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Investidura en Cataluña

Aragonès es investido con la mayoría independentista pese al "escepticismo" de sus socios con la mesa de diálogo

  • Obtiene la mayoría absoluta del separatismo en la Cámara para un Govern de ERC y Junts dirigido a "culminar la independencia"
  • La CUP llama a la "insurrección democrática" y advierte de que le retirará el apoyo si "claudica" ante el Estado

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Aragonès es investido presidente de la Generalitat con la mayoría independentista

Pere Aragonès (ERC) ha sido investido presidente de Cataluña este viernes en primera vuelta gracias a la mayoría absoluta del independentismo en el Parlament, ante el que el líder republicano ha reiterado su compromiso para “culminar” la independencia. Lo ha hecho pese al “escepticismo” de sus socios, Junts y la CUP, respecto a la mesa de diálogo con el Estado y suscribiendo en todo momento el “acuerdo de mínimos” firmado con ambas formaciones. Pero los anticapitalistas han ido más allá y han advertido de que su apoyo no es un “cheque en blanco” y lo retirará si “claudica” ante el Estado.

La investidura de Aragonès ha sido posible gracias a los 33 votos a favor de ERC, los 32 de Junts y los nueve de la CUP. En contra, los 61 diputados del PSC, Vox, En Comú, Ciudadanos y el PP, quienes le han reprochado sus metas rupturistas, su acuerdo con Junts y han pronosticado que no habrá grandes cambios respecto al Govern anterior.

Aragonès, tras ser investido 'president': "Trabajaré con humildad y con ambición colectiva"

Una vez investido, Aragonès ha destacado el “honor y gran responsabilidad” que siente sobre sus “espaldas”, ha reivindicado el referéndum ilegal del 1-O y se ha abrazado con el presidente de ERC, Oriol Junqueras, presente gracias a un permiso penitenciario. “Trabajaré con honorabilidad, poniendo por delante la ciudadanía de Cataluña”, ha afirmado, comprometiéndose a gobernar "para todos". “Tienes que servir a los que sufren porque serán siempre tus señores”, ha expuesto, por lo que se ha presentado “con toda la humildad” pero también “con toda la ambición colectiva”, con “espíritu de servicio y valores republicanos”. Y ha concluido su discurso con un ‘viva Cataluña libre’.

Antes de la votación, el ya nuevo 'president' catalán ha reconocido que la negociación por la independencia “no será fácil” pero el soberanismo irá “con toda la fuerza” siendo “conscientes de las dificultades” que aparecerán por el camino pero, también, “buscando una solución democrática para que no haya gente en la cárcel por sus ideas”.

Aragonès ha asegurado que hoy “se puede abrir una nueva etapa” con esta “mayoría independentista y de progreso”, pero ha advertido de que esta victoria de ERC debe convertirse en “una victoria de país”. “Lo será si somos capaces de hacer posible que la reconstrucción económica y social llegue a todos, partiendo de la pluralidad, la diversidad de ideas y de proyectos para que toda la ciudadanía pueda verse identificada y representada por el Parlament, la Generalitat y el Govern”, ha defendido. Por último, se ha comprometido a ser "el presidente de todos".

Dos debates y tres votaciones para convertirse en 'president'

A Aragonès le han hecho falta dos debates de investidura y tres votaciones para ser investido. El primero tuvo lugar en marzo, pero Junts lo torpedeó diciendo ‘no’ a Aragonès en primera votación y absteniéndose en la segunda, exigiendo un “buen acuerdo de investidura”. Hicieron falta más de tres meses de reproches mutuos, rupturas y reconciliaciones desde las elecciones del 14F. Tres meses con la sombra de la repetición electoral hasta que el pasado lunes llegó dicho acuerdo para un Govern con meta independentista de 14 consejerías, siete para cada partido. Ahora, el soberanismo se muestra unido para “culminar” la independencia que no lograron en 2017. Pero Aragonès, tal y como ha firmado con la CUP, deberá someterse a una cuestión de confianza en 2023, cuando el secesionismo decidirá hacer un “embate democrático” al Estado si la vía de diálogo con el Gobierno ha fracasado.

Oriol Junqueras se abraza con Pere Aragonès tras la investidura del candidato de ERC como 'president'

Oriol Junqueras se abraza con Pere Aragonès tras la investidura del candidato de ERC como 'president' REUTERS/Nacho Doce

El pleno de investidura se ha reanudado este viernes con la presencia del líder de ERC, Oriol Junqueras, que ha obtenido un permiso penitenciario para poder acudir a la investidura de su número dos y ha recibido el reconocimiento en forma de aplausos de las bancadas independentistas. También ha habido un recuerdo por parte de los portavoces de Esquerra y la CUP a los "presos y exiliados".

A debate este viernes, la propuesta de Aragonès hecha un día antes para “culminar la independencia” y liderar una “Generalitat republicana” de izquierdas y su apuesta por imitar el modelo independentista de Escocia, instando a España a pactar un referéndum como Reino Unido. El jueves, Albert Batet (Junts) le ofreció su “lealtad” pese al “escepticismo” de la mesa de diálogo con el Estado. Y el líder del PSC y ganador de las elecciones, Salvador Illa, prometió una oposición “contundente” y sin margen para el independentismo pero le ofreció apoyo para afrontar la pandemia y para la gestión de los fondos europeos.

En el hemiciclo se ha colado también de lleno la crisis migratoria en Ceuta. El primero en referirse a ella ha sido el líder parlamentario de Vox, Ignacio Garriga, quien ha advertido al candidato de que será “cómplice de un secuestro” si acoge menores migrantes en Cataluña. Pero Aragonès ha anunciado que responderán a la situación en Ceuta y Melilla “acogiendo a los menores que sea necesario": "Ante el odio, conciencia humanitaria". También la CUP ha mostrado su solidaridad en todo momento con los migrantes, pero igualmente con los palestinos que están sufriendo la crisis en Israel y con el pueblo colombiano.

La CUP advierte: “Estaremos en la oposición si claudican ante el Estado”

El diputado de la CUP Carles Riera ha llamado a la “insurrección democrática” entre los partidos independentistas, la sociedad civil y las instituciones sociales y ha advertido a Aragonès: “Ustedes han firmado un embate democrático para ejercer la autodeterminación en esta legislatura y los acuerdos se cumplen”. “Estaremos en la oposición radicalmente si se desdicen o si claudican ante el Estado, porque para que las instituciones sean verdaderamente republicanas, deben ser insumisas”, ha avisado. “Hay que generar toda la inestabilidad, la irrupción que permita que se abra un espacio de libertad y que la lucha de este pueblo se plasmen en realidades”, ha proseguido, porque ello “requiere de este desequilibrio en las estructuras del poder”. Ha llamado, por tanto, a “generar desestabilidad en el Estado y en el régimen”. Pero también a “derribar los muros del capitalismo, del patriarcado. del régimen del 78 y del fascismo”.

Antes que él ha tomado la palabra la líder de la CUP, quien ha asegurado que la vía del diálogo que pretende ERC con el Gobierno central es una “vía muerta” que “no va a llevar a la solución del conflicto” sino que seguirá permitiendo “una vulneración flagrante” de esos derechos en un marco de “excepcionalidad política”. “Estaremos en la mesa de diálogo, aunque no creemos en ello, pero respetamos que ustedes participen”, ha afirmado sin embargo. Pero ha pedido a todos los partidos independentistas que empiecen a hacer “efectivo el acuerdo por la autodeterminación”. Sabater ha advertido de que los votos de la CUP no son “un cheque en blanco”, ya que el acuerdo firmado es un acuerdo “de mínimos” para “orientar la legislatura hacia la izquierda”. En este sentido, ha advertido de que “si durante las próximas semanas no se retira la represión contra el movimiento de defensa de la vivienda y no se retiran los antidisturbios ante los desahucios, la CUP no podrá mantener esta mayoría parlamentaria”.

La oposición carga contra el rupturismo y el "cambio de cromos" en el Govern

El líder parlamentario de Vox, Ignacio Garriga, ha lamentado que “hoy se escribe un capítulo triste en la historia” de Cataluña porque el “único objetivo”del independentismo es “fomentar el odio y la confrontación”. Ha postulado a Vox como la “principal oposición en la Cámara, en los tribunales y en las calles” frente a la reactivación del golpe de Estado” en Cataluña. Sus herramientas serán, dice, el “cumplimiento constitucional, el Estatuto de Autonomía y el Código Penal”. “Defenderemos la soberanía nacional, la monarquía parlamentaria y el cumplimiento íntegro de las penas de los políticos que cometieron los delitos más graves de la democracia”, ha asegurado. Ha calificado el independentismo como “mafia”, ha reprochado la gestión del Govern en la pandemia con el cierre de comercios y el "infierno fiscal" y ha respondido al "no pasarán" de Aragonès así: “Hemos pasado, pasaremos y les desalojaremos”.

La líder parlamentaria de En Comú Podem, Jéssica Albiach, ha desmentido a Aragonès al asegurar que lo que presenta “no es un cambio de Govern” sino de “cromos”, un vuelco respecto al gobierno anterior de JxCat y ERC. Aún así, ha tendido la mano a Aragonès para llegar a acuerdos a favor de la ciudadanía y le ha pedido "generosidad". También le ha advertido de que estará sometido al llamado Consejo de la República que lidera Carles Puigdemont en el extranjero, pese a que diga “que no habrá tutelas”: “Usted no se ha leído el acuerdo con detenimiento, porque está claro”. Y ha criticado que en su propuesta no hay “avances sociales" sino que ha estado “más preocupado de contentar a Junts” durante el debate. "Esta fórmula de Govern no es deseada, está hecha a regañadientes y no genera ilusión” sino que, tras “relaciones tensas e incluso rotas en algunos momentos, nace con una credibilidad escasa”.

El líder parlamentario de Cs, Carlos Carrizosa, ha criticado que la idea de “único pueblo” que ha defendido Aragonès implica la “uniformidad” que impone el independentismo. También le ha reprochado que hable de imitar el modelo escocés y le ha pedido “poner los pies en el suelo”: “Me parece increíble que esta sea su obsesión en plena pandemia (...) las prioridades no son esas)”. A su juicio, ERC y Junts han “demostrado que son incapaces de gobernar” y ha avisado al nuevo ‘president’ de que el límite de la Generalitat no debe ser la voluntad de la ciudadanía, como ha dicho, sino “siempre la ley”.

Por último, el líder del PPC, Alejandro Fernández, ha asegurado que Aragonès será un “presidente honorífico” que estará “teledirigido desde Waterloo de forma obscena” y ha criticado que insista en “la idea suicida del conflicto con España”. “Ustedes viven del conflicto”, ha apostillado, y ha pedido al independentismo que “no manipule” ni “engañe” porque la autodeterminación y la amnistía será “imposible”. "Si quieren hacer como los escoceses, vayan al Congreso de los Diputados y acepten la votación que de ahí surja. Y sobre la amnistía, les recuerdo que la malversación es un delito muy grave, y ahí no cabe la amnistía", ha zanjado.

Una vez investido 'president', la presidenta del Parlament, Laura Borràs, no se reunirá con el rey Felipe VI para comunicarle el resultado de la votación como tampoco lo hicieron sus antecesores Carme Forcadell y Roger Torrent, tras las investiduras de Carles Puigdemont y Quim Torra en 2016 y 2017. "Hay medios a nuestra disposición, como cartas o correos electrónicos, para poder hacer esta comunicación", ha dicho Borràs antes del pleno en declaraciones a TV3.