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Vuelven las comuniones adaptadas a la era covid

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Vuelven las comuniones al mes de mayo, su fecha tradicional, con restricciones

El mes de mayo es sinónimo de celebración de comuniones pero la pandemia lleva un año y medio condicionándolo todo. Niños, niñas, familias, comercios, restaurantes, hay muchos sectores pendientes de la evolución de la pandemia.

Desde la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño explican que, a día de hoy, las comuniones se pueden celebrar pero deben respetar los aforos permitidos en cada momento.

El vestido de comunión, al límite

En esta costumbre social, cobra importancia especial tanto el traje o el vestido de comunión de los niños y las niñas. También el banquete con menos invitados y los regalos.

Los vestidos se renuevan, clásico y sencillo para niñas y marinero, para los niños

Respecto al vestido de comunión, hay muchas opciones. Rosa Fernández, responsable de una tienda de ropa infantil en Logroño, reconoce que los vestidos clásicos, los largos, siguen siendo los preferidos, aunque cada vez vienen más renovados. Para los niños, el traje marinero es uno de los más demandados.

Catequesis on line y presencial

La Diócesis riojana ha optado por realizar la catequesis tanto on line como presencial cuando ha sido posible. Hay celebraciones como las bodas que se han aplazado pero las comuniones se están manteniendo en su fecha habitual, que por lo general, suelen celebrarse en mayo.

Aún así, Santiago Ruiz, portavoz de la Diócesis, reconoce que aunque los niños y niñas hayan cursado la catequesis en su parroqia de referencia, muchas familias han decidido trasladar la ceremonia a la Iglesia del pueblo de sus abuelos, para evitar aglomeraciones y así poder celebrar una Primera Comunión más íntima. Todas las iglesias, asegura, cumplen con las medidas de seguridad, con aforo del 30%, distancia social y con asistencia de familiares directos.

Ruiz reconoce que ha sido un año complicado en el que se han tenido que adaptar a las nuevas circunstancias: "Facilitamos una plataforma virtual donde los niños y las familias podían seguir haciendo la catequesis de manera digital desde sus casas. Durante todo el año han existido dudas por parte de las familias acerca de la posibilidad de celebrar con normalidad la Primera Comunión de sus hijos". También reconoce que la mayoría tienen muchísimas ganas de celebrarlas.

Incertidumbre entre las familias

A estas alturas del año, los niños y niñas que van a recibir el sacramento de la Primera Comunión ya han hecho los deberes. Pero la incertidumbre que rodea algunos de estos eventos no deja tranquilas a algunas familias ni a sectores afectados como las tiendas de trajes y vestidos de comunión, rodeados por esta inseguridad. Existe la posibilidad de tener que cancelar o posponer la celebración para más adelante cuando la situación epidemiológica mejore.

Los trajes se confeccionan pensando en un posible aplazamiento. Los críos crecen de un día para otro

En las tiendas reconocer que las familias dilatan en el tiempo lo máximo posible la confección de la prenda. Ahora debemos hacer una previsión importante por si finalmente aplazan el evento para que los trajes valgan más adelante. Los niños crecen de un día para otro. Con todos estos condicionantes, lo que los niños quieren es celebrar este día tan especial y no dejarlo para el año que viene.