La izquierda se desdibuja en el cinturón rojo de Madrid: "He votado a Ayuso por tema COVID, no me sé su programa"
- La derecha se queda con Móstoles, Alcorcón, Parla, Arganda del Rey, Pinto, Mejorada y San Martín de la Vega
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"¿Y a los de mi edad cuándo nos toca la vacuna?". El goteo de personas que acuden a las puertas del centro de salud Alcalde Bartolomé González, en pleno centro de Móstoles, es constante. A la puerta dos trabajadoras, pulverizador con desinfectante en la mano, van atendiendo a los pacientes de esta zona básica de salud confinada hasta el domingo por su alta incidencia de casos de COVID. Todavía no se explican el resultado electoral de Madrid. No que ganara la candidata del PP -eso lo daban por hecho- sino el resultado tan amplio obtenido por Isabel Díaz Ayuso, a solo cuatro escaños de la mayoría absoluta.
"Se quejan de todo" -dicen en alusión al descontento de los ciudadanos por los retrasos en las citaciones en una Atención Primaria saturada o al hecho de tener que ir de Móstoles a Madrid a vacunarse- "pero ha vuelto a salir lo mismo". Otro compañero -que también prefiere no dar el nombre- cree que Ayuso ha sabido conectar con el lado "emocional" del votante cansado de la pandemia.
Móstoles -la ciudad más importante del llamado 'cinturón rojo' de Madrid y la segunda más poblada de la región- es el municipio más grande que ha perdido el bloque de la izquierda en las autonómicas del 4M. PP, Vox y Ciudadanos han sumado el 53,1 % de los votos frente al 45,1 % de PSOE, Más Madrid y Podemos-IU. Hace dos años, la proporción fue justo al revés. No es la única localidad de esta zona -en la que vive el 21 % de los habitantes de la región- en la que ha ocurrido. La izquierda -que en 2019 ganó en esta docena de municipios- ha perdido también otras ciudades como Alcorcón y Parla, en este caso por una décima. Conserva otras como Getafe, Leganés o Fuenlabrada, pero en este último caso por apenas 400 votos.
"He votado a Ayuso por tema COVID, no me sé su programa"
La respuesta de este vuelco electoral que está 'desdibujando' a la izquierda en su mayor caladero de votos -en los ayuntamientos de todas estas ciudades gobierna la izquierda- se puede encontrar a pocos metros del centro de salud mostoleño, en el mismo Parque Cuartel Huerta donde está ubicado. Rosa, de 46 años y antigua votante socialista, explica que esta vez ha votado al PP por la gestión que ha hecho Ayuso de la pandemia. "La he votado por el tema COVID, no me sé su programa", reconoce. Tiene una hermana sanitaria y, en ese sentido, sí cree que "quizá" el PP haya mirado "demasiado" por la economía en vez de fijarse en "el cansancio de los sanitarios", pero, si no se abre, justifica, "nos hundimos".
Pedro -nombre ficticio- regenta un bar cerca de la Ermita de Nuestra Señora de los Santos. Este peruano, que lleva 32 años viviendo en España, también votó a Ayuso el 4M después de haber votado a Ciudadanos hace dos años. "Los políticos son casi todos iguales. El mejor de los peores, al menos para la hostelería es el PP", señala en alusión a la decisión de Ayuso de no cerrar en ningún momento la hostelería, como sí han hecho otras regiones, incluso gobernadas también por los 'populares'.
La gestión que ha hecho Ayuso de la pandemia es uno de los argumentos más repetidos por los ciudadanos que han votado al PP, e incluso entre los que no lo han hecho. Ainara, una estudiante de 20 años, explica mientras desayuna frente al Centro Cultural Dos de Mayo que ella ha votado al partido animalista PACMA, pero que está "contenta" de que haya ganado Ayuso "porque Vox no le gusta nada" y cree que ha hecho "una buena gestión de la pandemia".
“No me gusta Gabilondo, pero voté al partido“
A Camilo, de 77 años, le sorprende que la gente piense que el PP ha hecho una buena gestión de la pandemia. Cree que es porque no han estado ingresados como él 20 días en la UCI por COVID. "En el hospital me trataron como a un perro. El 4 de agosto llamaron a mi familia para decirles que no salía", relata tomando el sol en un banco de la plaza Pradillo. "Desde que tengo uso de razón soy socialista. No me gusta Gabilondo, pero voté el partido", añade este leonés de nacimiento cuyo padre estuvo a punto de ser fusilado en la Guerra Civil. "¿Sabes cómo llamo a Ayuso? La presidenta de la taberna".
"¿Y los que somos obreros y de derechas qué?"
Un par de bancos más allá, están sentados Alfredo Manuel y Consuelo, un matrimonio de septuagenarios, que también eran votantes del PSOE en la época de Felipe González pero que ahora votan a Vox y al PP, respectivamente. Él, móvil en mano, le está enseñando a su mujer visiblemente molesto las declaraciones del cofundador de Podemos, Juan Carlos Monedero, sobre que no le parecen "Einstein" las personas con bajos ingresos que votan al PP. Ella se queja de que se piense que la gente ha votado al PP solo porque ha mantenido abiertos los bares y él defiende su voto al partido ultra porque "pide cosas lógicas" y está en contra de la 'okupación' y de que la gente "venga sin papeles" a España, porque son cosas "que nos cuestan dinero".
Manuel, de 21 años, también vota a Vox "porque es el único que mira por los de aquí y el único que quiere acabar con las restricciones. El PP nunca me ha gustado, solo mira por los pijos. ¿Y los que somos obreros y de derechas qué?", sentencia.
La Plaza 'roja' de París, en Fuenlabrada
A 15 minutos en coche del centro de salud en el que arranca este reportaje, está la Plaza de París, bastión socialista de Fuenlabrada. Esta barriada construida en el año 80 -ropa tendida, parabólicas y aires acondicionados en las fachadas- forma parte de la única de las tres secciones de esta ciudad en las que ha ganado el PSOE, con casi el 34 % de los votos. En todas las demás se ha impuesto el PP.
Ramón, jubilado de la Peugeot de 64 años, toma el vermú con sus amigos mientras se oye cantar un canario en uno de los balcones. Asegura bromeando que cuando oyó los resultados de su municipio -donde los socialistas siempre han gobernado en el ayuntamiento- pensó que debía de haber "otra Fuenlabrada que no conocía" en Madrid. La izquierda ha ganado a la derecha pero por tan solo 348 votos, cuando en 2019 se hizo con seis de cada diez votos.
“Yo pienso que lo que han hecho es darle un palo al pijo“
Ramón, que vota el PSOE en autonómicas y municipales y a su "amigo el coletas" -Pablo Iglesias- en las generales, cree que "todos los que han votado al PP han traicionado al PSOE". "Yo pienso que lo que han hecho es darle un palo al pijo", aventura en alusión al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Alfonso, jubilado de 73 años, toma el sol a pocos metros en uno de los bancos grafiteados de la plaza, donde locales cerrados se alternan con un par de alimentación, una gestoría, una clínica podológica y otra de terapia musical. "Soy socialista. Ya no lo estoy pero estaba afiliado al partido desde la época de Felipe González. Desde que gobierna el PP la comunidad ha hecho muy poco, prácticamente nada por Fuenlabrada y el hospital, porque nos manifestamos", comenta.
La dueña de un bar de la zona, que prefiere no dar su nombre, reconoce, sin embargo, que ha votado a Isabel Díaz Ayuso: "Habrá hecho cosas buenas y malas pero a nosotros nos tiene en pie aunque sea con restricciones".
En el Mercado Belén de Fuenlabrada los locales cerrados se alternan con los puestos aún abiertos en una escena cada vez más habitual en las ciudades españolas. En la casquería uno de los clientes habla de que "si Ayuso lo hace bien estos dos años y ayuda a los autónomos...", pero cuando se le pregunta prefiere no hablar de política con la prensa. Uno de los tenderos cercanos, que ha votado en blanco, lo resume: "La gente habla un poquito de política, pero nosotros nunca".
Verónica, de 34 años, no tiene problema en reconocer que en 2019 votó a Ciudadanos pero que ahora lo ha hecho al PP "porque dentro de lo malo, lo menos malo". Es enfermera en un hospital privado y cree que la "gestión a nivel nacional de la pandemia fue un desastre".
El votante 'desaparecido' del PSOE en Leganés
El bloque de izquierdas sí ha conseguido mantener otras ciudades del 'cinturón rojo' como Leganés aunque ha pasado de tener el 58,4 % de los votos en 2019 al 51,5 %. El PP ha sido, en cualquier caso, la fuerza ganadora con el 35,8 % de las papeletas, más de 20 puntos más que hace dos años. El PSOE se ha quedado en el 23,3 %, más de once puntos menos que en 2019.
Cuesta encontrar ciudadanos que reconozcan abiertamente que han votado al PSOE. En un banco junto al Ayuntamiento, dos mujeres descansan al mediodía. Una de ellas lleva en la mano un llavero con un cordón rojo con el lema de Gabilondo 'Hazlo, Madrid'. El mismo que puede leerse a pocos metros en unos carteles electorales. Al preguntarle si le importaría hablar de las elecciones lo esconde disimuladamente y al preguntarle expresamente por él contesta: "¿Esto? Me lo encontré tirado en la calle, no sé ni lo que es. Yo no sé de política".
Mónica, de 55 años, reconoce en cambio que es una de las votantes socialistas que se ha pasado al PP. "En las anteriores voté a Gabilondo, pero en estas he cambiado porque el PSOE no tenía nada que hacer estadísticamente. Para gobernar hubiera necesitado el apoyo de muchos partidos y Ayuso podía gobernar sola", señala.
En la Plaza Mayor, sentado en una terraza Alberto, de 46 años y profesional publicitario, teoriza sobre el porqué de la victoria 'popular': "Que ganaba Ayuso lo tenía claro. Se ha votado a la figura creada en torno a ella. Ha despertado la ilusión del votante de cualquier ideología".
“Gracias al PP he podido abrir y dar de comer a mis hijos, era una deuda moral“
Él ha votado a Más Madrid, el único partido que en su opinión podía condicionar las políticas de la región. "Dentro de la izquierda, lo menos malo. Ni PSOE ni Podemos cubren mis expectativas", asegura este joven que antes de su fusión con los morados votaba a IU.
Sergio -nombre ficticio- regenta uno de los bares de la plaza. "He votado al PP, es la primera vez. La única ayuda que he tenido ha sido del Gobierno regional. Gracias a ello he podido mantener el negocio abierto y dar a comer a mis hijos. Era una deuda moral", justifica.
No todos los hosteleros son de Ayuso
Otro de los hosteleros de la zona, sin embargo, discrepa. "A mí no me ha engañado [Ayuso]. Nos ha dejado abrir porque le interesaba, para no darnos ayudas directas. A mí la única ayuda me la ha dado el Gobierno central al principio de la pandemia", señala mientras explica que él se ha decantado por Más Madrid.
Jorge, sanitario de 53 años, también ha optado por la formación de Mónica García. "Soy votante del PSOE, pero no tiene proyecto desde hace tiempo. Tienen que reinventarse y pensar en los electores".
Alberto, de 64 años, hace tiempo antes de entrar a trabajar de vigilante de seguridad. Es votante de Vox. "Cuando iba a la universidad llevaba el puño y la rosa en la libreta pero he leído y el socialismo ha sido un cáncer para España. Llevaba 35 años votando al PP pero también me han defraudado. Vox son los únicos que dicen las cosas claras", señala.
José, que un día antes del 4M cumplió los 74 años, asegura que ha votado a Podemos-IU, a la "izquierda radical", bromea, y reconoce el mérito de Ayuso. "Ese porcentaje tan arrollador... Ha merecido ganar, se lo ha trabajado muy bien. La izquierda es muy difícil que llegue al poder, pero hay que pelear", concluye mientras se aleja con la bolsa de la compra. Le esperan en casa para comer.