La Fiscalía pide imputar al presidente de Iberdrola, Sánchez Galán, por el espionaje de Villarejo

• La causa investiga si la eléctrica contrató los servicios del excomisario para espiar, entre otros, al presidente de ACS
• Iberdrola reconoció en dos investigaciones internas que había contratado a Villarejo, pero para servicios de tipo ordinario

El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.

La Fiscalía Anticorrupción ha pedido la imputación del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, en la causa Tándem, que investiga si la eléctrica contrató los servicios del excomisario José Manuel Villarejo para espiar, entre otros, al presidente de ACS, Florentino Pérez.

Anticorrupción, según han informado a TVE fuentes jurídicas, ha presentado un escrito al titular del juzgado central nº 6, Manuel García Castellón, en el que interesa también que se impute a otras tres personas: el 'número dos' de Iberdrola, Francisco Martínez Córcoles, el expresidente de Iberdrola España, Fernando Becker, y el ex jefe del Gabinete de Presidencia Rafael Orbegozo.

El caso data de finales de 2019, después de que se publicara que Iberdrola contrató a Villarejo para espiar a un juez, infiltrarse en plataformas contrarias a los intereses de la eléctrica, hostigar a miembros del comité de empresa de la central nuclear de Cofrentes o investigar a un accionista crítico con la gestión de la empresa.

El juez García Castellón imputó al jefe de seguridad de Iberdrola, Antonio Asenjo, por revelación de secretos y cohecho en el marco de la pieza 17 del caso Tándem, en la que se investigan estos supuestos encargos de Iberdrola a al excomisario de Policía, como los presuntos trabajos de espionaje a ACS.

Conversaciones entre Villarejo y el responsable de seguridad de Iberdrola

Esta solicitud del Ministerio Público, a la que ahora debe dar respuesta el magistrado, llega tras la celebración de la junta de accionistas del Iberdrola, y después de que se incorporara en mayo a la causa un nuevo informe de Asuntos Internos en el que se analizaban conversaciones mantenidas entre el entonces comisario y el responsable de Seguridad de Iberdrola Antonio Asenjo.

En dos investigaciones internas, abiertas en noviembre de 2018 y julio de 2019, Iberdrola reconoció que se había contratado a Villarejo entre 2004 y 2017 para 17 servicios, pero de tipo ordinario y propios de la Dirección de Seguridad Corporativa y siempre cumpliendo todos los controles de la compañía.

A finales del pasado mayo la eléctrica envió un escrito al magistrado en el que le planteaba la declaración voluntaria de todos los administradores y empleados, incluido Sánchez Galán, con el objetivo de acabar con las especulaciones.

En una comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Iberdrola denunciaba que la tramitación de esta pieza separada del caso Villarejo sobre los negocios del excomisario, "ha sido aprovechada por competidores que, directa o indirectamente, han atacado la reputación y buen nombre de la compañía".