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Coronavirus

Las residencias navarras recuperan la "normalidad"

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Normalidad en las residencias de Navarra

Antes de la pandemia resultaba muy complicado conseguir una plaza en una residencia pública de Navarra. La demanda casi superaba a la oferta y esto obligaba a que muchas personas optaran a un centro muy alejado de su domicilio y de su familia. Una situación que obligaba a un sobreesfuerzo para poder vistarlos de manera asidua. El COVID tuvo una incidencia especialmente dolorosa en estos centros, y puso en tela de juicio la infraestructura necesaria para luchar contra la enfermedad. La edad fue el principal obstáculo porque convertía a estas personas en el centro de las secuelas más graves e incluso de la mortalidad.

Hubo casos, como la Residencia San Jerónimo de Estella, en la que se confinaron cuidadores y residentes e impidieron los contagios. Otra estrategia empleada por el gobierno de Navarra fue la de crear espacios COVID, para sacar a las personas contagiadas de sus residencias y tratar de parar los transmisión del virus.

Las vacunas han dado vuelta a la situación

Estas medidas no fueron suficientes, hasta que llegaron las primeras vacunas. En este momento todas las personas mayores de 70 años han completado la pauta de vacunación y ya se empiezan a ver los resultados. A la bajada general de casos en Navarra se une el hecho de que en estas residencias ya no hay apenas positivos. El siguiente paso ha sido el de flexibilizar los protocolos. Las autoridades sanitarias aseguran que ahora son centros seguros y han puesto en marcha una campaña para recuperar la confianza y elevar el nivel de ingresos.

Nos permitirá recuperar poco a poco los ingresos en residencias

En el año y medio de pandemia se han dejado de ocupar más de 750 plazas de las 6.000 existentes.

Normalidad

Para los residentes la vuelta a la normalidad es la mejor noticia que podían recibir. Se mejora la posibilidad de recibir visitas de sus familias y amigos, que es la otra vacuna que necesitan para luchar contra el pesimismo. Pero también ellos lo tendrán más facil para salir a dar un paseo lejos del recinto y reunirse con conocidos y amigos con los que recuperar el pulso de la vida.

Y en el interior también se recuperan actividades casi olvidadas en este año y medio de pandemia. Se volverán a las reuniones, a las clases y a los juegos,siempre ,eso sí, guardando las medidas de seguridad necesasrias para todos a la hora de luchar contra el contagio.