Sánchez pide a Aragonès buscar una solución para Cataluña con "generosidad": "Busquemos juntos un nuevo 'nosotros'"
- Aragonès dice que es "una oportunidad y una obligación" retomar el diálogo pero reconoce que será "difícil"
- Ambos coinciden en Barcelona en un acto por el 250 aniversario de Fomento del Trabajo
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido delante del presidente catalán, Pere Aragonès, la necesidad “ineludible” de buscar una “solución” para Cataluña encaminada hacia el "reencuentro". Sin mencionar explícitamente la mesa de diálogo entre gobiernos, ha llamado a las dos partes a ser “generosos y responsables” y a “esforzarse unos y otros”. El 'president', por su parte, ha coincidido en que "es una oportunidad y una obligación" y ha reconocido que el Gobierno central ha dado algunos "pasos", pero cree que el diálogo será "extremadamente difícil". Todo, el mismo día en que el líder de ERC, Oriol Junqueras, ha apoyado los indultos y renunciado a la unilateralidad.
Ambos presidentes han coincidido por primera vez desde que Aragonès fue investido durante un acto en Barcelona de condecoración al editor Javier Godó en el 250 aniversario de Fomento del Trabajo. La semana pasada, ambos mantuvieron una conversación telefónica de unos 40 minutos en la que coincidieron en apostar por el "diálogo" para avanzar en la resolución del conflicto catalán y se emplazaron a una reunión este mes en La Moncloa.
“Busquemos juntos un nuevo nosotros, cambiemos las amenazas por las propuestas y busquemos soluciones con pragmatismo, honestidad y sentido común”, ha defendido Sánchez.
El presidente del Ejecutivo ha llamado a dejar de lado "esa dialéctica estéril de los unos y los otros". "Cambiemos las amenazas por propuestas, vengan de donde vengan, y no busquemos justificaciones o revanchas, sino soluciones", ha proseguido Sánchez. Ese nuevo “nosotros” será nuestro mayor éxito como sociedad”, ha proseguido.
A la sociedad catalana y española: "No podemos seguir así"
Después, ha hecho un "llamamiento" no solo a los "agentes económicos, a los líderes políticos y a las instituciones" sino también a la sociedad catalana y española: "Hemos vivido demasiado tiempo encerrados en dilemas estériles, en posiciones estrechas, en callejones sin salida. No podemos seguir así".
"Ha llegado el momento", ha subrayado el presidente, "de dar pasos que nos permitan de una vez avanzar", y de hacerlo "con decisión, con serenidad y con sentido de la justicia, buscando en todo momento el beneficio del conjunto de la ciudadanía por encima de la pequeñez de los intereses partidistas o de los cálculos electorales".
"No habrá mayor beneficio para esa ciudadanía catalana y española que dejar atrás un escenario de conflicto que, tantos años después, solo ha traído un triste balance de dolor, pobreza y estancamiento", ha continuado.
Por ello, ha pedido "a todos" tener "valentía y sentido de la ejemplaridad, sea cual sea su oficio y condición; viva donde viva". "Porque no van a ser las posturas maximalistas las que nos permitan recobrar la convivencia y la fortaleza perdida que tanto necesitamos en este contexto decisivo", ha defendido, y ha advertido: "Nos jugamos el futuro. Y el futuro vendrá de la mano del reencuentro. Y el reencuentro solo se alcanzará con argumentos, con razones que nos hablen del camino que tenemos juntos por delante".
"No podemos fallar", ha proseguido, añadiendo que la pandemia "deja un mundo en transformación" y con "cambios inminentes y revoluciones en muchos terrenos". "En nuestra mano está asumirlos y liderarlos, en vez de perder el tren de esta nueva modernidad. Apostemos, pues, por la concordia y por el reencuentro como arma de progreso, y pongámonos a trabajar”, ha concluido.
Aragonès defiende el diálogo pero reconoce que habrá dificultades
Antes que él, ha hablado Aragonès, quien también ha defendido que "es una oportunidad y una obligación" retomar el diálogo, aunque ha reconocido que habrá dificultades.
Ha constatado que el Gobierno ha dado pasos para avanzar en la solución al conflicto, pero ha advertido de que "no es normal que haya presos políticos y exiliados, y que Cataluña no pueda decidir su futuro".
Esa es, ha dicho, la postura de Cataluña y ha reconocido que “España tiene la suya”. “Todas las posturas se tienen que valorar con el mismo respeto y consideración”, ha afirmado, pese a partir “de posiciones alejadas”. Ha reconocido así que la apuesta del independentismo pasa por “la autodeterminación y la amnistía”
“Nos toca afrontar una nueva etapa y poner soluciones sobre la mesa”, ha defendido. “Tenemos que abrir una etapa de diálogo y negociación para llegar a acuerdos", ha añadido.
“Toca volver al camino del diálogo y la negociación”, ha aseverado, pero ha reconocido que “no será sencillo”. “Será muy difícil, extremadamente difícil, pero es una oportunidad”, ha zanjado.
Una mesa de diálogo paralizada desde febrero de 2020
Pese a que ambos coinciden en la necesidad de dialogar, la reanudación de la mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat sigue sin fecha y el Ejecutivo no da muestras de que prevea reactivarla pronto, pese a la insistencia de Esquerra, que pide que haya una fecha "pronto" para un nuevo encuentro.
La mesa entre gobiernos es la apuesta de ERC para alcanzar un referéndum pactado con el Estado de Cataluña y que Junts y la CUP han asumido con recelos dado que los republicanos son quienes lideran el independentismo tras las elecciones catalanas del 14F.
Sin embargo, Aragonès se comprometió en su pacto de investidura con los anticapitalistas a una cuestión de confianza en 2023, a mitad de legislatura, para que el soberanismo evalúe si su estrategia ha dado frutos o si se decide realizar un "embate democrático" al Estado y avanzar hacia la independencia de forma unilateral.
A la espera de los indultos y de la reforma del delito de sedición
Por otra parte, este encuentro se da también a la espera de que el Gobierno tome su decisión sobre los indultos a los líderes del 'procés', que previsiblemente será favorable dada la postura tanto de Sánchez como del resto de miembros del Ejecutivo.
Este lunes, el líder de ERC, Oriol Junqueras, ha publicado una carta en la que renuncia a la vía unilateral en Cataluña y da la bienvenida por primera vez de forma explícita a los indultos a los líderes del 'procés' como "gesto" para "aliviar el conflicto", algo que ha avivado las críticas entre PP, Vox y Ciudadanos.
El ministro de Política Territorial, Miquel Iceta, ha estimado este lunes que la decisión se dará antes del verano. "No creo que falte mucho", ha afirmado en una entrevista en la Cadena Ser, donde ha afirmado que indultar sería una decisión "bastante sensata si estamos empeñados en el diálogo y en la reconciliación".
Pero entretanto, el Ejecutivo trabaja también en la reforma de Código Penal relativa al delito de sedición, por el que fueron condenados principalmente los líderes independentistas responsables del 1-O. Una reforma que podría dar consistencia jurídica a los indultos si finalmente se acaban produciendo, ya que actualmente éstos cuentan con el informe desfavorable del Tribunal Supremo y de la Fiscalía.