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Elecciones Madrid 4M

El efecto Ayuso: cómo la derecha ha vuelto a dominar Madrid

Por
Isabel Díaz Ayuso
Isabel Díaz Ayuso

El PP ha conseguido una gran victoria en las elecciones en la Comunidad de Madrid el 4M, expandiendo el color azul en el mapa político de la región.

Así era el reparto entre derecha e izquierda en Madrid en 2019...

... y así es el equilibrio de fuerzas en Madrid hoy, después de que la derecha haya arrasado en las elecciones del 4 de mayo.

Mientras que en 2019 la división era de 128 municipios para la derecha (PP, Cs y Vox) y 52 para la izquierda (PSOE, Más Madrid y U. Podemos), en 2021 la izquierda solo ganó en 19.

La hegemonía del bloque de derecha se debe a la victoria incontestable del PP, que ha ganado en 176 de los 179 municipios madrileños. Este mapa muestra cuál ha sido la primera fuerza en cada municipio y con qué porcentaje de voto.

Las excepciones al dominio de los 'populares' son dos pequeños municipios, El Atazar y Fuentidueña de Tajo, donde gana el PSOE; y Navarredonda y San Mamés, donde empatan a votos con los socialistas.

De 2019 a 2021, el PP ha mejorado su resultado en todos y cada uno de los municipios madrileños.

Y su triunfo es independiente del tamaño de la población: el partido saca buenos resultados en pueblos de apenas unos cientos de habitantes y en ciudades de más de 50.000. En dos municipios grandes como Boadilla del Monte y Pozuelo de Alarcón, el PP ha conseguido más del 60% de los votos.

Como consecuencia, el mapa del bloque de derecha que conformaban en esta cita electoral PP, Vox y Ciudadanos también se pinta así.

La progresión de este bloque entre 2019 y 2021 es clara.

Cada 🔵 es un municipio, más grande o más pequeño en función de su población. Cuanto más arriba está un municipio, más votó a la derecha en las elecciones de 2019. Cuanto más a la derecha, más la ha votado en 2021.

El voto a la derecha ha aumentado en toda la Comunidad de Madrid, a excepción de ocho municipios.

Pozuelo de Alarcón y Rivas-Vaciamadrid se sitúan en los extremos de la escala de voto a la derecha. Pero su situación es más parecida en lo que a renta se refiere.

La renta media de los municipios tiene una relación directa con el voto al bloque de derecha: a más renta, más voto.

Cuanto más arriba está un municipio, mayor renta media. Cuanto más a la derecha, más voto al bloque de derecha en 2021. El color indica si en el municipio ganó la derecha 🔵 o la izquierda🔴.

Hay otros factores que pueden influir en mayor o menor medida en cómo se vota en un municipio. Desde el paro -estrechamente relacionado con la renta-, hasta la edad, pasando por la densidad de población o el porcentaje de población extranjera.

👀 Tradicionalmente se asociaba una relación directa entre la abstención y un mal resultado de la izquierda. El resultado de la derecha en unas elecciones con participación histórica parece desterrar esa idea.

Pero ninguno de esos factores tiene una relación tan clara con el voto a la derecha como con la renta.

Una relación que se ve aún con más fuerza al bajar al detalle de sección censal -un nivel por encima de mesa electoral-. De nuevo, a mayor renta, más voto al bloque de derecha.

Aunque, como ya hemos visto, en estas elecciones en la Comunidad de Madrid el análisis del voto a la derecha y al PP muestra que han conseguido crecer de manera transversal.

La derecha en Madrid vuelve a tener nombre propio. Isabel Díaz Ayuso ha pasado de liderar el peor resultado de la historia del PP, con el 22,2% de los votos en las pasadas elecciones, a alcanzar uno de los mayores apoyos, con el 44,7%. Sin llegar a superar las mayorías absolutas de los tiempos de Alberto Ruiz Gallardón (1995 y 1999) y de Esperanza Aguirre (2003, 2007, 2011), ha arrasado sin ninguna sombra de duda.

Con la sangría de Ciudadanos y el discreto resultado de Vox, la actual presidenta autonómica ha concentrado casi el 80 % de los votos del bloque de partidos de la derecha, un resultado a la altura del dominio azul absoluto en el Madrid de Esperanza Aguirre, hace más de una década.

El PP de Ayuso ha pasado por encima de la fragmentación del voto y de la lógica de los nuevos partidos. Se ha llevado prácticamente uno de cada dos votos depositados en las urnas este 4M, un resultado al nivel del bipartidismo de antaño.

Con una campaña centrada en erigirse como un bastión de "libertad" frente al Ejecutivo central, y en la confrontación con Pedro Sánchez, Ayuso ha logrado una aplastante victoria, duplicando por lo alto los escaños que consiguió en la última cita electoral. Y haciendo casi irrelevantes al resto de fuerzas dentro del bloque.

Ayuso ha rozado la mayoría absoluta y, con ello, ha convertido en complementos menores a los otros dos partidos del bloque de la derecha, Vox y Ciudadanos. El primero ha crecido muy poco; el segundo se ha desintegrado. Pero los 500.000 votos -y 26 escaños- que ha perdido Ciudadanos se han visto de sobra compensados por los 43.000 con los que ha crecido Vox y, sobre todo, con los más de 900.000 que han impulsado la victoria del PP.

Tiene interés observar cómo Vox ha sustituido al partido ‘naranja’. Después de que Ciudadanos fuera expulsado del Gobierno autonómico, Edmundo Bal intentó imponer sus siglas como alternativa centrista y moderadora del gobierno del PP en la Comunidad. Pero su campaña ha sido un fracaso.

Si en las elecciones madrileñas de 2019 Ciudadanos era una opción preferida a Vox en la inmensa mayoría de las poblaciones -solo en 13 la candidatura de Rocío Monasterio fue más votada que la de Ignacio Aguado, y solo una, Villa del Prado, superaba los 5.000 habitantes-, en 2021 la situación se ha dado la vuelta por completo. Bal solo ha sido preferido a Monasterio en cinco de los pueblos más pequeños de la Comunidad, cuya población total no supera los 600 habitantes.

Ninguno de los dos, ni tampoco juntos, hacen sombra a la hegemonía actual del PP en la derecha madrileña. La diferencia entre el porcentaje de votos al PP y la suma de Vox y Cs es como mínimo de más de 20 puntos en 172 de los 179 municipios de la Comunidad de Madrid, y supera de media el 30 % en los municipios mayores de 10.000 habitantes de la región.