Nueve de cada diez españoles respiraron aire contaminado en 2020, a pesar del confinamiento
- La contaminación atmosférica se redujo de manera muy significativa por efecto de las restricciones de la pandemia
- Ecologistas en Acción ha presentado el informe La calidad del aire en el Estado español durante 2020
La contaminación atmosférica en España se redujo en 2020 a los niveles más bajos de la última década por efecto de las limitaciones impuestas por la pandemia de COVID-19, aunque aproximadamente 42 millones de españoles, casi un 90% de la población, respiró aire contaminado, según el informe La calidad del aire en el Estado español durante 2020, presentado este martes por Ecologistas en Acción.
El documento refleja que las restricciones tanto de movilidad como económicas impuestas por la pandemia conllevaron una mejora general "sin precedentes" en la calidad del aire, aunque esta situación excepcional no impidió que la contaminación se extendiera a 402.000 kilómetros cuadrados de superficie en todo el país.
Pese a la mejora en los niveles de contaminación, Madrid siguió incumpliendo los límites legales de dióxido de nitrógeno y otras 30 zonas superaron los objetivos en ozono.
El informe recoge datos de 800 estaciones oficiales de medición instaladas en toda España, algunas de ellas en los principales puertos y aeropuertos y concluye que durante 2020 mejoraron "sustancialmente" con una reducción "notable" de los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2), dióxido de azufre (SO2) y ozono troposférico, y más matizada de los de partículas en suspensión (PM10 y PM2,5), en sus mínimos de la última década y seguramente también desde que existen mediciones, en 1990.
Ecologistas en Acción precisa que si se tienen en cuenta los estándares de la normativa europea, que son más laxos que las recomendaciones de la OMS, fueron 8,5 millones de personas en España las que respiraron aire contaminado por encima de los límites legales, que suponen 4 millones de afectados menos respecto a 2019. Mientras, la superficie expuesta a niveles de contaminación dañinos para la vegetación alcanzó a 210.000 kilómetros cuadrados, el 42% del territorio y unos 40.000 kilómetros cuadrados menos que el año anterior.
El año más cálido desde que hay registros
El informe también resalta que 2020 fue el año más calido desde que se cuenta con registros homogéneos -1961-. En este contexto, las bajas precipitaciones y la estabilidad atmosférica de los primeros meses de 2020 activaron episodios de contaminación por partículas, en su mayor parte procedentes del norte de África, conocidos como "calima". La primavera en cambio resultó inestable y húmeda, favoreciendo la dispersión y deposición de los contaminantes típicamente invernales (NO2 y partículas). Eso sí, el intenso calor estival no se tradujo en un aumento de las concentraciones de ozono.
En cuanto al ozono, el estudio refleja que "un año más" presentó una mayor extensión y afección a la población. No obstante, la frecuencia de las superaciones de los estándares legal y de la OMS ha fue "muy inferior" a la de años precedentes, con un descenso del 55% y del 41%, respectivamente, en relación con el promedio de las registradas en el periodo 2012-2019, en el conjunto del Estado, y una caída drástica en las superaciones del umbral de información.
Por otro lado, analiza también las partículas (PM10 y PM2,5), el dióxido de nitrógeno (NO2) y el dióxido de azufre (SO2) en el aire, que en 2020 afectaron a "algo más de la mitad" de la población. Pese al desplome general del NO2 en un 27% respecto al nivel medio entre 2012 y 2019, Madrid siguió incumpliendo los límites legales de NO2, por lo que la organización recuerda que el Tribunal Europeo de Justicia sigue instruyendo un proceso contra España, que podría derivar en multas millonarias.
Sin embargo, las partículas aumentaron en algunas comunidades, debido a la mayor frecuencia de los episodios de intrusión de polvo africano, en especial durante el primer trimestre del año. En este contaminante destaca Canarias, que registró el peor episodio de contaminación de la década durante enero y febrero y la ONG afea que "sin intervención alguna por parte de las administraciones", hasta que al final del episodio la población fue confinada a consecuencia de la pandemia.
Reducción de la movilidad y la actividad económica
Según el informe, el factor "esencial" que explica esta mejora de la calidad del aire en 2020 fue una reducción general de la movilidad y la actividad económica derivada de los dos estados de alarma, además del cierre de la mayoría de las centrales térmicas de carbón que "también parece haber contribuido localmente a la drástica disminución de las emisiones".
El informe responsabiliza al tráfico motorizado de ser la principal fuente de contaminación en las áreas urbanas, donde se concentra la mayor parte de la población y señala que en determinadas áreas fabriles y en el entorno de las grandes centrales termoeléctricas son estas fuentes industriales las que condicionan de manera decisiva la calidad del aire. El transporte aéreo y marítimo tiene gran repercusión en la calidad del aire del entorno de aeropuertos y puertos.
Para Ecologistas en Acción, la contaminación del aire debe "abordarse como un problema de primer orden" ya que cada año se registran unas 30.000 muertes prematuras en España por afecciones derivadas de la contaminación del aire, según la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA).
El Instituto de Salud Carlos III indica que 10.000 de ellas fallecen en episodios de alta contaminación. Por ello, para Ecologistas en Acción la mejora de la situación en 2020 es "una excelente noticia".