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Economía

El turismo rural cántabro afronta la temporada estival con optimismo

El presidente de la Asociación Cántabra de Turismo Rural, Jesús Blanco, afirma que “hay una vuelta a lo más auténtico”

Aunque las expectativas son muy favorables, Blanco cree que quizá “no sea un año tan bueno como el anterior” para su sector

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El turismo de espacios abiertos gana terreno tras la pandemia

El turismo de naturaleza, el turismo rural, gana posiciones al turismo masivo de sol y playa. Lo ha asegurado en el programa Encuentros de RNE en Cantabria el presidente de la Asociación Cántabra de Turismo Rural, Jesús Blanco. Confirma que esperan una buena temporada de verano, aunque quizá no sea tan favorable como la del pasado año, cuando en plena pandemia y sin muchas alternativas fuera del país, los turistas “inundaron” Cantabria.

Entrevista completa:

Encuentros. Con Jesús Blanco Escuchar ahora

Precisamente eso es lo que valora Blanco, que este verano sí que habrá muchas más opciones para los turistas, y por eso, aunque confía en tener una buena temporada, piensa que quizá no lo será tanto como la de 2020. “Las cosas están marchando bien. El mes de junio comenzó fuerte tras el cierre perimetral, y las expectativas nos hacen pensar en una buena temporada. Un mes después de la normalización de la situación, estamos más o menos en los parámetros de un verano normal. Eso hacer prever que el verano va a estar bien, pero quizá no tan bien como el año pasado”, señala.

Toda la gente que ha empezado a disfrutar de nuestra tierra, vuelve, repite, y se nota cada fin de semana

Con todo, el presidente de la asociación de alojamientos rurales confía en las características de la oferta de Cantabria. “Ofrecemos una mayor seguridad sanitaria por la amplitud de los espacios verdes, de los jardines, la propia amplitud de nuestros valles, creo que eso es algo que da seguridad” Jesús Blanco confirma que las prioridades del turista han cambiado en un sentido que beneficia a su sector, frente al turismo masivo de sol y playa. “Hay un cambio, sin duda., Una vuelta a buscar lo más auténtico, no la masa, sino estar más aislados con zonas amplias de rutas, de paisajes, de entornos, de aire puro, de estar con la familia y sin grandes peligros ni ruidos”.

Hubo muchos turistas que vinieron a la región por primera vez el año pasado, y Blanco está convencido de que “toda esa gente que ha empezado a disfrutar de nuestra tierra, vuelve, repite, lo ha contado, y se nota en los fines de semana con tiempo favorable. Cantabria se llena en cuanto sale el sol”.

Preocupación por el desarrollo eólico

La Asociación de Turismo Rural se muestra preocupada por el desarrollo eólico. Asume que habrá que instalar aerogeneradores en Cantabria, pero considera que se deben preservar algunas zonas. “En ciertos valles de Cantabria la presencia de aerogeneradores va a alterar ese paisaje que es el que hace que la gente venga y repita. Es una situación complicada, porque somos conscientes de que habrá que tener energía eólica”.

Jesús Blanco afirma que el turismo rural ha sido lo que más ha dinamizado los pueblos y paliado la despoblación de los mismos, generando numerosas iniciativas en torno a los alojamientos.