Enlaces accesibilidad
Sudáfrica

El expresidente sudafricano Jacob Zuma se entrega para cumplir prisión por desacato

  • Se entregó a la Policía poco antes de vencerse el plazo para su detención por desacato tras negarse a declarar por corrupción
  • El exmandatario emitió varios comunicados asegurando que iría a la cárcel antes que a declarar

Por
El expresidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, habla con sus partidarios después de comparecer ante el Tribunal Superior en Pietermaritzburg, Sudáfrica, el 17 de mayo de 2021.
El expresidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, habla con sus partidarios después de comparecer ante el Tribunal Superior en Pietermaritzburg, Sudáfrica, el 17 de mayo de 2021.

El expresidente sudafricano Jacob Zuma se entregó a la Policía a última hora de este miércoles, poco antes de vencerse el plazo impuesto por la Justicia para su detención tras haber sido condenado a 15 meses de cárcel por desacato, por haberse negado repetidamente a declarar por corrupción.

"El presidente Zuma ha decidido acatar la orden de encarcelamiento. Va camino de entregarse en un centro de los servicios penitenciarios en (la provincia de) KwaZulu-Natal", ha confirmado la Fundación Jacob Zuma en un comunicado emitido minutos después de que, alrededor de las 23.15 horas (21.15 GMT), un amplio convoy de vehículos partiera de la residencia de exjefe de Estado.

Pasada la medianoche, el portavoz del Ministerio de Seguridad sudafricano, Lirandzu Themba, ha confirmado oficialmente que el expresidente había quedado bajo "custodia" policial, si bien no se difundieron los detalles exactos de su ubicación.

La decisión de Zuma de entregarse llegó tras varios días de incertidumbre y de vanos intentos de su equipo legal de retrasar la entrada en prisión del expresidente.

En paralelo, simpatizantes de Zuma mantenían guardia en su residencia (en la oriental provincia de KwaZulu-Natal) desde la semana pasada y amenazaban con enfrentarse a las fuerzas de seguridad si se presentaban para detenerlo.

Pena de prisión por no presentarse a declarar por corrupción

Zuma, de 79 años, había sido condenado el pasado 29 de junio por el Tribunal Constitucional del país a 15 meses de prisión por negarse repetidamente a acatar las órdenes judiciales que le obligaban a testificar ante una comisión oficial que investiga la presunta corrupción ocurrida durante su presidencia (2009-2018).

El polémico exgobernante considera que esa investigación -conocida en Sudáfrica como la "Captura del Estado"- y el juez que la lidera buscan destruir su legado.

Zuma ignoró las citaciones incluso después de que el Tribunal Constitucional especificara que eran de obligado cumplimiento. Esto activó un proceso por "desacato", en el que el exmandatario también se negó a participar.

Lejos de retractarse, Zuma emitió varios comunicados asegurando que iría a la cárcel antes que a declarar y cuestionando la imparcialidad de los jueces sudafricanos.

Intentos para bloquear su entrada en prisión

La semana pasada, el Tribunal Constitucional finalmente dictó un castigo de 15 meses de cárcel por el desacato y Zuma tenía hasta el 4 de julio para entregarse voluntariamente, pero dos días antes sus abogados tramitaron de urgencia dos peticiones para intentar bloquear su entrada en prisión.

La primera fue una solicitud al Constitucional para que escuchara los argumentos del exmandatario para una rescisión de la pena (en base a argumentos como su salud, su edad y la supuesta violación de sus derechos).

El máximo tribunal sudafricano accedió y celebrará una audiencia al respecto el próximo 12 de julio.

La segunda vía se discutió este martes en el Tribunal Superior de la localidad de Pietermaritzburg (de menor rango que el Constitucional): una petición para que la orden de arresto quedara en suspenso hasta que finalizase todo el proceso.

Sin embargo, esa corte, cuya jurisdicción para este caso no está clara, aplazó su veredicto hasta el próximo viernes, dejando en pie la orden de encarcelamiento original emitida por el Constitucional.

En ese complicado contexto legal, la Policía tenía instrucciones de asegurar la detención del exmandatario antes del final de este miércoles 7 de julio.

Aunque a última hora los abogados de Zuma mandaron una nueva carta al Constitucional pidiendo suspender el arresto, finalmente el exmandatario se entregó al filo de expirar el plazo, sin esperar a que las fuerzas de seguridad acudieran a su residencia a detenerlo.