La asesora de Montero niega que hiciera de niñera y dice al juez que solo sostuvo a su hija "unos segundos"
- Alega que sostener durante este tiempo en brazos a la hija de una compañera no implica hacer labores de niñera
- Asegura que no cobraba de Podemos sino del Congreso cuando en 2019 fue al acto electoral de Alicante que se investiga
La jefa de Gabinete de Irene Montero, Teresa Arévalo, investigada por el conocido 'caso niñera', ha defendido este miércoles ante el juez que sostener durante "unos segundos" en brazos a la hija de una compañera no implica hacer labores de cuidado de niños, al tiempo que ha alegado que no cobraba de Unidas Podemos sino del Congreso cuando en 2019 fue al acto electoral de Alicante que se está investigando.
Así lo ha declarado este miércoles durante una comparecencia en el juzgado de Instrucción 46 de Madrid, que investiga si la ministra de Igualdad, Irene Montero, usó a una empleada de Podemos -ahora asesora del Ministerio- como cuidadora de su hija durante la campaña electoral de 2019.
Según fuentes jurídicas a RTVE, Arévalo le ha confirmado al juez que sí acudió al acto electoral de Alicante en 2019 como dirigente de Podemos y candidata, pero que por entonces no cobraba del partido, sino del grupo parlamentario por ser diputada y jefa de gabinete de la portavoz en el Congreso. Además, ha recalcado que sostener en brazos "unos segundos" a la hija de una compañera no implica hacer labores de niñera.
El próximo lunes están llamados a declarar en el mismo juzgado y como imputados la exgerente de Podemos Rocío Esther Val y al tesorero de esta formación, Daniel de Frutos. La ministra de Igualdad tiene condición de aforada y, por tanto, el órgano competente para investigarla sería el Tribunal Supremo, pero el magistrado libró oficio a la Comisaría del Congreso de los Diputados para notificar la apertura de este procedimiento "a los efectos legales oportunos". El PP pidió investigar en la cámara a Montero, pero la Junta de Portavoces rechazó su propuesta.
El abogado que representa a Podemos Raúl Maíllo ha negado que la asesora se encargase de otras funciones que no fuesen las de jefa de gabinete de la portavocía, a la vez que ha expresado la posibilidad de que Arévalo hubiese sostenido durante "unos segundos" a la hija de la ministra como pudo haber hecho "cualquier otro compañero".
Podemos tacha de "machista" la formulación del procedimiento
En declaraciones a los periodistas a las puertas de los juzgados de Plaza de Castilla, que recoge Efe, el abogado que representa a Podemos Raúl Maíllo ha negado que la asesora se encargase de otras funciones que no fuesen las de jefa de gabinete de la portavocía, a la vez que ha expresado la posibilidad de que Arévalo hubiese sostenido durante "unos segundos" a la hija de la ministra como pudo haber hecho "cualquier otro compañero". Asimismo, ha reiterado que la investigada no cobraba del partido en el momento en que se produjeron supuestamente los hechos, un viaje a Alicante durante la campaña electoral de 2019.
Desde Podemos alegan que la investigación se centra únicamente en el pago del billete de tren con el que la asesora viajó hasta Alicante y tachan de "machista" la formulación del procedimiento.
Por su parte, la abogada de Vox y una de las partes de la acusación popular, Marta Castro, ha indicado que la asesora no ha aclarado "quién cuidaba de la niña" y ha sostenido que los "segundos" que alega Arévalo no se corroboran con el viaje a Alicante y "el tiempo que se emplea en una campaña electoral".
El inicio de la causa judicial
El titular del Juzgado de Instrucción Número 46 de Madrid, José María Escribano, abrió en abril diligencias previas por un presunto delito de administración desleal contra Irene Montero y Teresa Arévalo para determinar si esta trabajadora realizaba funciones de cuidadora de la hija menor de la ministra pagada con fondos públicos. En concreto, Arévalo habría acompañado a la entonces candidata y su hija en un viaje que tuvo lugar el 20 de octubre de 2019 a la ciudad de Alicante para participar en un acto electoral y Montero supuestamente habría dejado a la niña al cuidado de la asesora mientras intervenía en el evento.
El juez inició la investigación sobre estos acontecimientos, al entender que "los hechos que resultan de las anteriores actuaciones presentan características que hacen presumir la posible existencia de una infracción penal".