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'Brexit'

El conflicto pesquero franco-británico en Jersey tensa el pacto del 'Brexit'

  • Barcos de pesca galos protestan en el puerto de esta isla británica frente a las costas francesas

Las autoridades de Jersey negocian con los pescadores para facilitar una salida

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Francia y Reino Unido envían buques a la isla de Jersey por nuevas tensiones tras el Brexit

El conflicto pesquero entre Reino Unido y Francia en la isla de Jersey ha subido de nivel este jueves con la protesta de unos 60 barcos franceses en el puerto de la isla.

Durante unas horas, los pescadores han mostrado carteles y han encendido bengalas cerca de buques mercantes y de recreo en el puerto de Saint Hélier. Los buques habían salido de diferentes puertos de Normandía y Bretaña, como Granville o Saint-Malo.

La isla de Jersey, a pocos kilómetros de la costa francesa pero bajo soberanía británica, ha sido desde hace siglos un caladero de los pescadores franceses.

Sin embargo, la salida del Reino Unido de la Unión Europea ha alterado la situación. Francia acusa a Reino Unido de establecer condiciones no previstas en el acuerdo firmado con Bruselas para el Brexit. Por ejemplo, periodos de pesca más cortos de lo previsto, la exigencia de modificar los tipos de redes o la limitación de especies capturables.

Como consecuencia, solo 41 barcos franceses, de una lista de 344, fueron autorizados el pasado 30 de abril a faenar hasta finales de año, lo que ha provocado el conflicto.

Reino Unido y Francia han llamado a la calma, pero a la vez han desplegado patrulleras en la zona.

El gobierno local negocia con los pescadores franceses

El gobierno de Jersey se reúne este jueves con representantes de los pescadores en un intento de rebajar la tensión. En un comunicado, el Ejecutivo autónomo ha explicado que varios de sus miembros se han reunido con los líderes de los pescadores a bordo del barco Norman Le Brocq con la intención de "escuchar sus inquietudes en cuanto a sus derechos de pesca".

Las autoridades locales han abierto la puerta a que los barcos que no hayan obtenido la licencia recopilen toda la información y puedan recuperarla.

Por su parte, Don Thompson, de la Asociación de Pescadores de Jersey, ha señalado que sus colegas franceses "tenían desde el 1 de enero para adaptarse a las nuevas normas", y quizás el agravio lo sienten aquellos "que no cumplen los requisitos".

París pide calma y Johnson muestra su apoyo a Jersey

"La cuestión de fondo es que los británicos deben respetar sus compromisos", ha declarado la presidencia francesa, que ha pedido calma. "Es un problema en Jersey y hace falta solucionarlo rápidamente bajo las condiciones previstas en el acuerdo de salida", añaden desde el Palacio del Elíseo.

"Nuestra voluntad no es alimentar las tensiones, sino que haya una aplicación rápida y completa del acuerdo", ha subrayado el secretario de Estado francés de Asuntos Europeos, Clément Beaune, tras hablar con David Frost, el actual responsable gubernamental británico de las relaciones con la UE.

El pasado martes, la ministra del Mar, Annick Girardin, advirtió de que Francia podría cortar el suministro de electricidad a Jersey como medida de presión.

Por su parte, el primer ministro británico, Boris Johnson, ha mostrado su "apoyo inequívoco" al Gobierno de la isla y ha dicho que las dos patrulleras de la Marina británica permanecerán en la zona "por precaución".

La pesca, uno de los principales obstáculos para el Brexit

La pesca fue uno de los principales obstáculos para llegar a un compromiso entre Bruselas y Londres para el Brexit.

La Zona Exclusiva Económica del Reino Unido (hasta las 200 millas náuticas a partir de su costa) cuenta con unos caladeros muy ricos en pescado que representan el 15% del total de la pesca europea y del que salieron entre 2012 y 2016 una media anual de 1.285 millones de toneladas de pescado, según un estudio de la Comisión de Pesca de la Eurocámara de 2019. El 57% de esas capturas fueron de los Veintisiete -más de 739.000 toneladas que alcanzaron un valor cercano a los 540 millones de euros- frente al 43% de los pescadores británicos.

Por su parte, las capturas de pesqueros británicos en sus aguas se concentran en caladeros de menor tamaño. La actividad pesquera del Reino Unido en sus aguas apenas aporta un 0,1% del PIB, pero pese a representar tan poco peso Johnson lo convirtió en un símbolo de la soberanía nacional y del apoyo de los pro-Brexit.

Los pesqueros franceses capturan en aguas del Canal de la Mancha sobre todo cangrejos, bogavantes, vieiras y caracoles. Es una zona con abundantes recursos, por lo que los franceses no entienden las limitaciones impuestas por Jersey.