¿Qué es la Cúpula de Hierro israelí y de qué arsenal dispone Hamás?
- A Israel le cuesta alrededor de 66.000 euros interceptar cada cohete con la Cúpula de Hierro
- Hamás fabrica y almacena dentro de la red de túneles en la franja de Gaza la mayor parte de su arsenal
- Escucha Vivir Gaza, un podcast de Cristina Sánchez, corresponsal de RNE en Oriente Medio
Desde el inicio de la escalada bélica entre milicias palestinas e Israel hace más de una semana, Hamás --el grupo islamista que gobierna la Franja de Gaza--y la Yihad Islámica han lanzado más de 3.000 proyectiles hacia territorio israelí. El armamento menos sofisticado con el que cuentan las milicias palestinas y el sistema de defensa antiaérea israelí de la Cúpula de Hierro, capaz de interceptar hasta el 90% de los cohetes, ha garantizado y reflejado en el número de víctimas la abrumadora superioridad militar de Israel.
Los proyectiles lanzados desde Gaza han acabado con la vida de 12 israelíes, dos de ellos menores. Esta cifra es tan solo una fracción de los más de 200 palestinos, entre ellos 61 menores de edad, que han muerto por la ofensiva israelí. Las capacidades militares de Israel, con apoyo financiero de Estados Unidos, eclipsan a las de Hamás y la Yihad Islámica, que poseen cohetes con diseños básicos y de bajo coste.
¿Qué es la Cúpula de Hierro?
La Cúpula de Hierro de Israel, también conocida como Iron Dome, es un sistema de defensa antiaéreo desarrollado por las compañías israelíes Rafael Advanced Defense Systems (Sistemas de Defensa Avanzados Rafael) e Israel Aerospace Industries (Industrias Aeroespaciales de Israel). Además, su desarrollo contó con apoyo financiero y técnico de Estados Unidos.
Este sistema tiene sus raíces en la guerra de Israel con la milicia libanesa Hizbulá en 2006. El movimiento lanzó miles de cohetes contra Israel y causó decenas de muertes y enormes daños. La Cúpula de Hierro comenzó a funcionar cinco años después, en 2011.
La Cúpula de Hierro es capaz de rastrear y neutralizar todos los cohetes que entran en su zona defensiva, así como artillería y morteros, helicópteros e incluso drones. Además, puede calcular la trayectoria y el objetivo de los proyectiles que se aproximan, algo crucial, ya que permite que los ciudadanos israelíes tengan entre 15 y 90 segundos para dirigirse a sus refugios --según la distancia a la que se encuentren de la Franja de Gaza-- cuando suenen las sirenas.
¿Cómo funciona este sistema de defensa?
El Ejército israelí afirma que, desde que se inició la escalada bélica el 10 de mayo, Hamás y la Yihad Islámica han lanzado 3.440 proyectiles desde la Franja de Gaza hacia Israel. Además, las Fuerzas Armadas israelíes aseguran que 500 de esos lanzamientos han sido fallidos y, según la compañía Rafael Advanced Defence Systems, el sistema antiaéreo Cúpula de Hierro es capaz de interceptar más del 90% de los cohetes lanzados contra Israel.
Israel cuenta con diez baterías del sistema y cada una de ellas tiene alrededor de tres o cuatro lanzacohetes con 20 misiles cada uno, por lo que dentro del sistema hay alrededor de 600 misiles. Además, cuenta con una unidad que vigila todos los cohetes cuando se produce un lanzamiento. Sin embargo, la Cúpula de Hierro no cubre los 360 grados, según explica en una entrevista a RTVE.es el Almirante Ángel Tafalla ex Segundo Jefe del Estado Mayor de la Armada.
“Es como una linterna que está enfocada hacia donde se sabe que van a salir cohetes. Apunta a una dirección concreta, como Gaza”, explica el almirante. “Cuando de esa dirección salen cohetes, el sistema de radar lo sigue automáticamente sin intervención humana. Le sigue la trayectoria y dispara uno de esos 20 misiles (…) Cuando está cerca, abre un sensor electroóptico y el misil se guía. Después sale una cabeza de fragmentación y corta el cohete atacante”, añade.
Se calcula que interceptar un misil cuesta alrededor de 66.000 euros, una de las razones por las que el sistema intercepta únicamente los proyectiles que se dirigen a áreas pobladas.
¿Qué tipo de cohetes lanzan Hamás y Yihad Islámica desde Gaza?
Aunque la Cúpula de Hierro cuente con una tasa de éxito del 90%, algunos misiles lanzados desde la Franja de Gaza pueden llegar a zonas pobladas. Las milicias palestinas disponen de una gran variedad de cohetes, pero tienen un diseño básico. Además, tienen un bajo coste, lo que supone una ventaja sobre el sistema antiaéreo israelí.
“En el ámbito tecnológico, la tecnología de Israel es muy superior a la de Hamás, pero si miramos el punto de vista de la eficacia y el coste, la ventaja puede residir del lado de Hamás”, afirma el investigador principal del Real Instituto Elcano Félix Arteaga.
Hamás, que controla la Franja de Gaza desde 2007, comenzó a producir el cohete Qassam durante la segunda intifada, pero desde entonces ha logrado que su armamento tenga un mayor alcance y cargas explosivas mayores.
“Las milicias palestinas básicamente están usando hasta ahora un cohete que se llama Qassam de unos tres o cuatro metros, cargado con un explosivo en la punta. Los ponen en unos hierros, los disparan y eso va más o menos hacia donde lo apuntan”, señala el almirante Tafalla. Sin embargo, la principal debilidad de este tipo de cohetes es que “no tienen precisión”. “Algunos de esos cohetes caen sobre la propia Gaza o explotan en el aire al salir”, asevera.
Los cohetes Qassam poseen un alcance de aproximadamente 10 kilómetros, pero Hamás también cuenta con cohetes de mediano y largo alcance que pueden llegar hasta Jerusalén, Tel Aviv o el aeropuerto de Ben Gurión, como el M-75 o el J-80. El movimiento islamista palestino ha afirmado también que dispone de un misil con un alcance de 250 kilómetros, que podría caer en cualquier zona de Israel.
Por su parte, la Yihad Islámica tiene almacenados en Gaza alrededor de 8.000 cohetes, la mayoría de pequeño y medio alcance, aunque también cuenta con algunos de largo alcance.
¿Cómo consigue y cómo financia Hamás su arsenal?
En el pasado, algunos países aliados de Hamás y la Yihad Islámica --ambos considerados grupos terroristas por Estados Unidos--, como Irán, les proporcionaba armas y equipos a través de túneles a lo largo de la frontera sur de Gaza con Egipto.
Sin embargo, la mayor parte de sus arsenales actualmente provienen de su capacidad de fabricación dentro de la propia Franja de Gaza, aunque los conocimientos y la asistencia de Irán han desempeñado un papel importante en las habilidades de producción.
“No es necesario un gran aparato tecnológico industrial para montar o desarrollar cohetes. No hace falta más que instrumentos básicos de guiados y eso se ha estado desarrollando en fábricas locales, en sótanos, garajes…”, asegura Arteaga, quien destaca que las milicias palestinas también obtiene material en mercados de segunda mano, algo que “en todo Oriente Medio es algo muy habitual”.
“Hamás no tiene armamento sofisticado. Ha desarrollado una red de comunicaciones y lo fabrican artesanalmente y lo mueven por una red de túneles que está debajo de Gaza”, ha indicado el almirante Tafalla.
Por esta razón, los lugares en los que Hamás y la Yihad Islámica fabrican y almacenan su armamento –tanto edificios como la red de túneles de Hamás-- se encuentran entre los principales objetivos de los ataques israelíes. El Ejército de Israel ha reconocido que el bombardeo sobre la red de túneles ha provocado el colapso de varios edificios utilizados para fines civiles, causando “bajas no deseadas”.
Se calcula que Hamás posee alrededor de 14.000 cohetes, de los cuales la mayoría son los Qassam, cuya fabricación cuesta entre 250 y 650 euros cada uno. Sin embargo, a Hamás no le supone nada reponer su arsenal, ya que se cree que Irán entrega o paga la mayoría de los cohetes del movimiento islamista.
La superioridad militar del ejército de Israel
En la escalada bélica entre el Ejército israelí y las milicias palestinas, Israel ha demostrado una vez más tener un poderío militar mucho mayor, ya que cuenta con aviación --como los aviones F-35, F-16 y F-15--, un ejército regular y marina, así como con la financiación de Estados Unidos. “Hamás no tiene nada parecido a eso. La diferencia es abismal”, subraya el almirante.
“Los israelíes tienen una variedad de plataformas de lanzamiento aéreos, navales o terrestres, que no tienen las milicias palestinas, que solo pueden lanzar desde tierra lo que tienen. En ningún caso es comparable la diversificación”, indica Arteaga.
El investigador principal del Real Instituto Elcano asegura, además, que otra ventaja con la que cuentan las Fuerzas Armadas israelíes es “la inteligencia que tienen sobre el terreno”. “Saben dónde está cada uno de los miembros importantes de las milicias o de los grupos a los que ataca. Eso les permite actuar rápidamente con precisión”, añade.
“Hamás es una organización que, aunque tiene financiación de algunos países árabes, no tiene a nadie detrás. En cambio, Israel es un país pequeño pero moderno y tiene detrás a Estados Unidos”, asegura el ex Segundo Jefe del Estado Mayor de la Armada. “Lo que hace Estados Unidos básicamente es apoyar al Ejército israelí en dos modalidades: financiando la adquisición de armamento norteamericano y financiando la producción en Israel de armamento sofisticado, como la Cúpula de Hierro”, asevera.
Israel es el mayor receptor de ayuda exterior de Estados Unidos desde la Segunda Guerra Mundial. Desde entonces, el Gobierno estadounidense ha proporcionado a Israel 146.000 millones de dólares (alrededor de 120.000 millones de euros) en asistencia bilateral y financiación de defensa antimisiles, según datos del Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos. Actualmente, la mayor parte de la ayuda bilateral de Estados Unidos a Israel consiste en asistencia militar, aunque entre 1971 y 1997 también recibió ayuda económica.