ARCO 2021 abre con ventas "cuantiosas" y negociaciones por obras como el 'Guernica' de Ibarrola
- La feria cumple 40 años, pero lo celebrará en 2022
- Santiago Sierra y Eugenio Merino, polémicos en ediciones anteriores, vuelven por separado
ARCO inicia este miércoles su nueva edición, con obras de autores como Agustín Ibarrola, Santiago Sierra y Eugenio Merino. La feria de arte contemporáneo de Madrid cumple 40 años, aunque la celebración se pospone hasta 2022. La excepcionalidad de sus fechas, del 7 al 11 de julio, no ha supuesto un paso atrás en el inicio de ventas ni en las negociaciones por las obras más atractivas.
Destaca el Guernica de Ibarrola, obra del maestro vasco que ha estado olvidada durante cuatro décadas. El mural consta de diez paneles y mide 10 metros por dos de altura. Fue realizado en 1977 con la idea de reivindicar el traslado del Guernica de Picasso desde el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) a un futuro museo en la ciudad de Guernica.
La galería José de la Mano ha recuperado esta pieza para la ocasión. Su director ha confirmado a Europa Press que negocian su venta con tres instituciones, dos públicas y una privada, aunque no ha querido desvelar su precio.
"Tanto nosotros como la familia teníamos decidido que esta obra debe acabar en una institución pública o en una privada con vocación a ese servicio. Estábamos obligados, porque no queríamos que vuelva a estar oculta", ha señalado el propio De la Mano, en referencia al tiempo en el que la obra se mantuvo en el estudio de Ibarrola.
Helga de Alvear ha comprado por el momento cinco obras, como una escultura de Richard Serra en la galería Guillermo de Osma. La galería Senda ha vendido un tríptico de Gino Rubert al MNAC por 87.000 euros y Cuerpos celestes de Glenda León por 12.000 euros. El stand también cuenta con la escultura Sitting tattoo, de Jaume Plensa, todavía a la venta por 350.000 euros.
La galería ADN tiene dos piezas reservadas, una del artista Abdelkader Benchamma por 16.000 euros y otra de Mounir Fatmi por 23.000 euros. Juana de Aizpuru, por otra parte, ya ha vendido una escultura de los años 80 de Cristina Iglesias.
Por el momento, la obra más cara es 2ª blanca (Gran escritura blanca nº 2), de Jesús R. Soto, que Cayón vende por más de un millón de euros. Leandro Navarro pide 780.000 euros por un Picasso, mientras que en Guillermo de Osma hay un Richard Serra de medio millón de euros.
Vuelven los polémicos Santiago Sierra y Eugenio Merino
Helga de Alvear y ADN exponen piezas de Santiago Sierra y Eugenio Merino, respectivamente. Sierra originó la polémica de 2018 con Presos políticos, retirada de ARCO. Repitió en la edición de 2019 junto a Merino: crearon un Ninot de Felipe VI con el requisito de que su comprador lo quemase. Merino, por su parte, expuso en 2013 Always Franco, por la que fue demandado por la Fundación Francisco Franco.
En esta ocasión, Santiago Sierra acude a ARCO con unas fotografías de veteranos de guerra (Vietnam, Camboya...) de cara a la pared, cuyo precio es de 22.000 euros. Merino expone varias piezas, desde una urna por 4.800 euros hasta una enmarcación de la declaración de los derechos humanos de precio similar.