Enlaces accesibilidad
Economía

Biden convence al G7 para lanzar un gran plan de infraestructuras que contrarreste el avance de China

  • Pretende "responder a las necesidades tremendas de infraestructuras en los países de ingresos medios y altos"
  • Quiere ser una alternativa al proyecto chino "Una ruta, un cinturón", que pretende revitalizar la conocida como Ruta de la Seda
  • Los líderes de la UE y las autoridades comunitarias recuerdan a Johnson que el Reino Unido debe cumplir los acuerdos del Brexit

Por
El primer ministro británico, Boris Johnson, posa con los líderes del G7 para la foto de familia durante la cumbre del G7 en Carbis Bay, Reino Unido
El primer ministro británico, Boris Johnson, posa con los líderes del G7 para la foto de familia durante la cumbre del G7 en Carbis Bay, Reino Unido.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha convencido al resto de líderes del G7, reunidos en una cumbre en Carbis Bay, Reino Unido, para lanzar un gran plan de infraestructuras que contrarreste el avance de China.

En ese sentido, los dirigentes del G7 ha acordado este sábado lanzar la iniciativa Build back better for the world (Reconstruir mejor para el mundo) para "responder a las necesidades tremendas de infraestructuras en los países de ingresos medios y altos", ha informado la Casa Blanca en un comunicado.

En concreto, irá dirigido a naciones de Latinoamérica, el Caribe, África y el Indopacífico.

El plan quiere ser una alternativa al proyecto chino One Belt, One Road (Una ruta, un cinturón), que pretende revitalizar la conocida como Ruta de la Seda mediante la modernización de infraestructuras y telecomunicaciones para mejorar la conectividad entre Asia y Europa.

Biden pone el foco sobre China

El Gobierno estadounidense ha indicado que su iniciativa de infraestructuras es una colaboración entre las grandes democracias para llevar a cabo un proyecto guiado por "los valores, con altos estándares y transparentes". El plan "ayuda a estrechar las necesidades de más de 40 billones de dólares en infraestructuras que necesita el mundo en desarrollo, y que se ha visto exacerbada por la pandemia de COVID-19", ha dicho la Casa Blanca.

La propuesta estadounidense pretende movilizar capital del sector privado para impulsar proyectos en cuatro ámbitos: el clima, la seguridad sanitaria, la tecnología digital y la igualdad de género, además de contar con inversiones de instituciones financieras.

Biden está poniendo el foco sobre China, que compite por la hegemonía mundial frente a EE.UU. , durante esta cumbre de los líderes de las democracias más industrializadas del mundo (EE.UU., Reino Unido, Alemania, Francia, Italia, Canadá, Japón, más la Unión Europea).

En paralelo, Biden está presionando al G7 para que adopte "una acción concreta" contra los "trabajos forzados" en la provincia noroccidental china de Xinjiang, donde vive la minoría uigur. El presidente quiere que "se deje claro al mundo que creemos que estas prácticas son una afrenta contra la dignidad humana y un ejemplo indignante de la competencia económica injusta por parte de China", ha señalado la fuente estadounidense.

La UE insta a Londres a respetar los acuerdos del Brexit

Por otra parte, los líderes de los mayores países de la Unión Europea y las autoridades comunitarias han hecho frente común en sus reuniones con el primer ministro británico, Boris Johnson, para recordarle que el Reino Unido debe cumplir los acuerdos que suscribió al salir de la UE.

Johnson ha mantenido entrevistas bilaterales con el francés Emmanuel Macron, la alemana Angela Merkel y los presidentes de la Comisión, Ursula von der Leyen, y el Consejo Europeo, Charles Michel, antes de reanudar las sesiones plenarias de la cumbre del G7.

La cuestión del protocolo sobre Irlanda del Norte, elemento nuclear del Acuerdo de Salida que rubricaron Reino Unido y la UE, ha centrado las conversaciones, como han reconocido posteriormente las partes implicadas, sin que hayan trascendido avances por el momento.

Las autoridades comunitarias han sido contundentes al salir de su entrevista con Johnson: "Ambas partes deben implementar lo que se acordó. Hay unidad completa en la UE sobre esto", han subrayado en Twitter Von der Leyen y Michel.

Ambos han recordado que el Acuerdo de Viernes Santo, de 1998, y la paz en Irlanda son "capitales" y que el protocolo suscrito por Londres "preserva" esos avances. "Queremos las mejores relaciones posibles con el Reino Unido", han subrayado los máximos responsables de la administración comunitaria.

Por su parte, Boris Johnson ha trasladado a sus interlocutores que espera "pragmatismo y concesiones" por parte de todos al tiempo que se protege la paz en Irlanda del Norte. Según un portavoz de Downing Street, oficina del primer ministro británico, Johnson está comprometido con "buscar soluciones prácticas dentro del marco del protocolo que protejan los objetivos del Acuerdo de Viernes Santo y minimicen el impacto en la vida diaria de los habitantes de Irlanda del Norte".

El próximo 30 de junio expira el período de gracia pactado con el Reino Unido para el comienzo de la aplicación de controles aduaneros en el mar de Irlanda a productos cárnicos procesados, algo que Londres baraja prorrogar de forma unilateral. Ante lo que ya se conoce como la "guerra de las salchichas", la UE se plantea responder con aranceles a las medidas unilaterales británicas.