Tras un año y medio de parón, vuelve la feria
- El ayuntamiento de Ávila ha permitido a los feriantes instalarse en la ciudad para reactivar su economía
- No han podido acogerse ni a las ayudas ni a los ERTES
Vuelven los saltos, el algodón dulce y los coches de choque. Una de las primeras capitales de provincia en revitalizar el sector ha sido Ávila, cuyo ayuntamiento ha permitido a los ferientes abrir durante cuatro semanas para reactivar su economía tras el parón de la pandemia. Solo en la provincia de Ávila la feria da de comer a más de treinta familias muy numerosas.Para Óscar López, feriante con una caseta de lanzamiento de dardos, el poder abrir tras dieciocho meses sin ingresos ni ayudas "es como un balón de oxígeno".
“Agradecería a todos los alcaldes que abrieran la mano y vieran que al aire libre no hay peligro“
La presidenta de la Asociación de Feriantes de Ávila, Pilar López Maíllo, asegura que desde que empezó la pandemia se han sentido abandonados. Tributan como parte de la siderurgia pero no están reconocidos como sector empresarial. Por eso, no han podido acogerse a los ERTE ni optar a las ayudas reservadas para el ocio y los espectáculos. López Maíllo que ha pasado su vida ligada a la feria como lo hicieron sus padres recuerda que ni durante la Guerra Civil se paró de trabajar. Agradece la oportunidad que les ha dado el Ayuntamiento de Ávila de instalarse cuando no se celebra ninguna fiesta en concreto. Y añade que "Agradecería a todos los alcaldes que abrieran la mano y vieran que al aire libre no hay peligro".
Medidas de seguridad
En cada atracción de la feria hay dispensadores de gel hidroalcohólico. Los niños y niñas solo comparten vagón si son convivientes. Tanto los feriantes como los padres aseguran que guardando las medidas de higiene y tratándose de una actividad al aire libre no hay peligro de contagio. La presidenta de la Asociación de Feriantes de Ávila asegura estar sorprendida de lo concienciados que están los más pequeños a la hora de evitar los contagios.