El pequeño Nicolás niega que un amigo le suplantase en selectividad: "Me presenté yo los tres días"

• Se enfrenta a una petición de condena de cuatro años y seis meses de cárcel por presuntamente falsificar su DNI
• La Fiscalía relata que una policía le ayudó a conseguir un DNI con sus datos personales y la fotografía del otro acusado

El pequeño Nicolás (i) a su llegada a la Audiencia Provincial el pasado 11 de mayo

Francisco Nicolás Gómez Iglesias, más conocido como el pequeño Nicolás, ha negado este jueves haber utilizado a un amigo para que le suplantase en el examen de selectividad de 2012. "Me presenté yo los tres días" ha manifestado a preguntas del fiscal.

Gómez Iglesias, que ha declarado en el tercer juicio que se celebra contra él en la Audiencia Provincial de Madrid, se enfrenta a una petición de condena de cuatro años y seis meses de cárcel por un delito de falsedad de documento oficial por presuntamente falsificar su Documento Nacional de Identidad (DNI).

El pequeño Nicolás se ha sentado en el banquillo por segunda vez este mes tras enfrentarse al juicio por su viaje a Ribadeo (Lugo), cuando presuntamente se hizo pasar por un enlace de Vicepresidencia del Gobierno y la Casa Real.

Gómez Iglesias dice conocer "circunstancialmente" al joven

Según en el escrito de acusación del Ministerio Público, el acusado acordó con un amigo, Manuel Avelló, que a cambio de una gratificación económica este se presentaría a la prueba en su nombre con un DNI que mostrara los datos personales de Gómez Iglesias y la fotografía de su compañero. Sacó un 8,25 cuando su nota media en el Bachillerato apenas superaba los cinco puntos.

El acusado ha respondido con evasivas a todas las preguntas, llegando a asegurar que reconoce ahora a Avelló por haberse estudiado las actuaciones contra él, y situándolo de manera "circunstancial" tan solo entre los "entre 3.000 y 4.000 contactos" que tendría entonces en su teléfono como "director de salas de discoteca".

Ha dicho también no recordar un apunte que se encontró en su domicilio en el que aparece escrito: "Manu Avelló 12.000"; y tampoco el chat llamado 'Selectividad', aportado por un testigo, en el que se hablaba de su suplantación para hacer el examen, alegando que ya habían transcurrido nueve años desde que ocurrieron los hechos.

También ha negado conocer en aquel momento a comisarios de la Policía, alegando que en esa época "decía muchas tonterías".

Una agente habría ayudado presuntamente a falsificar el DNI

Además de Gómez Iglesias, están procesados en la causa el joven que presuntamente se hizo pasar por él en el examen y una policía acusada de ayudarle a conseguir un DNI con sus datos personales pero con la fotografía del otro acusado. Para ambos el Ministerio Público solicita cuatro años de cárcel por delito de falsedad en documento oficial.

En su declaración, Avelló ha asegurado que no se presentó a la selectividad en nombre de Gómez Iglesias, al que conocía "de salir de noche por Madrid". Ha afirmado, además, que se enteró de la existencia del DNI falso por una amiga, que le avisó de que su foto en el documento aparecía en los informativos, y ha sugerido que foto pudo ser sacada por cualquiera de sus redes sociales.

La Fiscalía relata que Gómez Iglesias acudió a la oficina para tramitar su DNI en el distrito de Tetuán (Madrid) y la agente, conocida suya,  le ayudó a conseguir un documento de identidad con dichas características. A pesar de que cambió la imagen y la firma en el nuevo DNI, la funcionaria -que ha asegurado no recordar los hechos- no guardó el talón-foto, alegando al tribunal que "nunca lo hacía", ya que el sistema informático de la comisaría así se lo indicaba.

Contradiciendo su declaración, el jefe policial de la investigación ha explicado durante su testimonio que esa instrucción del sistema electrónico de expedición de documentos oficiales no existía y que la acusada miente en este sentido.

Según la Fiscalía, el jefe de estudios estaba también al tanto

Por otro lado, según el escrito de acusación del fiscal, el jefe de estudios del Instituto J.Y.J. también estaba al tanto de los planes del joven. En su caso, debía conseguir información sobre el profesor que iba a encargarse de los alumnos del centro educativo durante los exámenes de selectividad, ya que si conocía a Francisco Nicolás "truncaría todas las posibilidades de ser suplantado" y, a cambio, Gómez Iglesias prometió trabajo a sus hijas y a la pareja de una de ellas.

Francisco Nicolás hizo creer a una de las hijas que tenía una "estrecha relación" con el presidente del Grupo Pascual, Tomás Florencio Pascual. Con este objetivo,  creó una cuenta de correo electrónico simulando que era el alto cargo del grupo de lácteos y le escribió varios mensajes asegurándole que iba a ser contratada en la empresa, de tal modo que ésta dejó su puesto de trabajo.

La vista continuará el viernes con la declaración en calidad de testigos de compañeros de clase de los procesados y varios empleados de la oficina de DNI.