Marruecos llama a consultas a su embajadora en España y Calvo tacha de "agresión" la ola migratoria
- Este mismo martes, Arancha González Laya ha convocado a la diplomática a la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores
- Calvo insiste en "mirar para adelante en unas relaciones que tienen que ser de vecindad y cooperación"
El Gobierno marroquí ha llamado este martes a consultas a su embajadora en Madrid, Karima Benyaich, poco después de que ésta fuera convocada a la sede del Ministerio de Exteriores en España ante la entrada masiva de miles de migrantes a Ceuta de las últimas horas.
Fuentes diplomáticas marroquíes han dicho desconocer por el momento más detalles sobre esta llamada a consultas, que eleva la tensión entre Rabat y Madrid a niveles desconocidos en la última década. También se desconoce si tendrá un plazo preciso o la fecha de su retorno a Madrid queda abierta.
La última llamada a consultas de un embajador marroquí a Rabat se produjo en 2007, cuando Marruecos llamó al entonces embajador Omar Azziman para protestar por el anuncio de la visita de los Reyes de España a Ceuta y Melilla.
Benyaich ya fue convocada al Ministerio de Asuntos Exteriores el pasado mes de diciembre para pedirle aclaraciones sobre las declaraciones del primer ministro marroquí, Saadeddine El Othmani, en las que ha defendido que Ceuta y Melilla "son marroquíes como el Sáhara".
Laya transmite el "rechazo" del Gobierno por la situación en Ceuta
Este mismo martes, la ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha convocado a Benyaich y le ha trasladado el "disgusto y "rechazo" del Gobierno por la crisis migratoria en Ceuta y le ha recordado a la diplomática la "corresponsabilidad" en la gestión de las fronteras.
De igual modo, la titular de Exteriores ha expresado el "deseo" del Gobierno de "mirar al futuro" y "evitar que actos como éstos puedan volver a repetirse", y le ha pedido el "compromiso (de su gobierno) de que se puedan seguir retornando todos aquellos ciudadanos que hayan entrado de manera irregular" en España, según ha explicado en declaraciones a los periodistas.
Laya ha expresado además el deseo de España de mantener "relaciones de buena vecindad" y "estrechas" entre ambos países, según ha relatado en una comparecencia ante los periodistas, en la que no ha aceptado preguntas y no se ha referido a la presencia en España del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, ingresado en un hospital de Logroño por coronavirus.
Escalada de tensión
Aunque hasta ahora el Gobierno ha evitado atribuir a la situación de Ghali los últimos acontecimientos, las explicaciones ofrecidas por España basadas en "razones humanitarias" para su acogida no han satisfecho a Rabat, que el pasado 8 de mayo avisó de que extraería "consecuencias", afeando en particular el que no se le notificara de antemano.
En una entrevista con Efe por esa misma fecha, el ministro de Exteriores Naser Burita recordó a España que las relaciones bilaterales no pueden ser "a la carta", óptimas en ámbitos como la emigración y el terrorismo y opacas en lo referente al tema del Sáhara. "¿Quiere España sacrificar su relación con Marruecos por el caso Ghali", se preguntó Burita.
Marruecos también ha insistido estas últimas semanas en que la Justicia española debe actuar ante las denuncias presentadas contra Ghali por "genocidio" y "torturas", además de otro caso de presunta violación, pero el juez Santiago Pedraz, encargado del caso, ha rechazado imponer medidas cautelares contra él, por lo que podría salir del país.
La propia embajadora, en declaraciones a Europa Press, ha sostenido este martes que en las relaciones entre países hay actos que tienen consecuencias "y se tienen que asumir", insistiendo en que hay "actitudes que no se pueden aceptar". Según Benyaich, las relaciones entre países vecinos y amigos se tienen que basar en "la confianza mutua, que se tiene que trabajar y nutrir".
Calvo considera que España ha sufrido "una agresión" a sus fronteras
Preguntada sobre estas declaraciones, la vicepresidenta primera del Gobierno español, Carmen Calvo, ha señalado que no va a valorar "lo que decide otro país". "Me entristece que la embajadora de Marruecos haya sido llamada a consultas", ha señalado, al tiempo de que se ha mostrado convencida de que la situación va a "remontar" porque hay "intereses convergentes".
"Le he deseado que vuelva pronto y sigamos trabajando", ha dicho Calvo, que ha insistido en que la obligación del Gobierno es "reaccionar y mirar para adelante en unas relaciones que tienen que ser de vecindad y cooperación", si bien considera que España ha sufrido "una agresión" a sus fronteras.
Mientras tanto, la Unión Europea, que ha expresado este martes su solidaridad con España, ha recordado que "las fronteras españolas son fronteras europeas" y también ha solicitado a Marruecos que respete sus compromisos y combata la inmigración irregular. "La cooperación, la confianza y los compromisos compartidos deberían ser los principios de una relación fuerte entre la UE y Marruecos", ha dicho el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.