En el barrio grancanario de "La Isleta" hasta las galerías de arte son solidarias
- Viviendas, garajes y bajos son espacios solidarios que brindan techo y comida a los migrantes sin techo
- Raban llegó en una patera con 48 personas, ahora duerme en una galería de arte
En el barrio de La Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria, numerosas viviendas, garajes y bajos son espacios solidarios, que brindan techo y comida a los migrantes que duermen al raso. Allí una galería de arte que se ha convertido en un espacio de solidaridad donde la vida humana es la más cotizada obra de arte.
Alecs llegó a Las Palmas de Gran Canaria en 2012, procedente de Ibiza y, un año después, abrió una galería de arte. En el estudio, construyó una pequeña habitación para los días que se queda a trabajar hasta muy tarde. Desde hace un mes, ese espacio lo ocupa un senegalés de 26 años llamado Raban. Alecs Navio Vasseur lo conoció en la playa de Las Canteras y allí se puso a hablar con él. "Le dije que viniera conmigo, le invité a un café y le dije que le podía proporcionar techo para dos personas, pues, un sitio donde dormir. Que esto no era una casa, que esto era mi estudio pero que, bueno, que si yo duermo aqui, ellos también".
Agradecidos por la solidaridad
Raban vino en una patera con otras 48 personas, entre ellas, 15 chicos de su barrio. "Je suis ici pour le travail, yo estoy aquí por el trabajo" dice y, añade, que está "súper agradecido·. Como los migrantes que cada día acuden a esta vivienda de la capital grancanaria.
Tito Martín, vecino de Las Palmas de Gran Canaria nos dice que en su garaje hay mucho trasto pero hay hueco también hay mucha soldiaridad. "Y hay un baño en el que se pueden asear y también, ya que vienen por las mañanas, pues también el tema del desayuno".
Mientras, un grupo de vecinos contribuye llenando la despensa y la nevera. La Isleta no es precisamente un barrio en el que sus vecinos tengan una posición económica desahogada pero siempre han mostrado empatía con los que necesitan más que ellos. En esta ocasión han compartido techo y comida con inmigrantes que pasaban sus días en la calle.