El plan de peajes del Gobierno: un céntimo el kilómetro y compensaciones para transportistas

• El modelo del Ejecutivo se basa en que solo paguen aquellos que utilizan el servicio
• Se espera que el cobro en autovías entre en vigor en 2024 después de pactarlo con los sectores afectados

Un peaje en la AP-4, autopista gratuita desde 2020.

El Gobierno mantiene su planteamiento de imponer peajes en todas las autovías del país en 2024 como ha prometido a la Comisión Europea. Sin embargo, se abren a compensar a los transportistas y estudia establecer un precio de un céntimo por kilómetro recorrido, según fuentes del Gobierno consultadas por RTVE.es.

Desde el Ejecutivo, insisten en que el modelo de las autovías con peaje es habitual en los países europeos. A cambio del pago por el uso de las vías de alta capacidad "España recibirá 140.000 millones de euros de los fondos pagados por todos los ciudadanos europeos" ha destacado el secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Pedro Saura.

"Se trata de una medida justa porque pagarían solo los usuarios que utilizan las carreteras y no el conjunto de la población mediante los Presupuestos Generales del Estado", ha añadido Saura. El secretario de Estado de Transportes también ha defendido el planteamiento de los peajes en las autovías como "coherente" para revertir el dinero en la infraestructura de transporte y eliminar el déficit que existe en la conservación de las carreteras del país.

En cualquier caso, Saura insiste en la necesidad de contar con el mayor consenso social, político y económico, sobre todo con el colectivo de transportistas. Según la propuesta emitida a Bruselas, los transportistas estarían excluidos del pago de los peajes y su coste lo asumirían los cargadores.

Peajes "sin pérdida de competitividad"

Aun así, desde el sector transportista ya han criticado la medida, defendido que la carretera ya está sometida a otros gravámenes y que la imposición de peajes a los profesionales podría desencadenar un aumento de los precios para los consumidores, según Europa Press.

Saura ha descartado que esto pudiese ocurrir, argumentando que los peajes ya existen en Europa, donde también circulan los camiones que traen mercancía a España, señalando además que, cuando hay competencia, "no tiene por qué trasladarse ese pago a los precios, por lo que no habría una pérdida de la competitividad de la economía española".

Otro de los aspectos clave en el que Saura justifica esta medida es la sostenibilidad y la reducción de emisiones. El objetivo que se ha marcado el Gobierno es que la gente utilice más el tren, una alternativa más respetuosa con el medio ambiente y en cuya infraestructura los españoles han invertido 65.000 millones de euros en los últimos 30 años.

A este respecto ha cifrado en 4 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO₂) lo que se han reducido en los últimos diez años en el corredor entre Madrid y Barcelona como consecuencia de que el uso del AVE se ha multiplicado por seis durante este mismo periodo de tiempo. Saura ha asegurado que esta medida no se puede implementar ahora, en un contexto de crisis económica derivada de la pandemia, por lo que solo se podría introducir en una situación posterior a la recuperación económica.