Macrobrotes, o el peligro de olvidar cuándo hay riesgo en exteriores: "Podemos repetir el error del verano pasado"
El macrobrote de coronavirus originado en un viaje de fin de curso a Mallorca deja más de 600 positivos entre estudiantes de siete comunidades y más de 2.000 jóvenes en cuarentena. Con la temporada de vacaciones recién estrenada y el optimismo latente por la relajación de la norma de las mascarillas, la noticia llega como un jarro de agua fría: ¿es esto el preludio de otro verano de rebrotes?
"Nos puede venir muy bien precisamente para no lanzarnos a pensar que esto se ha terminado. Porque no se ha terminado. Yo creo que es una advertencia: tenemos todavía virus para rato", responde a RTVE.es Alberto Torres, jefe de Medicina Preventiva del hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, poniendo énfasis en que no olvidemos cuando hay peligro de contagio también al aire libre.
"Ojo: se percibe euforia y podemos repetir error verano pasado. Con que tengamos una pequeña ola, el turismo caería en picado...", advierte el epidemiólogo Joan Caylà. Ambos especialistas coinciden en la amenaza que supone la variante Delta para este verano: "Es más transmisible y tiene un mayor riesgo de hospitalización".
El riesgo del virus en exteriores: ¿cómo identificarlo?
Ante estos datos, Torres reprocha la mala pedagogía y excesiva banalización del riesgo en espacios abiertos, especialmente ahora que la mascarilla pasa a no ser obligatoria cuando se pueda mantener la distancia de seguridad al aire libre. "Hay que matizar las situaciones. No quiere decir que en el exterior no tengamos riesgo", avisa.
“"'Si esta persona estuviera infectada, ¿estaría yo en una situación de riesgo?' Si tu respuesta es sí, ponte la mascarilla". “
Existen escenarios sin peligro de contagiarnos, en los que la persona camina sola o con convivientes por un espacio abierto, cuando no haría falta llevar mascarilla. Asimismo la probabilidad de transmisión es "prácticamente nula" en un cruce rápido de dos personas por la calle. Ahora bien, a partir de ahí, las posibilidades son variadas y entran en juego factores como si se lleva protección respiratoria o no, cuál es la distancia entre las personas, cuánto tiempo vamos a permanecer hablando, etc.
"La pregunta es: 'si esta persona estuviera infectada, ¿estaría yo en una situación de riesgo?' Si tu respuesta es sí, ponte la mascarilla", aconseja Torres. "Probablemente en estas macrofiestas se habrán visto muchas situaciones en las que han estado cerca unos de otros, sin mascarilla, cantando, saltando. En esas situaciones se generan muchos aerosoles y hay oportunidad de transmisión".
El catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública reconoce que existe un factor de "azar" en la transmisión del coronavirus, que puede llevar a que una misma escena acabe o no en brotes como el que se ha visto entre estudiantes esta semana. La presencia del virus o de un supercontagiador es una lotería y está vez cayó en Mallorca.
Vacunación y rastreos más rápidos para marcar la diferencia
Por ello, el epidemiólogo Joan Caylà llama a concienciar tanto a la población más joven como a responsables políticos y sanitarios. Para los primeros, a través de redes sociales o en colaboración con Youtubers, como hizo el presidente francés Emmanuel Macron. A las autoridades, les recuerda que la incidencia está ya en aumento en algunas comunidades autónomas y que es necesario el estudio de casos "de convivientes y no convivientes".
“"Tenemos a gente con casi 70 años sin proteger"“
En este sentido, Torres exhorta a mejorar y automatizar nuestros sistemas de rastreo, como hizo Corea del Sur desde el comienzo de la pandemia. "Si consigues adelantar la identificación unos días, aunque sea uno o dos, el efecto a nivel población es muy importante, porque estás reduciendo mucho el riesgo de transmisión", señala.
Porque, además, todavía existe población vulnerable al virus que no está del todo protegida. El médico preventivista alerta sobre las bajas coberturas de vacunación de las personas entre 60 y 69 años: menos del 35 % de la población de esa edad tiene la pauta completa, una cifra inferior a la que se ha logrado con el grupo de 50 a 59 años. "Hace falta que esa población esté vacunada porque tenemos a gente con casi 70 años sin proteger. Me parece tremendo", ha lamentado.