvo numerosos detractores por poner en duda algunos dogmas del cristianismo, ya que el propio autor de la obra asegura que “todas las descripciones de obras de arte, arquitectura, documentos, y los rituales secretos de esta novela son veraces”.

¿Hasta qué punto la historia de Brown es real? Es la pregunta que ha rondado desde la publicación del libro en nuestra sociedad y que ha hecho que se hayan publicado otros libros e incluso obras audiovisuales analizándolo. El código Da Vinci utiliza elementos reales, como el Santo Grial, la Orden de los Templarios, el Priorato de Sion. También habla de María Magdalena, de Jesús, de la creación del cristianismo… y lo mezcla todo en un único entramado ficticio.

Portada del documental sobre la verdad de 'El código Da Vinci' AMAZON

Aunque a lo largo del libro aporta fuentes para contrastar los hechos que cuenta, lo cierto es que gran parte de la obra de Brown tergiversa la realidad para regalarnos un trepidante relato que ha confundido a muchos lectores y escandalizado a otros tantos religiosos.

Bonus Track: Peaky Blinders

Aunque lo más habitual es pasar de un libro a una película o serie, a veces ocurre lo contrario. La serie de Peaky Blinders se empezó a emitir en 2013 y ha sido todo un fenómeno que ha llevado a que en 2020 el historiador Carl Chinn publique Peaky Blinders: La verdadera historia.

El nombre en sí hace referencia a las gorras que llevaban: peak (visera) y blinders (cegados, porque les cubrían los ojos o por la cuchilla que llevaban escondida en ellas para cegar a sus oponentes en sus frecuentes peleas). Pero los ‘peaky blinders’ según Chinn, bisnieto de uno de ellos, no eran más que "simples matones de los barrios pobres. Aunque algunos de ellos también eran pequeños delincuentes, la mayoría tenía trabajo y no pertenecía a una banda cuyos mafiosos negocios de alto nivel le permitiera ganarse la vida".

Portada del libro de Carl Chinn sobre la historia de los 'peaky blinders'

Se sitúan en Birmingham, como ocurre en la serie, y de hecho esta ciudad tenía mala fama y se la conocía como “La ciudad de los peaky blinders”. Además, Thomas Shelby está inspirado en Billy Kimber, líder de los Birmingham Boys, y la guerra de bandas fue real. Darby Sabiny y Alfie Solomon también existieron ,así como el famoso pub Garrison, que ya no está abierto al público.

De modo que, aunque la serie tiene referentes reales, no deja de ser una ficción en la que se romantiza a las mafias y se exagera el poder de los peaky blinders. Por eso Carl Chinn insiste en su obra en que “ninguno de ellos eran hombres a los que uno pudiera admirar por su honorabilidad, principios o moral".

'Peaky Blinders' es una famosa serie sobre estos pandilleros de la plataforma Netflix. NETFLIX

Se suele decir que la realidad supera a la ficción y estos libros nos demuestran la capacidad de convertir hechos verídicos en historias aún más increíbles. Celebra el Día del Libro recomendando alguna obra que te guste, terminando ese libro que tienes a medias o empezando alguno de los que aparecen en esta lista pero, sobre todo, ¡disfruta de la lectura!